Prólogo
Siento caer pequeñas gotas de agua en mi cabeza, abro lentamente mis ojos tratando de descifrar de donde proviene, pero es en vano, siento una punzada en mi pie izquierdo y los ojos me pesan como si tuviera un candado colgando de ellos, poco a poco tomo fuerzas e intento pararme, pero siento en mis pies una sensación pegajosa, abro los ojos de golpe y me encuentro en una completa oscuridad, mis pies hundiéndose en el barro y ese constante goteo en mi cabeza que aumenta mi desesperación, pronto siento un olor asqueroso y es ahí cuando me doy cuenta que el lugar en donde me encuentro es en una alcantarilla, no recuerdo nada, el miedo se apodera de mí, siento como mis ojos se llenan de lágrimas al sentir mi cuello ardiendo e identificar aquella marca, su marca… Es ahí donde mi mente dice ¡corre! ¡corre! y salgo de aquella alcantarilla adentrándome en un rudo bosque que me corta y rasga mi piel junto con mi vestido, todo está oscuro, no sé por dónde ni hacia donde voy, solo huyo lejos de ese lugar antes de que me encuentren, guiándome por los rayos plateados de la tenue luz de la luna, corro sin parar, sin mirar atrás hasta que una luz enceguecedora me bloquea el paso, doy dos pasos hacia atrás mientras veo a esos hombres bajarse del auto -¡Oh por Dios! ¡Son ellos!...- Me siento acorralada, pálida, estoy perdida….