CAPÍTULO 4.- Please bury me with him. Part. 1

Durante su velorio tuve la esperanza de que despertaría en cualquier momento, no aceptaba que él, ya no estaría más a mi lado. La madre de Anthony y yo caminábamos detrás del ataúd llorando como maría magdalena, sentíamos que el alma se nos iría muy pronto, porque, este dolo era insoportable.

Todo esto me había enfermado, ya no sonaba cuerda, Silvana no me dejaba sola por nada del mundo quería evitar que yo perdiera el control, siempre me regresaba a mis cabales para no perderme en el inframundo de la oscuridad.

Mi madre también estaba ahí junto a Vannesa, mi hermana al verme en el estado en que estaba se puso a llorar.

VANNESA: ¡¡Creo que ya lo perdimos!!! ¡¡Mama, perdimos a mi hermana!!!

Mi madre no dijo nada, pero, en su rostro se veía reflejado el dolor al ver a su hija en ese estado, se colocó lentes de sol para que no la vieran afligida y se mantuvo en silencio durante todo el entierro.

Después de que el sacerdote hablara comenzaron bajarlo para enterrarlo, yo me lance gritando.

YO: ¡¡¡Nooooo, esperen, llévenme a mí también!!! ¡¡¡ Quiero irme con él, por favor, que no me deje!!! ¡¡Llévenme con él!!! Mientras lloraba.

Los sepultadores me detuvieron con fuerza para no caer encima del ataúd, pelee con ellos para que me soltaran, quería irme con Anthony, no me imaginaba una vida sin él. Mi hermana y Silvana me abrazaron suplicándome que me calmara mientras lloraban.

Al termino del entierro todos comenzaron a retirarse, todos menos yo, no quería alejarme de ese lugar. Mis primos llegaron al verme ahí tirada a lado de su lapida, se rieron de mí y me tomaron del brazo para alejarme de ahí con brusquedad. Yo luche con ellos..

QUEVIN: ¿No ves que ya está muerto? ¿Crees que llorando o llamándolo harás que regrese?

ANDRES: ¡¡¡Ya se murió!!! ¿Que no lo ves?

YO: ¡Para mí no! Para mi Anthony sigue con vida, con vida ¿entienden? - y me solté de ellos con brusquedad.

ANDRES: ¡Vamos, Quevin, déjalo que la entierren junto a ella!! ¡No vamos a rogarla! - Le jalo del brazo para que se fueran.

Vannesa y Silvana me tomaron del brazo para alejarme de ahí mientras trataban de tranquilizarme, fue el momento más horrible de mi vida. Los momentos que pase con él vinieron a mi mente como imágenes de recuerdo y solo atine a llorar sin consuelo al recordarlo.

SRA. MARIBEL: ¡Yo también lo ame es mi hijo! Pero, no tenemos el poder sobre la muerte. - dijo ella reapareciendo por detrás mío.

Yo volteé a verla y corrí a sus brazos llorando.

YO: ¡Mamá! ¿Porque, porque, tenía que irse?

SRA. MARIBEL: ¡No somos dueños de nuestro destino! ¡Sé que amaste a mi hijo, por eso estoy agradecida, pero, ya es hora de dejarlo ir! ¡Este es lo que el eligió! ¡Tenía la oportunidad de irse al extranjero con su hermano, pero se quedó por ti, para que no te sintieras sola! ¡Se feliz por los momentos que compartiste con él, porque no le gustaría vernos así si estuviera con vida!

Nos abrazamos y lloramos juntas, mi hermana y Silvana también estaban conmovidas por mí. Y todo el público también quedaron conmovidos por nosotros, incluyendo mi madre, pero disimulo.

Al termino de todo cada uno comenzaron a retirarse a sus casas, al ver a mi madre junto a mis primos, me dirigí hacia ellos.

YO: ¡Tú, siempre le odiaste, sin embargo, viniste! ¿Por qué? ¿Querías estar segura de que realmente estaba muerto? Ahora ya no habrá a quien puedas odiar, tus deseos se cumplieron, él nunca volverá ¿estás feliz? ¿O fuiste tú quien lo mato? - mi madre parecía sorprendida por la acusación que acababa de hacerle.

VANNESA: ¿Cómo te atreves acusar a mamá de asesina? ella no lo mato, ese día estuvo en la casa con nosotras y lo sabes bien, ¡discúlpate con ella! - reacciono mi hermana a favor de mi madre.

YO: ¡No me voy a disculpar, porque no dije nada malo, sé que ella tiene algo que ver con la muerte de mi prometido, y lo voy a descubrir, anthony no tenía más enemigos que ella y aunque hubiera estado en casa ese día nadie puede probar de que no haya contratado sicarios que lo asesinaran! si no me lo va decir ¿cómo planearon su asesinato? yo los voy a mandar investigar y muy pronto se sabrá. - voltee para irme.

MAMÁ: ¡¡Espera!!- me detiene ella. -¡lo odie sí, pero, jamás lo asesinaría! ¿Cómo puedes sospechar de mí? ¡Soy tu madre, y aunque él no me agradó, yo jamás lo lastimaría!