Calientan el matraz en el mechero encendido, el líquido hierve y se torna azul. El vidrio se quiebra y suelta el vapor, los presentes comienzan a actuar extraño, sus voces son intercambiadas y no saben lo que dicen. A alguien se le cae el matraz y la sustancia sale de él. Acaban de descubrir un nuevo elemento, pero no lo saben. Inevitable es que los demás lo noten, todos ellos han quedado con una conexión psíquica. Sus mentes quedaron entrelazadas.