Delirando por la fiebre la niña dió el recado a su mamá: la abuela dice que está bien. Asombrada por el comentario le preguntó donde la había visto, por lo que la niña respondió: aquí, ella está aquí, vestida con una bata blanca. La madre comenzó a llorar nerviosa y balbuceaba con voz infantil: y mi mamá? dónde está mi mamá? la hija la acogió en su regazo diciéndole: aquí estoy, aquí estoy, yo soy tu mamá.