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07/12/2023

Querido "51":

Comprendo que todo lo que hiciste, lo hiciste pensando en mí, en mi bienestar y estabilidad. Fue un gesto hermoso, pero no puedo negar que me causó mucho sufrimiento. Después de abrirme y mostrarte mis vulnerabilidades, mis fortalezas, mis heridas y mi pasado, lo único que ocurrió fue que te fuiste. Te marchaste y me dejaste sola.

Quizás no estaba en lo correcto al afirmar que tu corazón pertenecía a otra persona, pero sí acerté al decir que no me pertenecía a mí.

En estos momentos, lo único que puedo hacer es echarte un vistazo en clase cuando estás distraído o disfrutar de esa preciosa sonrisa que muestras con tus amigos.

Intento apagar lo que siento por ti y hacer como si no existieras.

Pero, ¿a quién trato de engañar?

Anhelo que veas las historias que comparto en Instagram y des un "me gusta".

Releo una y otra vez nuestras conversaciones en el chat.

Cada vez que recibo una notificación, espero que sea un mensaje tuyo.

Asocio muchas canciones de Britney Spears o Lady Gaga contigo, aunque sea en secreto, porque te las dediqué en mi mente.

Te defiendo cuando mis amigas critican tus acciones.

Hago bromas solo para provocar esos hoyuelos encantadores en tu rostro cuando sonríes.

Aún me siento en tu pupitre o en tu silla para molestarte, simplemente porque me parece adorable verte enfadado.

Mi mente sigue ocupada pensando en ti constantemente.

Y mi amor por ti sigue siendo tan intenso como el primer día.