Capítulo XXI

Capítulo XXI 

Encaje 

Samantha 

Todo a mi alrededor empieza a tomar forma a pesar de que no he abierto los ojos, en mi mente aún está el recuerdo del sueño que tuve no es del todo un sueño, es un recuerdo, el recuerdo de nuestra primera vez, bueno de la primera vez de Alexandra y Bastián, pero se sintió muy vivido. 

Puedo oír todo a mi alrededor más fuerte de los normal, a pesar de que fue un hermoso sueño el dolor de cabeza que estoy sintiendo no me deja pensar mucho así que gimo un poco por el malestar que siento.

¡Oh mierda! Siento que la cabeza me va a explotar y el estómago revuelto. 

《¿Por qué me siento así? Mierda la cabeza se me va a caer. 》

 No me creo capaz de abrir los ojos siento que si lo hago el dolor se intensificará, con ellos aún cerrados arrugó mi rostro. Siento que voy a morir. Mi cabeza parece que ha sido golpeada con un martillo repetidas veces. 

Respiró profundamente varias veces, mi madre siempre dice que si nos relajamos el más grande dolor puede reducirse, no sé si se refería a este tipo de dolor, pero tengo que intentarlo. 

 Intento moverme un poco y el dolor es peor.

《¿Qué ha pasado? ¿Me atropelló un camión acaso?》ya el recuerdo del sueño quedó atrás porque el dolor solo me hace pensar en eso y en nada más. 

Nunca llegué a notar que cuando respiro hago un mínimo ruido y ahora me desagrada porque hace que mi cabeza quiera reventar. El mundo parece estar cayendo en mil pedazos sobre mi. 

Aunque siento que voy a morir si me muevo, debo levantarme, no puedo estar acostada todo el día el dolor se pondrá peor si mi cuerpo se queda inmóvil tanto tiempo; decido levantarme y también contribuye a que tome esta decisión el hecho de que estoy que me orino, parece que tome mil litros de agua porque ya se está tornando insoportable tanto que casi —aunque sería imposible —cubre el dolor de cabeza, también necesito bañarme, eso me ayudará. 

《 Vamos Samantha, no es tan difícil.》

Intento moverme y no puedo, eso me hace volver a arrugar el ceño con molestia, lo intento de nuevo y es cuando noto que unos brazos fuertes me están abrazando.

《¡Alguien me está abrazando! 》mi mente parece que enciende mil alarmas diferentes, oh mierda qué ha pasado anoche. 

Por un segundo me paralizó más, mi mente trata de buscar en los rincones que parecen borrosos el porque yo estaría abrazada a alguien, pero nada viene, parece que me han robado mis recuerdos. 

《 Mierda, mierda, mierda...》

Con mucho esfuerzo —porque duele— abro los ojos lentamente, la luz hace que mi cabeza vuelva a pinchar fuerte, pero la preocupación de que alguien me está abrazando es más grande que cualquier cosa, bajó la vista hacia mi cintura y efectivamente unos brazos me rodean. Me va a dar un ataque de pánico, vuelvo a cerrar los ojos por un segundo y respiro profundo varias veces; debo calmarme. 

《Samantha Duran ¿Que coño paso anoche? ¿Que hiciste?》

Trato de centrarme y no volverme loca, si me desespero no solucionaré nada, vuelvo a abrir los ojos y es en ese momento que noto que estoy en ropa interior, es en ese momento que mi autocontrol se desmorona y de un movimiento brusco —aunque casi me me mata el malestar— me alejo. 

Volteo mi cuerpo para poder enfrentar a mi acompañante, el cual se está quejando por despertarlo mientras abre sus ojos. 

《Oh santísima mierda, ¡Que has hecho Samantha! 》

—Mierda, oh Dios —digo entrando en pánico.

《No puedo haberme acostado con Bastián en nuestra primera cita, ¿verdad? Vamos Samantha recuerda que coño paso.》

Siento como si un balde de agua fría cayera sobre mí, estoy a nada de ponerme a llorar, porque así no debían ir las cosas, no sé supone que las cosas iniciarán así. 

—Calmate Sam. —Mi mente repite el "Sam" una y otra vez, su voz es gruesa porque está recién despertando y no negaré que es sexy, si no estuviera entrando en pánico quizás me tomara un segundo en analizarlo mejor. 

Veo cómo él se estira un poco y luego se sienta en la cama, y quizás detallo un poquito más de lo que debería su abdomen, solo un poquito, pero no es mi culpa. 

Mi rostro se sonroja ante su imagen, él me mira de manera intensa y es cuando recuerdo que solo estoy en ropa interior, con las mejillas como más rojas y calientes que acero fundido, tomó una sábana rápidamente y me cubro. 

No sé si debo hablar, pero lo cierto que necesito respuesta, he metido demasiado la pata; que estará pensando de mí. 

—¿Qué ha pasado? —Sé que mi voz denota mi estado, estoy a solo unos segundos de tener un ataque de pánico.

《Esto no tenía que ser así mierda. ¿Como la jodí tanto?》

El me detalla por unos segundos, parece estar analizando que tanto recuerdo o como decir las cosas para no alterarme más, es tan guapo. 

《Centrate Samantha por Dios, pero joder si está muy guapo recién levantado》

—¿De verdad no recuerdas? —dice mirándome de tal manera que me hace encomendarme a Dios para no caer en tentación.

《¡Samantha joder, centrate en lo importante!》 Me regaño de nuevo pero es difícil concentrarse cuando estoy casi desnuda y él sin camisa.

Tomo respiraciones profundas y cierro mis ojos, no sé si es por vergüenza o para recordar, pero decido creer que es una combinación de ambos. Me concentro aunque el dolor de cabeza no me ayuda y la situación menos. 

Estábamos cenando, hablábamos, tome varias copas, me sentí mareada luego… Es ahí cuando las imágenes empiezan a golpear mi mente una tras otra.