Capítulo 55: Oferta

La gente se preguntó si esta adolescente entendía el juego de piedras o simplemente no le importaba en lo absoluto.

-”Jovencita, ¿me vendería esta materia prima por 50 mil yuanes?. Aunque se ve un poco de color verde claro, quien sabe si hay más adentro, ¿verdad?. Si no hay más adentró será un desperdició y si lo vende ahora puede ganar 50 mil yuanes de todos modos, pero si no lo vende no tendrás nada”, dijo un hombre de mediana edad con traje, un poco gordo y de unos 50 años.

Si la materia prima que se cortó tenía verde, el corte se denominó “ventana” y si el propietario no quería seguir apostando, podía venderlo.

El comprador también estaba apostando y por supuesto por que una capa ligera de verde no significaba que la materia prima fuera valiosa.

A menudo había solo una fina capa de verde en muchas materias primas o el jade en el interior era muy pequeño.

Pero una materia prima con una “ventana” era mucho más cara que una materia prima sin una “ventana”. Como la que Gu Ning había comprado por 2 mil yuanes y el hombre luego ofreció 50 mil yuanes por ella.

La materia prima se mostró verde después de todo y era posible que hubiera jade en él.

Si la capa verde fuera delgada sería un desperdicio y si hubiera jade en él valdría una cierta cantidad de dinero, de acuerdo con el tamaño del jade.

El hombre de mediana edad simplemente estaba tratando de engañar a Gu Ning. A sus ojos Gu Ning era simplemente una adolescente que no debía saber nada sobre el juego de piedras.

Incluso si no hubiera jade en la materia prima, podría pagar 50 mil yuanes.

Pero si hubiera jade adentro podría ganar mucho dinero.

Aunque Gu Ning no sabía mucho sobre el jugo de piedras y sabía que el jade en la piedra debía ser extremadamente valioso y 50 mil yuanes no podían comprar el 1%.

-“Me quedaré y jugaré hasta que se acabe todo el jade y el comprador más generoso lo obtendrá”, dijo Gu Ning.

El hombre estaba decepcionado, pero no pudo hacer nada al respecto.

El trabajador siguió cortando y después del segundo corte, se mostró otra capa de verde y se reveló el tipo de jade.

-”¡Es valioso!”, dijo el trabajador emocionado.

-”El color es un poco amarillo, la calidad es buena y este es del tipo arroz glutinoso”, se acecó el jefe tambíen estaba emocionado.

-”Jovencita, ¿podrías vendérmelo en 500 mil yuanes?”, el hombre de mediana edad volvió a pujar.

-”Pagaré 800 mil yuanes por él”.

-”1 millón de yuanes”.

…

-”¡2 millones de yuanes!”.

Cuando el precio subió a 2 millones nadie más volvió a pujar y el jade no se había cortado por completo y todavía no estaba claro qué tan grande era y cuánto valía.

Gu Ning no les impidió pujar y después de que terminaron, Gu Ning abrió la boca: -”Lo venderé cuando el jade esté completamente cortado”.

El jade debe valer más de 2 millones de yuanes.

Luego el trabajador pasó a cortar la piedra.

Primero quitó la capa exterior y luego comenzó a frotarla.

30 minutos después, finalmente se cortó un jade que era tan grande como la mitad de una pelota de fútbol.

El tipo de arroz glutinoso era jade de alto nivel y absolutamente valió mucho.

Además su tamaño no era pequeño.

-”5 millones de yuanes”.

-”6 millones de yuanes”.

-”7 millones de yuanes”.

-”¡10 millones de yuanes! sonó una voz brillante y el postor omitió directamente la brecha de 3 millones.

Un enérgico anciano de 70 años entró.

-”¡Oh, Maestro Fu, ha pasado mucho tiempo! ¡Un placer verte otra vez!”, un hombre saludó de inmediato.

-”A principios de mes nació mi bisnieto y me he quedado en casa durante este tiempo, pero era incómodo quedarme en casa demasiado tiempo. Por eso quise echar un vistazo a mi alrededor e inesperadamente llegué a tiempo cuando cortaron el jade de grado superior. ¡Quería comprarlo y hacerle un regalo a mi bisnieto!”, dijo el Maestro Fu.

El Maestro Fu se dedicaba principalmente al negocio inmobiliario y a otras muchas industrias, era un hombre de muchos negocios muy rico con 8 millones de yuanes de riqueza. Su familia era de una de las familias más ricas de tercer nivel en una ciudad de segundo nivel como G City.

Aunque las familias súper ricas se podían dividir en primer, segundo y tercer nivel sólo había 10 en total.

Porque solo las 10 personas más ricas pudieron ser llamadas súper ricas.

Y el Maestro Fu estaba entre los 7 primeros de la lista.

Por supuesto, además de esas personas súper ricas en la lista, también había muchas familias súper ricas invisibles.

-”Parece que el Maestro Fu está muy interesado en el jade del tipo de arroz glutinoso, pero a mí también me gusta y me temo que tengo que competir con usted Maestro Fu”, dijo otro hombre -”11 millones de yuanes”.