Jiang Xu fue a ocuparse de su negocio, mientras que Gu Ning junto con su madre y su tía tomaron un taxi que se dirigía al Edificio Comercial en el centro de la ciudad.
Gu Ning propuso comprar ropa primero y Gu Qing la detuvo: -”Ningning ya nos compraste ropa ayer y no necesitamos gastar más dinero en ropa”.
-”¡No es suficiente! Mi mamá y yo tiramos toda nuestra ropa vieja y también necesitamos comprar ropa nueva. Relájate no vamos a comprar las marcas de los diseñadores, sino algunas marcas comunes”, consoló Gu Ning.
No necesitan demasiada ropa lujosa y la ropa lujosa era solo para ocasiones importantes o especiales.
En la vida diaria, podrían usar ropa normal.
La gente usaba marcas de diseñador solo para lucirse y muchas marcas de nivel medio también eran de gran calidad.
Gu Qing escuchó a Gu Ning al final.
Fueron a una marca de ropa de nivel medio para comprar a su madre y su tía.
A pesar de que la marca era de nivel medio, todavía era lujo para Gu Man y Gu Qing porque nunca había estado en lugares como ese.
Por lo tanto, se sintieron intimidados cuando intervinieron.
Gu Man y Gu Qing no llevaban buena ropa y parecían pobres y además ambas se comportaron de manera insegura. Por lo que la vendedora asumió que no podían pagar nada y así que ni siquiera se molestó en saludarlas.
Gu Ning ignoró a la vendedora, ella guió a su tía y su madre caminando casualmente y si les gustaba podían comprar algo, sino les gustaban se iban.
Gu Qing eligió una prenda de vestir. Miró el precio que ponía en la etiqueta y se sorprendió: -”¡Caramba! ¡Cuesta 1.800 yuanes!”. ¡1.800 yuanes fue su salario durante medio mes!.
Aunque sabía que la ropa que Gu Ning les había comprado costaba mucho más que eso y todavía pensaba que el precio era demasiado alto cuando lo vio con sus propios ojos.
Mientras tanto, una voz femenina sarcástica sonaba. -”Si no puedes pagar una prenda de vestir de 1.800 yuanes, no te pongas nunca aquí y mira lo que llevas puesto. Solo te mereces cosas baratas”.
Gu Qing se sintió completamente avergonzada y ella bajó la cabeza avergonzada.
Gu Ning estaba enfadada y miró a la mujer que le resultó familiar. Gu Ning se veía malvada y gritó :-”Ah, ¿no es esta la Sra.Jin?”.
La mujer escuchó la voz de Gu Ning y su rostro cambió de inmediato. -”¿Quién eres tú? ¡No te conozco!”.
Gu Ning ahora estaba segura de que la mujer debía haber ido a verificar sus joyas y dado que estaba siendo tan tímida. Si sus joyas hubieran sido reales se habría enfadado al ver otra vez a Gu Ning.
-”¿No te acuerdas? Fue el domingo pasado en la joyería…” Gu Ning le recordó a propósito.
-”¡Callate la boca!” La mujer entró en pánico e interrumpió a Gu Ning.
-”¿Qué ocurre?” En ese momento, una mujer de unos 40 años vestida de manera extravagante se acercó desde el otro lado. Sus ojos se agrandaron cuando vio a Gu Ning a su familia.
Tanto Gu Qing como Gu Man se sorprendieron y se sintieron incómodas por la mujer.
Gu Ning entrecerró los ojos con frialdad.
La mujer era Lin Lijuan, la madre de Gu Xiaoxiao.
-”Gu Qing, Gu Man, ¿qué están haciendo aquí?” Lin Lijuan preguntó sorprendida.
Estaba más allá de su imaginación que Gu Qing y Gu Man aparecieran aquí y a sus ojos siempre vestían cosas baratas de los puestos callejeros.
Gu Qing y Gu Man no querían hablar con Lin Lijuan al principio, pero eran parientes después de todo y no era apropiado si ignoraban su pregunta en público.
Gu Qing dijo alegremente: -”Solo estamos aquí para mirar un poco”.
Gu Qing no quería que ella supiera que estaban aquí para comprar.
Frente a Lin Lijuan, prefieren fingir ser pobres para siempre.
-”¡Oh, pensé que recogías dinero en las carreteras y te atreves a caminar en un lugar así!”. Al escuchar eso, Lin Lijuan repentinamente cambió su tono y no se molestó en ocultar por completo el desprecio.
-”Lin, ¿las conoces?”, preguntó la mujer.
-”Sí, sí ya te había hablado de ellas antes y son mis cuñadas”. Lin Lijuan se burló.
Parecía que Lin Lijuan había hablado mal de Gu Man y Gu Qing a menudo a sus espaldas.
La mujer inmediatamente miró a Gu Man y Gu Qing con intenso odio. Pero como Gu Ning también estaba allí y no se atrevió a reírse de ellas.
-”Gu Man fuiste valiente al mudarte de la vieja casa y en lugar de disculparte con nosotros”. Aunque Lin Lijuan todavía estaba enfadada con Gu Ning. Gu Man y Gu Ning habían pagado por su comportamiento y no la molesta tanto como antes. Pero ahora al ver que Gu Qing estaba con Gu Man y Lin Lijuan creía que Gu Qing debió haber dejado que Gu Man se quedara con ella. Ella se enfadó de inmediato: -”Gu Qing, ¿dejastes que Gu Man se quedará contigo? Nuestra madre lo había dejado claro y si te atreves a dejar que Gu Man se quede contigo, no te ayudaremos más”.
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Editado: 31.12.2021