Capítulo 265: Zheng Peng

-”¿Qué cojones?”.

Justo cuando el hombre abrió la boca, Gu Ning lo levantó y lo tiró. El segundo hombre cayó accidentalmente sobre el primer hombre y el primer hombre casi se desmaya del dolor.

Los otros dos hombres finalmente se dieron cuenta de lo que estaba pasando y ambos se sorprendieron al ver que sus compañeros quedaron inconsciente, luego levantaron los palos de madera en sus manos y comenzaron a atacar a Gu Ning con ira.

Sin embargo, esta vez, antes de que Gu Ning pudiera moverse, un hombre entró corriendo desde el exterior y tiró a los otros dos hombres fuera de la tienda en cuestión de segundos.

Todos quedaron nuevamente sorprendidos por los hermosos movimientos y la apariencia de este hombre.

-”¿Estás bien?” Leng Shaoting le preguntó a Gu Ning con preocupación.

-”Estoy bien”, Gu Ning sonrió suavemente y ella no estaba sorprendida por su repentina aparición, en cambió se sintió conmovida.

-”¿Qué está pasando aquí?” Leng Shaoting preguntó.

-”Oh nada, solo quería ayudar a este hombre”, respondió Gu Ning.

-”¡Señorita, muchas gracias por salvarme la vida!” Zheng Peng agradeció a Gu Ning de inmediato y todavía estaba en shock después de lo que acababa de pasarle. Si no hubiera sido por Gu Ning, ya estaría muerto.

-”Es un placer”, dijo Gu Ning. -”Sin embargo, Sr.Zheng escuche que su hijo adoptivo le causa todos estos problemas. ¿Por qué no cortas la conexión con él?”.

Al escuchar eso, Zheng Peng suspiró con gran fuerza y dijo con resignación; -”En realidad, no he podido contactarlo durante un año y causa problemas afuera, pero todos esos hombres vienen a mí. No sé cómo manejarlo y si no les doy dinero, dañarán mi tienda”.

No le dijo a Gu Ning si estaba arrepentido de haber adoptado a Zheng Hao, pero dejó en claro que quería cortar la conexión con su hijo y la bondad de uno tenía limitaciones. Zheng Peng había criado a Zheng Hao y ahora había perdido toda su riqueza por su culpa y ya había cruzado el límite.

-”¿Por qué no llamas a la policía?” Gu Ning preguntó.

-”¡Lo hice! Sin embargo, son miembros de Qing Gang e incluso la policía no se atreve a molestarlos”, respondió Zheng Peng y era solo un ciudadano común sin poder ni apoyo, por lo que nadie estaba dispuesto a ayudarlo.

Hablando de Qing Gang, Zheng Peng de repente se dio cuenta de que podría ser peligroso. -”¡Oh! Son de Qing Gang y los lastimaste. ¡Podrías meterte en problemas! ¡Creo que es mejor que te vayas ahora mismo!”.

-”Está bien”, Gu Ning entendió que Zheng Peng estaba siendo amable, pero no le tenía miedo a Qing Gang.

-”¡No te atrevas a irte! ¡Nos lastimaste y Qing Gang no te permitirá salirte con la tuya!” En ese momento, los hombres que habían sido derribados en el suelo amenazaron a Gu Ning y a Leng Shaoting.

-”Vaya, ¿crees que todos le tienen miedo a Qing Gang?”, Gu Ning se burló con odio.

-”Tú…” No esperaban que Gu Ning no estuviera asustada y creían que solo estaba fingiendo. -”¡Si no tienes miedo, quédate aquí!”.

Al parecer, iban a pedir apoyo.

-”No me iré, porque tienes que pagar por lo que has hecho. Sr.Zheng calcule su pérdida y permítales pagar la compensación”, dijo Gu Ning.

-”Señorita…” Zheng Peng se sorprendió. No se atrevió a pedirles compensación y tenía más miedo de que se vengaran de él.

-”¿Qué? ¿Cómo te atreves a pedirnos que paguemos la compensación?” Esos hombres de Qing Gang estaban locos.

-”No creo que eso dependa de tí”, se burló Gu Ning una vez más.

Como ya le había dado una mano a Zheng Peng, no lo dejaría en un lío y de hecho, decidió ayudarlo a resolver el problema por completo o de lo contrario, esos matones descargarían su ira con Zheng Peng si Gu Ning y Leng Shaoting se fueran.

Además, no era deber de Zheng Peng pagar por el mal comportamiento de su hijo.

-”Dime tu nombre y el de tu líder”, dijo Gu Ning a uno de los hombres.

-”Soy Zhao San y mi líder es Jiu Ye, que es una figura importante en Qing Gang”, dijo el hombre con orgullo, porque no creía que Gu Ning pudiera tratar con ellos.

-”Genial, puedes irte ahora”, dijo Gu Ning.

-”¿Qué?” Esos matones no esperaban que Gu Ning cambiara de tema tan rápido.

-”Vete ahora mismo o de lo contrario te patearé”, dijo Gu Ning con una mirada fría.

Frente a la gran presión de Gu Ning, esos matones temblaron de miedo y escaparon. Sin embargo, antes de irse uno de ellos amenazó; -”¡Aún no es el final y volveremos!”.

Todas las personas a su alrededor sintieron pena por Zheng Peng, pero no pudieron hacer nada para ayudarlo y esos matones eran de Qing Gang después de todo.

Después de que el grupo de Zhao San se fue, la gente también se dispersó.

-”Bueno, creo que tendré que cerrar mi tienda y dejar City Teng ahora”, suspiró tristemente Zheng Peng y estaba realmente asustado esta vez, y ya había tenido la idea de cerrar su tienda porque su tienda apenas podía mantenerse a flote ahora.