Renacimiento de la mujer de negocios del campus Parte 4

Capítulo 637: Me enfada verte

-”Creo que su amor por ti ya es obsesivo. No pasa entre nosotros, pero ella tiene que acosarme una y otra vez, ¡lo cual es muy molesto!” Cao Wenxin dijo con enfadó.

-”¿Tienes que exagerar tanto? Parece que realmente odias tener algo que ver conmigo”, bromeó Xin Bei. Esperaba que Cao Wenxin lo negara.

ᴀʟ ᴇsᴄᴜᴄʜᴀʀ ᴇsᴏ

Cao Wenxin lo explicó de inmediato. -”No odio tener nada que ver contigo, pero me siento enfadada por el acoso de Yu Wenjing”.

Xin Bei se animó y se alegró de que Cao Wenxin no lo odiara.

Xin Bei y Cao Wenxin llegaron primero a la cafetería, pero no compartirán la misma mesa.

Xin Bei hablaría primero con Yu Wenjing y si Yu Wenjing no dejará de insultarlos, Cao Wenxin aparecería y le daría una lección.

Si Cao Wenxin realmente iba a golpear a Yu Wenjing, Xin Bei, por supuesto, no se quedaría allí mirando. No fue culpa de Xin Bei que acordara con Cao Wenxin golpear a Yu Wenjing, pero Yu Wenjing lo pidió ella misma. Si no aprendía la lección ahora, era posible que hiciera algo más molesto.

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No había mucha gente en la cafetería.

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Yu Wenjing entró y estaba emocionada de ver a Xin Bei. -”Xin Bei, ha sido…”

-”Toma asiento” Xin Bei la interrumpió con una expresión fría antes de que pudiera terminar la oración.

Yu Wenjing no pensó más y se sentó de inmediato.

-”Yu Wenjing, ¿has estado acosando a Cao Wenxin últimamente?” Xin Bei le dijo sin dudarlo.

ᴀʟ ᴇsᴄᴜᴄʜᴀʀ ᴇsᴏ

La sonrisa de Yu Wenjing desapareció y no esperaba que Xin Bei la llamará para reunirse aquí debido a Cao Wenxin. Yu Wenjing estaba más segura ahora de que Xin Bei estaba saliendo con Cao Wenxin.

-”¿Me llamaste hoy solo para esto?” Yu Wenjing estaba decepcionada y enfadada.

-”Sí”, dijo Xin Bei.

Yu Wenjing se sintió tan herida y dijo con enfado. -”¡Ella te sedujo, así que la castigué! ¿Qué está mal con eso? ¿Realmente te gusta ella? ¿De verdad estás saliendo con ella? ¿Por qué te preocupas tanto por ella?” Ella admitió que había estado acosando a Cao Wenxin.

Cao Wenxin, que estaba sentada junto a una mesa cercana, puso los ojos en blanco. Fue ridículo que Yu Wenjing llegará a la conclusión de que había seducido a Xin Bei solo por una foto de ellos.

-”¡No es asunto tuyo!” Xin Bei miró fríamente a Yu Wenjing. Nunca antes se había despreciado tanto como ahora. ¿Cómo pudo haberse enamorado de una mujer tan egoísta, snob y maliciosa?.

-”¡Eres mío!” Yu Wenjing casi gritó. Parecía que había olvidado por completo que ya había roto con Xin Bei hace años.

-”¿Soy tuyo? ¿Estás loca? Hemos estado separados durante años y tu eres quien me dejó”, dijo Xin Bei.

-”Estoy arrepentida ahora. Todavía estoy enamorada de ti y te quiero de regreso”, dijo Yu Wenjing y dio por sentado que debería aceptarla mientras ella todavía lo amara.

ᴀʟ ᴇsᴄᴜᴄʜᴀʀ ᴇsᴏ

Cao Wenxin no pudo evitar poner los ojos en blanco nuevamente. ¡Yu Wenjing era tan desvergonzada!.

Xin Bei estaba enfadado. -”¡Eres la persona más desvergonzada que he visto antes! ¿Quién crees que eres? Me siento tan enfadado al verte”.

Cao Wenxin le dio a Xin Bei un pulgar hacia arriba en su corazón.

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Xin Bei se unió a Red Flame y debido a su identidad especial, no podía decírselo a nadie, ni siquiera a su familia. Cuando conoció a Yu Wenjing hace cuatro años, le dijo que solo era un soldado común.

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Yu Wenjing lo admiraba por su honorable trabajo, pero pronto lo despreció porque no ganaba mucho dinero. Luego, Yu Wenjing tuvo una aventura con un hombre rico pero no rompió con Xin Bei de antemano.

Xin  Bei no se enteró hasta que fue a visitar a Yu Wenjing. Sin embargo, Yu Wenjing no solo lo había dejado, sino que también lo había humillado.

Yu Wenjing fue abandonada por el hombre rico después de unos meses, pero pronto se volvió hace otro hombre rico y fue abandonada después de unos meses nuevamente. Después de un período de tiempo, escuchó de un amigo que Xin Bei era en realidad un oficial militar de alto rango en el ejército, por lo que hizo todo lo posible para encontrarlo.

Aunque a Xin Bei no le importaba la rica experiencia sexual de su novia, nunca aceptaría a un traidor. Además, Yu Wenjing estaba tan podrida y se sintió asqueado de verla ahora.

-”Tú…” Yu Wenjing se echó a llorar y parecía inocente. -”¿Cómo pudiste decirme eso?”.

-”¡Deja de actuar! Creo que debes saber claramente lo que has hecho durante los últimos dos años. ¿Necesitas que te ayude a señalarlo?” Xin Bei dijo con evidente despreció.




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