Capítulo 885: He Hongyuan cae inconsciente

A Gu Ning no le importaba, pero a Leng Shaoting sí y al ver a Hong Yuehan mirándola, Leng Shaoting le dio una mirada fría y no permitiría que nadie más le robara a su chica.

Como heredero de Tiandihui (Hong Yuehan) notó la mirada de advertencia de inmediato, pero la mirada ya había desaparecido cuando se giró para buscarla. Sin embargo, se sintió amenazado por la simple mirada y se puso alerta en un instante. Tenía miedo de que también hubiera un enemigo entre la multitud.

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Había muchos enemigos de Tiandihui. Además, podía sentir la enemistad y la habilidad excepcional de la persona a simple vista por lo que tenía que ser cauteloso.

Leng Shaoting no estaba interesado en los pensamientos de Hong Yuehan, siempre y cuando dejara de mirar a Gu Ning.

Hong Yuehan estaba distraído por el peligro potencial, por lo que apartó los ojos de Gu Ning.

-”Señor Fan, por favor”.

El premio acumulado estaba lleno de fichas, pero Fan Zhihao simplemente se quedó allí, por lo que He Yishao abrió la boca para recordarle que jugará.

Fan Zhihao se mostraba reacio a seguir jugando ahora porque estaba perdiendo mucho dinero. ¡Nadie podría mantener la calma en tal situación! Sin embargo, no le correspondía a él darse por vencido ahora.

A excepción de He Hongyuan que todavía esperaba que Fan Zhihao pudiera ganar porque no estaba dispuesto a aceptar el fracaso, todos los demás creían que Gu Ning sería el ganador sin lugar a dudas.

En ese caso nadie le prestó mucha atención.

Fan Zhihao hizo todo lo posible por calmarse para concentrarse en el juego y no volver a perder tanto. Esta vez ganó 12 millones de yuanes.

Debido a que Gu Ning había ganado todas las fichas del premio acumulado en ese momento, nadie pensó que fuera una gran sorpresa que Fan Zhihao ganará más de 10 millones de yuanes.

El propio Fan Zhihao también deseaba poder ganar todas las fichas del premio acumulado una vez.

He Hongyuan tuvo la misma idea porque Gu Ning lo había hecho antes, lo que demostró que era posible.

Gu Ning, sin embargo, ganó 28 millones de yuanes después de esta ronda, que fue más del doble de lo que ganó Fan Zhihao.

A estas alturas la gente ya estaba acostumbrada a que Gu Ning ganara.

-”¿Eres un inútil? ¡Ni siquiera puedes ganar a una mujer!” He Hongyuan dijo enfadado.

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Fan Zhihao se enfadó y sacó la mano de la máquina de inmediato. -”¿Por qué no lo haces tú mismo entonces?”.

-”¡Muévete! ¡Lo haré yo mismo!” He Hongyuan levantó la voz.

Sabía jugar a las máquinas tragaperras, pero no era muy bueno en eso, así que presionó el botón de stop confiando en sus sentimientos.

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No había ningún carrete con imágenes alineadas en la pantalla lo que enfadó a He Hongyuan.

Gu Ning, por el contrario, volvió a ganar todas las fichas del premio acumulado.

-”¿De verdad?”.

-”Dios mío, no puedo creer lo que veo”.

-”¡La señorita Tang es tan increíble!”.

-”¿Estoy en un sueño ahora mismo?”.

-”Me faltan palabras”.

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Fan Zhihao quedó sorprendido por el resultado y también se sintió afortunado de no haber jugado la ronda él mismo o habría perdido otros 100 millones de yuanes.

He Hongyuan no pudo soportarlo más, volvió a escupir sangre y luego cayó inconsciente.

-”¿Padre? ¡Padre!” He Yixi entró en pánico y gritó.

-”¡Maestro Hongyuan!” Los guardaespaldas de He Hongyuan avanzaron sin demora.

La gente a su alrededor también estaba asustada y tenían miedo de que He Hongyuan realmente muriera aquí.

-”Necesitamos enviar al Maestro Hongyuan al hospital ahora mismo y podemos esperar a que el Maestro Hongyuan se despierte para jugar el resto de las rondas”, dijo He Yishao. De hecho, no podía esperar a ver morir a He Hongyuan, pero su hermano pequeño todavía estaba en peligro, por lo que Hong Hongyuan tenía que seguir con vida.

-”Espera un segundo”, Gu Ning los detuvo y caminó hacia He Hongyuan.

Los guardaespaldas de He Hongyuan se interpusieron en su camino sin dudarlo, en caso de que Gu Ning lo lastimara.

-”¿Qué es lo que quieres hacer?” Un guardaespaldas miró a Gu Ning.

-”Puedo rescatarlo”, dijo Gu Ning. Dijo eso no porque fuera amable, sino porque quería irse con el dinero lo antes posible. ¿Quién sabía cuánto tiempo tendría que esperar hasta que He Hongyuan despertara?.

Sonaba cruel y despiadado, pero después de todo, He Hongyuan no era alguien que le importara.

-”¿Puedes?”.

Todos estaban sorprendidos y tenían dudas.