-”Genial, me siento aliviado”, Jiang Xu dejó escapar un largo suspiró. Obviamente valoraba a Gu NIng por encima de Gu Qinxiang. Solo había ayudado a Gu Qinxiang porque Gu Qinxiang estaba desperado.
-”Te dije que Ningning no te culpará por eso. Ya no necesitas preocuparte”, dijo Gu Qing.
Jiang Xu sonrió y no dijo nada.
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También llegó la familia de Gu Qinyang. Sin embargo, se encontraron con una cara familiar una vez que bajaron del avión, lo cual no fue nada agradable.
-”¡Oh, Wen Yulan, ha pasado un tiempo! ¿Tu familia vino aquí de viaje? ¿no fue que apenas podías pagar la tarifa del viaje grupal la última vez? ¿No nos dijiste que tu familia acaba de comprar una casa y ahora te falta dinero? ¿De dónde sacaste el dinero para viajar a la ciudad B? ¿No sabes que es muy caro quedarse a cenar aquí?”.
La cara familiar era la colega de Wen Yulan una mujer de 37 años. Parecía arrogante y no se molestó en ocultar su evidente desdén hacia la familia de Wen Yulan.
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La familia de Gu Qinyang ahora tenía un presupuesto ajustado porque acababan de comprar una casa pero no eran muy pobres.
La mujer era consciente de ello pero todavía quería reírse de Wen Yulan. No importaba quién era más pobre que ella en la institución pública para la que trabajaban ella se burlaría de ellos.
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Esta mujer tenía el mismo trabajo que Wen Yulan pero se casó con un marido rico. A menudo mostraba sus lujos en su lugar de trabajo. A excepción de unas pocas personas que estaban dispuestas a complacerla, todos los demás odiaban su comportamiento.
Tampoco se haría amiga de aquellos que fueran más pobres que ella. Considerándolo todo, disfrutaba cuando la gente tenía celos de ella.
Aunque a Wen Yulan no le agradaba mucho esta mujer no podía discutir con ella en público. Por lo tanto, Wen Yulan contuvo su ira y sonrió. -“No tenemos mucho dinero, pero alguien pagó todos los gatos por nosotros”.
No hacía falta que negara el hecho de que a su familia le faltaba dinero.
-”¿De verdad? ¿Quién es?” Al oír eso, la mujer se sintió desilusionada. Le sorprendió saber que Wen Yulan tenía un pariente rico que podía pagar todos los gastos en la ciudad B.
Tenía curiosidad por saber qué tan rico era el pariente de Wen Yulan. Se negó a creer que el pariente de Wen Yulan pudiera ser más rico que ella.
-”Mi cuñada”, dijo Wen Yulan.
La mujer movió los ojos y luego puso una sonrisa falsa.
-”¿Qué hace ella? ¿Es muy rica?”.
-”Ella dirige un salón de belleza”, Wen Yulan le dio una respuesta superficial.
¿Un salón de belleza?.
La mujer se mordió los labios. El dueño de un salón de belleza no podía ser muy rico.
-”Lamento interrumpirte, pero tengo curiosidad, ¿qué tan rica es tu familia” Gu Yinyin le preguntó a la mujer de repente.
La mujer mostró una sonrisa orgullosa de inmediato. -"¡Mi familia tiene más de 12 millones de yuanes en activos!”.
-”Oh, eso no es mucho. ¡Mi tía y su hija tienen cientos de millones de yuanes en activos! Mi tía tiene un salón de belleza, pero su hija es jefa de una joyería. ¡Mi madre recibió un regalo de ellas, que es un juego de joyas de jade y vale 12 millones de yuanes!” Dijo Gu Yinyin.
Su objetivo era molestar a la mujer. La mujer era muy repugnante y odiaba ser humillados una y otra vez.
-”¿Qué?” La mujer quedó sorprendida.
¿Wen Yulan tiene un conjunto de joyas de jade que vale 12 millones de yuanes?.
Se puso celosa en un instante. El conjunto de joyas más caro que tenía solo costó cientos de miles de yuanes y fue un regalo para su aniversario de bodas. Durante mucho tiempo le había rogado a su marido que lo consiguiera.
Aunque su familia tenía 12 millones de yuanes en activos, la mayor parte de su riqueza familiar eran bienes inmuebles. Además, su marido no era muy generoso y no estaba dispuesto a darle mucho dinero para comprar lujos.
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Si su marido fuera generoso con ella, dejaría su trabajo y se convertiría en una mujer rica que tendría mucho tiempo para gastar dinero.
Mucha gente le hizo esa pregunta. ¿Por qué no podía dejar su trabajo y disfrutar de su vida lujosa si su marido rico realmente la amaba profundamente?
𝑆𝑖𝑛 𝑒𝑚𝑏𝑎𝑟𝑔𝑜
Ella obviamente no les diría la verdad, así que mintió y dijo que pensaba que las mujeres deberían tener su propia carrera y ser independientes.
Sus colegas y amigos creían eso porque muchas damas nobles preferían trabajar como de costumbre, sin importar cuán ricos fueran sus maridos.
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Se sorprendió al saber que Wen Yulan de quien normalmente se burlaba, pudo recibir un regalo mucho más caro que ella.
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Editado: 23.04.2024