Capitulo 2.

"Que mi libertad, no me permite continuar pues la tristeza le ha robado su lugar"

Marzo 27.
 

Ryan.
 

Abro los ojos por el sonido de el irritante creeeeak de la puerta del refrigerador. Una figura es recortada por la luz que emana de el aparato. Miro ciegamente la Persona de pie en mi cocina. En un comienzo, me doy cuenta de que es la chica del bosque, consciente, alerta y itinerante en mi casa en medio de la noche yo me siento rápidamente, tomo la máscara de esquí y la pongo sobre mi cara. Ella chilla de sorpresa. Me pregunto sombría-mente qué si ese pequeño grito sonaría como si ella hubiera Visto mi cara. O lo que queda de ella.

Frunzo el ceño, agradecido de que la máscara oculte mi expresión.

-Oh. -dice ella. -No te vi allí. -Ella todavía usa la ropa que le puse haya adentro. Su pelo largo y oscuro es un enredado lío y su palidez se ve enferma, pero eso podría ser el tono verdoso de la aurora que se echa sobre su rostro. Recordando la mirada en su rostro cuando ella preguntó si le había cambiado La ropa todavía me hace sentir mal por dentro. Traté de ser lo más respetuoso posible y desearía poder sacar el recuerdo de mi mente por completo,pero eso se esta poniendo un poco más difícil de lo esperado.

A pesar de estar extremadamente enfermo, sucio y un poco maloliente, ella es la primera mujer que he visto en años.

Intento enfocarme en cualquier cosa menos en la imagen de esta chica parcialmente desnuda en mi brazos. Ni siquiera sé cuántos años tiene. Ella podría ser una adolescente! Ella podría estar en el Instituto! Ese pensamiento me hace estremecer.

Intento buscar algo que decirle a ella, pero mi mente está en blanco. Esto era mucho más fácil cuando ella estaba inconsciente.Cuando ella no me hablaba y no necesitaba que le respondiera. Cuando ella me miró, ella no me vio, excepto por ese momento cuando ella gritó después de que yo Cerré el telón. Incluso entonces, hubo algo vacío en su expresión, como si ella fuera consciente pero en realidad no del todo. Me alegro de haber usado la máscara con picazón, pero en su estado febril, no creo que ella estaba realmente consciente de todo lo que ella estaba pasando. Lo poco que dijo durante su  delirio era inquietante.Aunque la mayoría de sus palabras fueron murmuradas, confusas, y al menos parcialmente en español, decía algo sobre la muerte  y  sobre estar  huyendo Ella parece muy segura que alguien quiere matarla Por qué ella cree que eso está más allá de mí. Cómo ella terminó inconsciente fuera de mi cabaña, en medio del condado con la menor densidad de población en los Estados Unidos, es otra señal de que yo debía ser maldecido.

Ella está parada frente la nevera, que tiene ahora cerrada, mirándome.

-¿Tienes hambre? -Pregunto. Es obvio que ella tiene hambre, pero es lo único que puedo pensar en decir. Su mirada me está poniendo incómodo. Nadie me ha mirado desde el día que puse un pie en esta cabaña,solo unos meses después de la batalla eso me dejó lisiado y con cicatrices. En mi estado actual, atraigo miradas como La comida podrida atrae a las moscas. Eso es parte de la razón por la que elegí renunciar a toda interacción con los humanos,al menos para ser previsible en el futuro.

-Mm sí. Siento haberte despertado. -Ella da un pequeño paso adelante y me doy cuenta que ella había sido presionada contra la puerta de la nevera,encogida lejos de mí, arrugo la frente. Supongo que la máscara no esta haciéndome algún favor pero soy realmente tan aterrador para ella? Si ella va a deambular a estas horas de la noche es posible que deba comenzar a usar la máscara 24/7.

Ese pensamiento es más bien desagradable La carne cicatrizada en la máscara oculta tiene muy poca sensación y no me molesta la tela que pica, pero no es lo mismo  para la piel sana en el lado izquierdo de mi cara.

Me paro y camino lentamente hacia el refrigerador. Como antes en el dormitorio, ella me mira con mucho más escrutinio de lo que me gustaría. Me hace sentir mas consciente de mi cojera y mi brazo lisiado. Cuando me acerco a ella, ella se mueve unos cuantos pasos, fuera de mi alcance.

-Un sándwich? - Pregunto mirándola oblicuo. Ella asiente en silencio. Agarro pan y mermelada, cierro la nevera y agarro un frasco de mantequilla de maní de La cabina. Tiemblo con la bolsa de pan, que es un poco difícil de abrir con una sola mano.Junto con la mayoría de mis dedos, perdí gran parte de la destreza en mi mano derecha en la explosión. 

puedo realizar tareas simples que solo requieren el uso de un dedo índice rígido y pulgar, pero no mucho más. saber que ella me está mirando luchar con una tarea que un niño de cinco años podría completar me hace sentir nervioso, más tenso e incluso menos capaz de hacer un sándwich decente. Quiero que ella se vaya. Lanzo el triste excusa para un PB&J juntos rápidamente, esperando su ausencia cuando ella vuelve a la habitación. Le entrego el plato con el emparedado.

-Gracias. -dice en voz baja. Gruño en respuesta y regreso al sofá.

Para mi decepción, ella se sienta en el mesa de la cocina en lugar de volver al dormitorio.

-Cuál es tu nombre? - ella pregunta.  Me congelo, luego gire hacia ella lentamente, mirándola. No hay forma de que ella pueda reconocerme con esta máscara puesta, ¿verdad?

-Ryan. -digo de mala gana, haciendo una pausa para determinar si alguna chispa de reconocimiento parpadea en su cara. Nada. -¿y tu?

-Mm -se detiene, mirándome unos minutos antes de continuar. -Soy Ana. A-Analise, eh, Gillman, en realidad.

Ella se rasca la parte de atrás del cuello y se ve extraordinariamente incómoda. No hay forma que Ese sea verdadero nombre. El silencio llena el espacio entre nosotros ella vuelve a su Sandwich y yo contemplando el bosque. Mi mente vuelve a la semana pasada cuando Estaba allí cortando leña. O más bien, tratando de cortar madera. yo era diestro antes de la explosión. Volver a aprender cómo hacer todo con mi mano izquierda ha sido lento y un proceso frustrante Cortar madera siendo zurdo ha sido una particular habilidad difícil de dominar. Se tarda como cuatro veces más largo y es tres veces más difícil, pero he descubierto que es una buena manera para aclarar mi cabeza,  el esfuerzo físico y la concentración requerida deja poco espacio para pensar.