Salomé revisó su smartphone y tenía un telegram de Rogelio.
—Te tengo buenas noticias sobre la demanda al centro comercial, te estoy esperando en el restaurante Nirvana.
—Entendido, voy para allá –respondió Salomé.
Salomé se dirigió al restaurante mencionado. Allí vio a Rogelio en una de las mesas y se sentó. Rogelio pidió el plato mas caro del restaurante, para dos.
—Le dije a la mujer –exclamó Rogelio- que el centro comercial tenía un letrero de aviso de piso mojado, por lo que la culpa no podría recaer en el centro comercial. La mujer comprendió y retiró la demanda.
—¡INSUPERABLE! ¡ERES EL MEJOR ABOGADO QUE CONOZCO!
—¿Que te pare si esta noche nos vamos de rumba para celebrar?
—Encantada.