Los Auriculares

Al leer el mensaje me quedé de piedra. La respiración se me agitó y el brillo de mi celular golpeaba bruscamente mis ojos.

Renné y Taylor estaban ya dormidos y en la casa no sonaba ni el más diminuto ruido; respiré profundo, intentando calmar mis ansias un poco y escribí de nuevo.

"Yo": ¿Estarías más cómoda conmigo junto a ti?

"Loe": Sabes muy bien que si Regan.

El mensaje de Chloe me aceleró el corazón. ¿Esto era real? Después de los engaños y las mentiras, después de todas las peleas en las que juraba que estaría mejor sin mi, después de rehusarse a siquiera tocarme durante semanas. ¿Realmente estaba arrepentida o solo intentaba llegar a mi como consuelo?.

Las dudas bombardeaban mi cabeza, no sabía que hacer ni como reaccionar, pero fuera lo que fuera debía hacerlo rápido.

"Yo": Sabes que siempre voy a estar a tu lado Chloe, pase lo que pase.

"Loe": Pero te perdí...

Las palabras en mi móvil hicieron humedecer mis ojos.

¿Como le decía yo que no me había perdido a la chica que había roto en mil pedazos mi corazón?

Sabía que nada de lo que había hecho lo había hecho con intención, sabía que era una buena persona, pero a mi me había tocado ver su parte oscura.

Pero no sabía como actuar ante nada de esto. Menos con Raven y la situación con ella.

"Yo": Recuperame...

Dejé caer mi móvil en el sillón y me tapé el rostro con ambas manos.
Ahogue un grito entre mis manos y me senté en el sillón. Dudaba mucho poder dormir esa noche.

Decidí lavarme la cara para intentar refrescarme un poco. Me levanté con cuidado, sin hacer ruido para no despertar a los muchachos.

Crucé el pasillo hasta el baño con la cabeza gacha. Justo cuando iba a entrar al baño sentí como alguien tomaba mi hombro y me volteaba.

Chloe tenía su dedo indice sobre sus labios, mirándome directamente, suplicante, traviesa.

-Para recuperarnos, primero debemos perdernos- dijo susurrándome al oído.

Retrocedió un poco pero se quedó quieta dejando su frente pegada a la mía.

Mi respiración estaba agitada, mi corazón latía a mil por hora y las lágrimas escurrían por mis mejillas.

Avanzó un poco y me plantó un beso en la mejilla antes de volver a su habitación.

Me recosté a la pared y me senté en el suelo mientras suspiraba.

¿Que era lo que sentía? ¿Por quién lo sentía? ¿Por qué lo sentía?

Soy amante de los libros en general, y los de romance siempre me han gustado, pero nunca creí vivir un triángulo amoroso como los que habían en ellos...

[...]

[Dos meses después]

-Cariño despierta...- una voz dulce y tierna embriagó mi sentido auditivo despertándome lentamente.

-¿Que hora es?- pregunté adormilada volteado suavemente, quedando cara a cara con la chica dueña de la voz.

-Hora de que mi hermosa novia despierte- la rubia se inclinó levemente depositando un pequeño beso en mis labios.

Sonreí ampliamente y rodé mis ojos mientras pasaba de estar acostada a estar sentada y con las piernas recogidas.

-No eres mi novia aún- hice una pausa mordiéndome el labio inferior -aún...- levanté mis cejas viendo directamente a los labios de Raven.

Avancé un poco y besé a la rubia antes de levantarme.

Entré al baño y revisé mi móvil y junto a estos saqué mis auriculares completamente enredados.

Dejé los auriculares de lado y me enfoque en el mensaje de Bianca.

"B": Cariño ¿estas segura de lo que haces?

El mensaje de Bianca me trajo de vuelta a la realidad.

Mi vida era un embrollo emocional, no tenía idea de que rayos hacer con nada ni nadie.

Es curioso, dejé a Chloe por que su vida era un desastre y ahora la mía estaba peor que la de ella.

Froté mi cara angustiada y le contesté a mi amiga apenada.

"Yo": Sabes que no tengo idea de lo que hago B.
      Solo intento no hacer ninguna tontería.

"B": Aquí estaré para ti siempre♡
     ¡Incluso si arruinas tu vida!

El mensaje de Bianca me sacó una sonrisa. Era completamente incapaz de demostrar cariño sin hacer alguna clase de broma después.

"Yo": ¡Que amable Coleman!

Dejé mi móvil de lado y me metí a la ducha.

Después de un largo baño me vestí casual y bajé a desayunar. Mis días eran bastante similares entre si, a excepción de que de vez en cuando Raven o alguno de los muchachos se quedaban a dormir en casa.

Cuando entré a la cocina el desayuno estaba sobre la mesa.

-Hola, personas que no viven en mi casa y no se como entraron- Renné y Taylor estaban sentados en el comedor desayunando tranquilamente.

-Yo tengo llave, y a Taylor le abrió Moore- me dijo Renné sonriendo alegre.

-Raven tuvo que salir, dijo que nos veía en el instituto- me dijo Taylor pasando al lado mio y plantándome un beso en la mejilla.