Capítulo 24:Tres años después.

Capítulo 24: Tres años después.

Kijiro observó varias personas muy bien vestidas declarando que son nobles y se quedó pensando el porqué de estos nobles, pero rápidamente salió de sus pensamientos al ver a Layla platicando con un señor y este le habla con una voz amable.

Layla vio la silueta de Kijiro y rápidamente habló para llamar la atención. —Kijiro, ahora soy la dueña de todas las propiedades y herencias, pero debo de mostrarles qué desperté mi don mágico —dijo simplemente como lo más normal del mundo y Kijiro se sintió estúpido al escuchar estas palabras.

El señor noble habló: —Hoy la señorita Nessro obtendrá todos los derechos sobre la herencia dejada por Joski Nessro y todo esto puede ser llevado con la única condición de que haya despertado un don mágico para así verificar que es una adulta —dijo simplemente expresando aburrimiento al tener que explicarle la situación a un niño cualquiera sin clase social.

Kijiro habló. —Buenos días, señor noble, gracias por venir a hacer este procedimiento —dijo simplemente sin mostrar desdén o aprecio.

Layla vio esto y decidió intervenir: —Ahora te mostraré mi poder despertado, quiero que mires bien —dijo con arrogancia y poco después por el rabillo del ojo visualizó que apenas venía su madrastra y sonrió con malicia. Estiró los dos brazos para que un fuerte torrente de agua saliera disparada directamente al cuerpo de la desafortunada madrastra y al impactarle salió volando unos metros atrás por el gran poder contenido.

Kijiro abrió mucho los ojos al ver esta situación extraña y divertida, pero no sonrió. Escuchó los aplausos de los nobles reunidos y el señor noble habló: —Espléndido, maravilloso, en realidad lograste despertar tu don mágico y solamente tienes ocho años de edad, es maravilloso. Ahora mismo te entregaré toda la herencia y serás la única beneficiaria de todo; espero que te conviertas en una gran cazadora de demonios —alabó con voz cantarina y llena de aprecio como si viera una rara pieza de diamante.

Layla asintió y antes de firmar realizó varias inspecciones mágicas para que no haya problemas y firmó; entonces todos los nobles se marcharon.

La madrastra está acostada en el suelo, llorando por toda la situación que había salido de sus manos y ahora esta niña había logrado despertar el don mágico.

Layla vio los llantos ahogados de la madrastra y habló: —Es hora de que te largues de mi propiedad, sabes, descubrí que fuiste tú quien contrató aún mercenario invocador de monstruos para asesinar a mi papá y quedarte con la herencia, pero lastimosamente te salió todo mal —dijo con enojo y mirando con ojos muertos a la señora llorando.

Kijiro no dijo nada y solamente se dedicó a observar la trama; sintió que esto no es normal. Layla actuando mayor y teniendo las herencias; algo está influyendo en la mente de Layla y pensó que tal vez los recuerdos futuros se mezclaron.

*La madrastra no dijo nada y abrió los ojos con una cara asombrada llena de horror al saber que la habían descubierto y se levantó rápidamente para querer irse de este lugar y al ver que Layla se marchaba sin prestarle atención, se juro en su corazón que se vengaría y va a hacer pagar toda esta humillación.*

Kijiro observó la repentina desaparición de Layla con una mirada increíble y observó a la madrastra que estaba por salir de la mansión y rápidamente habló: —¡Espere!, por favor, no se vaya —dijo llamando la atención de la señora y esta volteó para ver al mayordomo.

Kijiro al ver que logró tener la atención de la señora en secreto liberó la niebla negra y la concentró en una pequeña sombra que se mezcló con la de la señora y lentamente comenzó a mezclarse hasta desaparecer y acto seguido la señora abrió mucho los ojos con horror al sentir un fuerte dolor proveniente del estómago, volteó para verse y observó una fea neblina negra saliéndole del cuerpo, después comenzó a sentirse débil y la niebla negra succionó todo lo que tenía hasta el alma y desapareció sin dejar rastros de que alguna vez había una persona.

Kijiro no se sintió mal al tener que asesinar a esta mujer; después de todo, este tipo de mujeres nunca dejarían sin hacer nada a las personas que la humillan y va por venganza hasta tener de rodillas a Layla. Afortunadamente, reencarno y elimino con éxito a la que sería una espina enterrada en los pies de Layla en un futuro.

Escucho unos pasos provenientes de la espalda y la voz de Layla: —Kijiro, amor, cierra la puerta. Es hora de que ponga un nuevo orden a todos estos sirvientes —dijo con calma y voz arrogante.

En un abrir y cerrar de ojos pasaron tres años donde una Layla de once años de edad completamente diferente está sentada y viendo directamente unos papeles de los diferentes negocios que tiene en funcionamiento. Además, con la ayuda de Kijiro lograron crear inventos avanzados para esta época y obtuvieron grandes riquezas.

Layla viste una túnica negra con patrones de diamante rojos; abajo de todo esto tiene un vestido de combate color rojo y unas botas negras, además de las medias blancas que le llegan hasta las piernas.

Con un cabello azul cristalino largo hasta la espalda y unos ojos hermosos, en realidad es una hermosa chica aún más hermosa que Sofía. Layla tiene la cara como una muñeca de porcelana arrogante y fría, pero llena de intelecto en los ojos.

Kijiro en este lapso de tiempo creció en altura y es un poco más alto que Layla, pero ahora tiene unos cambios físicos asombrosos. Comenzando con los ojos sin pupila que agregaron una pupila roja, cabello atado en una cola de caballo color negro azabache, brazos fuertes y una cara madura llena de precaución con la vida, además de un aura fuerte a muerte y oscuridad que emite… Viste el característico traje de mayordomo y está atrás de Layla esperando la orden de su amo.

Layla terminó de leer estas cartas y también vio la invitación a la academia imperial de la luz y sintió que debía de entrar como estudiante. Tendrá muchos más beneficios y talvez hasta sea una gran cazadora de demonios para vengarse de esos monstruos que asesinaron a sus dos padres, pero talvez en un futuro.