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6 años después….

Una pequeña niña se encontraba jugando con su muñeca en un parque junto con su familia pero de un momento a otro la niña había desaparecido, solo se dieron cuenta cuando su hermano mayor volteo para decirle algo. Pero mientras la estaban buscando ella se encontraba en un invernadero jugando y sin estar atenta a su alrededor una persona la estaba observando a escondidas sin que se diera cuenta pero no por mucho estaría escondido pues la niña empezó a perseguir una pequeña mariposa que está se dirigía a dónde estaba aquella persona está se dio cuenta y trato de salir de su escondite pero era demasiado tarde la niña lo había encontrado.

Aquella persona pensó que la niña gritaría o lloraría pero, no lo hizo lo que lo sorprendió porque la niña solo le sonrió y le extendió su pequeña manita a modo de saludo.

-¡Hola! Soy Samary pero puedes decirme Sam cuál es tu nombre.- la persona solo se la quedó viendo y al igual que ella le extendió su mano y le devolvió el saludo pero no contestó lo único que hizo fue a sentir.

La pequeña Samary en cuanto vio a aquella persona supo que era buena pero, aunque ella lo viera haci sabía que los adultos e incluso niños no lo verían de esa forma pues ella entendía que por su aspecto lo definirían como una persona bastante mala o fea pues su aspecto no daba un buen visto. Pero aún así la pequeña Samary lo jalo de la mano en cuanto le termino de devolverle el saludo y lo llevó a un pequeño banco cerca de dónde estaban Samary se sentó pero aquella persona solo se quedó parado tratando de descifrar lo que quería hacer la niña.

-Siéntate- le dijo Samary dando unas pequeñas palmas al espacio que sobraba de su lado. 

La persona solo asintió y se sentó a su lado. Samary empezó a hablar con él o más bien solo ella hablaba pues la persona solo se limitaba a escucharla, un rato después se escuchó la puerta del invernadero abrirse, también se escucharon tres voces llamando a la pequeña niña. 

Lo cual puso a la niña feliz se levantó pero antes jalo el brazo de la persona junto a ella está se resistió un poco pero viendo a la niña que iba a llorar decidió seguirla.

Samary se acercó a sus papás y hermano; y ellos al verla soltaron un suspiro de alivio pues habían pensado lo peor.

-Mamá, papá,hermano él es mi amigo - Samary señaló a la persona a su lado -es muy bueno escuchando y también muy amable.

Sus papás y su hermano solo le dieron una pequeña sonrisa por lo tierna que era pues Samary siempre les presentaba a sus amigos “imaginarios” ; su mamá se puso de cuclillas y dándole unas pequeñas caricias a su cabeza dijo-Bien pequeña ya jugaste mucho y ya nos diste un gran susto, porque no mejor regresamos a casa vale- Samary asintió sonriente, se volteo a ver a la persona a su lado y le dio un abrazo- nos vemos-le dijo y Samary se volteo con sus padres y hermano pero antes de agarrar la mano de su mamá la persona se interpuso entre la familia y creó un escudo inconscientemente lo que hizo que esta persona empezara a resplandecer y a ser visto por los padres; y hermano de la niña.

Su padre y hermano pusieron atrás de ellos a las dos mujeres pues, cuando esta persona  puso el escudo una sombra irreconocible se había abalanzado sobre ellos; la persona aseguró a la familia dentro del escudo  que había creado y salió de ella, la sombra que se  abalanzó había quedado en el suelo por el impacto, la persona se acercó y de sus manos apareció una pequeña navaja la cual aventó en la dirección de la sombra haciendo que esta desapareciera con una mano  hizo un chasquido y la barrera que protegía a la familia desapareció. 

La pequeña Samary se acercó se puso delante de la persona y con una sonrisa pronuncio- Te encontré mi vigía- Samary extendió su mano en un pequeño puño y con el dedo índice dibujo en el aire una S mayuscula con una pequeña flor de loto enfrente, este dibujo apartir de ahi se convertió en su propio sello.Y murmurando dijo- de ahora en adelante dejarás de ser un alma perdida pues te elijo a ti para ser mi vigía y ahora te llamaras Sebastián, que dices- la pequeña le sonrió emocionada con un brillo en los ojos y la persona delante de ella solo le regaló una pequeña sonrisa se puso de cuclillas y por primera vez desde que se conocieron le hablo-Pequeña princesa aceptó ser su vigia, aceptó el nombre y de ahora en adelante solo le servirá a usted- y bajo en señal de respeto la mirada; Samary extendió por completo su mano y  dio un pequeño empujón al sello que realizó, lo que hizo que este al ser empujado se extendiera y traspasara el cuerpo de ahora la persona llamada Sebastián se desapareciera, Sebastián empezó a cubrirse de una luz azul y al desaparecer este ya no estaba si no que en su lugar estaba un lobo de color azul electrico. y entre sus orejas se podía distinguir el dibujo que minutos antes Samary había realizado pero en este dibujo se anexó otra pequeña S en minúscula al lado de la otra S, Samary se acercó al lobo y le dio un abrazo.

Doce años habían pasado desde aquel dia ahora Samary había dejado de ser una pequeña niña de seis años y había pasado a ser una jovencita a punto de cumplir dieciocho años y tomar la responsabilidad de quizás ser la reina de Avaloria aunque eso a un lo estaban discutiendo o más bien reconsiderando sus padres ya que pues…

-Alfred!- exclamó un rey no muy contento

El nombrado vino lo más rápido que pudo e hizo una pequeña reverencia-si su majestad-

-¿Dónde está la princesa heredera? Se supone que después de la escuela tenía que estar presente aquí pero no la veo por ningún lado ¿donde está?- y señalando le dijo-y mas te vale que me digas la verdad.-

- Bueno  su majestad la princesa está, como se le podría decir, dando un paseo por el mundo humano- y antes de que el rey dijera algo este se adelantó y dijo- pero no se preocupe está con Sebastián.-dijo el pobre hombre asustado.

Pero mientras tanto Samary si estaba en el mundo humano, pero más que paseando, más bien estaba escapando de unos guardias de seguridad junto con su vigía Sebastian.