Sangre Dorada

El hielo, el agua y el fuego

Capitulo 9

 

Al día siguiente Adison despierta sintiendo ese gran vacío en su casa, se levanta de su cama y observa a Edgar en una colchoneta en el suelo arropado de pies a cabeza y la sonrisa en su rostro no se hizo esperar. Trata de no hacer mucho ruido al abrir la puerta de su habitación e ir a la cocina, bajando las escaleras sabe muy bien que no escuchará esas voces que tanto anhelaba escuchar, se iba imaginando cada momento, un torbellino de recuerdos...

«Adison tu desayuno está listo«

«Hijita ven vamos, apresurate«

«te amo mi niña... Te amamos«

Muchas palabras de su abuela y su abuelo venían a su mente a medida que iba bajando las escaleras, al llegar a la cocina suspira pensando que hacer para ella y para Edgar, se le ocurre algo sencillo y ligero para comenzar el día... Comienza primero en calentar el agua para el café, luego saca un pan integral y lo calienta en una sartén a fuego medio para que no se le quemen, fríe unos huevos, saca un combo de jamón y queso amarillo de la nevera para colocarlos en el mesón, termina de preparar el café y al mismo tiempo va colocando todo en el mesón para cuando Edgar se despierte la acompañe a desayunar. 

-Vaya que rico huele aqui- dice Edgar estirándose por completo para terminar de despertarse como es o quitar la flojera en su cuerpo. 

-Aca está tu plato- le señala junto con la taza de café.

-¿Te han dicho que eres increíble?- pregunta, y ella sonríe. 

-Obvio que si- contesta divertida. 

-¿Que tanto hacían tu y Percy en la habitación?- Adison se ahoga con el café y empieza a toser y Edgar solo se ríe con algo de pan en su boca, se calma para poder tragarlo.

-Nada- responde aún tosiendo.

-Unju, cuéntame qué pasó entre ustedes, tu sabes que soy bueno para guardar secretos... Además ¿Cuando nos hemos dejado de contar algo?- le menciona.

Adison hace un gesto con su cabeza mirándolo como si le costará tanto decirlo. Pero razón tiene en lo que acababa de mencionar. 

-Esta bien, pero que esto quede entre tu y yo- dice advirtiéndole con su tenedor... - Percy y yo...- hacia una pausa porque no sabe muy bien como mencionarlo, -Tuvimos un acercamiento...- y se queda otra vez trancada -Algo.... Inti...- va diciendo como si le costará pero en ese preciso instante. 

Tocan el timbre.

-Affss!- dice exasperado -¿Quien a esta hora?,- pregunta picado por la interrupción de su conversa. 

-Relajate ya te contaré.. voy abrir- contesta dirigiéndose a la puerta principal.

-Hola Adi- saluda Sofía entrando para abrazarla. 

-Hola Sofi, ven te invito una taza de cafe- y cierra la puerta acto seguido.

Sofía saluda a Edgar para luego sentarse al lado de el, Adison frente a ellos y le sirve su taza de café. 

-¿No vas a ir al colegio hoy?- pregunta. 

-Acaso me ves con el uniforme puesto- responde sin ánimos de ir, -No ire, me tomaré tres días de duelo, quiero estar ligeramente fuera de dolor- contesta. 

-Bueno si deberías tomarte esos tres días, así te relajas y piensas en muchas cosas-, contesta Sofía y comienza a tomar un sorbo de café. 

-Me mudare- contesta Edgar, -Asi no vives sola en esta gran casa-.

-Ay no!.. no es necesario- contesta Adison disfrutando su pancito con queso.

-Me parece muy buena idea, yo me quiero sumar- dice Sofía. 

-Bueno vivamos los tres aquí ¿Que opinan?- pregunta Adison emocionada por la buena idea que se le acaba de ocurrir y los chicos contestaron al mismo tiempo. 

-¡Si!- contestaron al mismo tiempo ambos. 

-Bueno ya está decidido, desde hoy ya viven conmigo y obvio no hay reglas... Hay una habitación para cada uno de ustedes- les informa.

-Si ya lo sabemos-, contesta Edgar vacilante. 

-Uy! Ni se para que lo menciono- responde Adison, ambos saben muy bien como es la casa. 

Disfrutaron de un buen desayuno cosa que le agrado a la vampiresa para olvidar un rato su dolor por la perdida de sus abuelos. Edgar y Sofía se fueron al colegio y mantendría a Adison al tanto de las clases, sin embargo ella se quedó en casa arreglando unas cosas para luego pasar a ducharse, a lo que llena la tina de agua y vierte sus líquidos jabonosos en el, se relaja estirándose por completo dentro de ella, el agua comienza a enfriarse de una manera fenomenal pero cuando va a salir que empuña sus manos en los bordes de la tina el agua pasa a ser caliente por lo que de inmediato salta de ella.

-Affss! ¿Que esta pasandome?- se pregunta ella misma. Pero decide intentar otra vez usando sus poderes, el agua de la tina permanece caliente con el vapor saliendo de ella, Adison solo usa el movimiento de su palma y el agua se congela, luego empuña sus manos y el agua se calienta a vampor y cuando alza sus dedos el agua sale en forma de bola flotando en el aire. -¿Que clase de poderes tengo dios mío?- se pregunta impresionada. Se viste de inmediato para contarle a Edgar pero se acordó que no debe ir al colegio por los tres días de duelo, no le queda de otra que esperar a que su amigo llegué a la casa. 



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En el texto hay: vampiros, brujas, amor

Editado: 13.11.2021

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