Mi dos mejores hombres

Capitulo 11

-Affs! Esto no para de sangrar- lo digo de una forma extraña ya que el fluido no es rojo como debería ser, sino un dorado hermoso, abro la llave del lavamos y dejo chorrear el agua en mi herida, disminuye por lo que es algo bueno incluso la herida ya se va cerrando. -El agua me sana- dije para mí misma. Salgo del baño y me recuesto en mi cama a pensar en lo que me pasa, por ahora no comentarle a nadie, solo a Edgar. Aunque quería decirle a Percy también es bueno guardando secretos. Escucho la puerta y me sobresalto. 

-¿Podemos...?- pregunta Percy, pero ya Edgar ha abierto la puerta. 

-Seras que puedes aprender a ser educado- menciona Adison pícara, ya que no dejó terminar a Percy en su pregunta. -Y si estuviera desnuda ¿Ha?- 

-Obvio se que no estabas desnuda por eso abrí, pero acostumbrate porque vivo aquí y estaré abriendo puertas- Percy lo mira serio. -Calmate hombre, no me refiero a ese tipo de puertas- vacila con el. 

-¿Cómo que ahora vives aquí?- pregunta sentandose al lado de Adison en el pie de la cama y Edgar frente a ellos. 

-Si, Sofía y yo nos mudamos con Adison para estar con ella y no se sienta sola- responde. 

-Que bueno, eso me deja más tranquilo saber que ahora estarán con ella acompañandola- 

-¿Y Mónica no se molesta porque estés aquí?- pregunta Adison y a la vez comiendose una mandarina.

-Termine con ella-. Adison y Edgar lo quedan viendo dudoso. -¡de verdad! No miento- y las miradas siguen iguales.

-Bueno más te vale ok- añade Adison señalandolo con una mandarina tipo amenazante. El se ríe. 

-Cuidado y me matas con la mandarina- ambos ríen. Ella se acerca a ambos y los abraza. 

-Son mis dos hombres favoritos- añade. 

-Yo soy tu hombre favorito, Edgar es tu hermano favorito- corrige Percy vacilando. 

-Ya deja los celos hombre- contesta Edgar del mismo tono de su mejor amigo. 

-¡Ay! ya callense los dos, a ambos los amo y agradezco que esten conmigo- contesta. 

Al cabo de toda la tarde estuvieron conversando y hablando de unas que otras cosas, Sofía se sumo también ya que vive en la misma casa por lo tanto es un ambiente diferente para Adison, le hacen olvidar un poco el dolor de la pérdida de sus abuelos. Entre tantas conversas, el timbre de la casa suena por lo que todos se extrañan, pero Adison tenía a alguien en mente. 

-Seguro es Mónica que vino a buscarte- menciona levantandose del mueble. 

-No creo, igual te acompaño- dice Percy siguiendola. 

Al abrir la puerta se encuentra con una mujer de piel blanca, cabello rubio muy bonito y unos ojos azules como el cielo. 

-¿Disculpa le conozco?- pregunta por la extraña presencia de la mujer y que nunca la había visto en su vida. 

-Hola Adison, se que esto te va a parecer muy extraño.. pero soy tu tía Casandra la hermana de tu madre- la vampiresa trago en seco, sus abuelos jamás le mencionaron nada acerca de sus padres o parientes cercanos, solamente decían que desaparecieron sin más que agregar.

-Esto se me hace muy extraño pero ¿como es que nunca apareciste en mi vida sino hasta ahora?- pregunta.

-Supe lo de tus abuelos adoptivos, se que debí aparecer mucho antes pero estaba en tu búsqueda hasta que di contigo- responde. 

La bruja de negro se da cuenta de algo muy inusual en ella y sobre todo en la casa que de cierta manera Adison no sabe, sus abuelos fueron muy astutos al colocar cierta hierba en el umbral de la puerta cosa que no deja pasar a ninguna bruja a no ser que la inviten a pasar, cosa que parece ser complicada porque los unicos que deberían invitarla a pasar están muertos debido a que ellos fueron los que hicieron tal hechizo o alguien más pudo haberles ayudado. 

-¡Que interesante!- incorpora Percy. -Justamente cuando los abuelos de Adison mueren, es que usted aparece.. No me parece coincidencia- la detalla de pie a cabeza como si de un escaner se tratara. 

-Percy comportate- añade Adison, para Margot esto se le ve demasiado complicado ya que ambos son algo desconfiados con personas nuevas. 

-Me gustaría que hablaramos si no es mucha molestia aqui afuera, te puedo explicar todo acerca de nuestra familia- suena algo convincente en su voz. 

-¿Y porque no gustas pasar?- pregunta Percy desconfiado, en su voz se le podía notar. 

-No sería bien entrar de buenas a primera- contesta sin saber que decir, pero lo dice más bien por la hierba del umbral que no le da paso. -Somos familia no le haría daño a mi única sobrina- añade viendo seriamente a Percy que no ha dejado de mirarla desde que ha llegado, cierta mala espina le causa al joven y por lo tanto no se aparta de Adison, algo que debe planear bien como acercarse a ella sin que este él como guardaespaldas, se piensa haciendose muecas en la mente pero no físicamente. 

-Tranquila podemos conversar en el colegio ¿si gustas claro?- pregunta Adison, una idea para no estar a solas con la desconocida que dice ser su tía, de alguna manera Percy la puso pensativa por su comentario anterior, mis abuelos mueren y de la nada se me aparece una tía perdida, ¡Muy extraño para mi gusto!.