Adán y Eva tuvieron dos hijos, Caín y Abel. Abel cuidaba ovejas y Caín cultivaba la tierra. Ambos ofrecieron regalos a Dios, pero Dios solo aceptó el de Abel. Esto enfadó a Caín, quien luego llevó a Abel al campo y lo mató. Dios castigó a Caín haciéndolo vagar por la tierra. Caín construyó una ciudad y tuvo descendientes. Adán y Eva tuvieron otro hijo, Set, y la gente empezó a adorar a Dios.