-Siete, ocho, nueve, diez – cuento otra vez porque parece que solamente hasta ese numero puedo contar, porque debido a mi escape ayer hoy estoy pagando horas extras – completo – habla el caballero que esta recibiendo las cajas de los platos, que se han contando en tres ocaciones
Doce de la noche y aun me falta contar todos los cubiertos, comienzo por las cucharas de postre, las colocamos en sus lugares y luego en el camion, cada una es contada en dos ocaciones y anteriormente contamos con los meseros, entrego todo, cargo lo que nos pertenece a nosotras y lo monto en el auto, al fin he terminado son las tres de la mañana, aun me lfalta manejar a mi casa, bostezo, me masajeo un poco el cuello porque esta muy tenso, entro al auto, no soy capaz de conducir con sueño, asi que decido quedarme a dormir un poco dentro para poder conducir en unas horas, busco mi maleta y encuentro algo con que cubrirme para poder espantar el frio.
Un golpe me despierta sobresaltada, es el guardia del lugar y tiene cara de pocos amigos, bajo la ventanilla y escucho sus gritos de reclamo del porque estoy en el estacionamiento durmiendo, intento explicarle que tuve un evento que termino tarde pero que me quede dormida en el auto despues de eso, son las cinco de la mañana, no entiende nada de lo que le digo, intento ireme pero no me lo permite, llama al gerente que parece que esta de vacaciones porque no llega, despues de una hora discutiendo con el policía e intentando por todo los medios que no soy un delincuente o cualquier cosas que se imagine, llega el gerente el cual también es iracional que me acusan de ladrona.
-Señor gerente – llamo su atención porque solo escucha al guardia que no hace mas que culparme de ladrona – soy la organizadora de la boda que se realizo ayer por la noche por lo que no soy una ladrona, le dije al guardia eso pero no entiende razones, termine de desocupar el salón hoy por la madrugada, antes de que fuera la hora de entrega a las siete de la mañana de hoy y saco los papeles y como ya era tarde para ir y luego regresar de mi casa me quede en el parqueo esperando la hora asi que será posible que me reciba los papeles de entrega me firme la entrega del pago y yo me pueda ir a mi trabajo
En ese momento el gerente paso de rojo furioso a blanco papel, intenta por todos los medios alejar al palicia, demora mucho en entender la situación, se marcha, pide una disculpa, en realidad no estoy enfadada acepta puedo decir que el guadia de seguridad del lugar me encontró con un buen humor.
Como compensación por el escandalo ocacionado, la empresa nos da dos habitaciones por tres días canjeableas en el siguiente mes.
Llego a la bodega, coloco las cosas en el lugar correspondiente, también saco lo que se necesita para la tienda que debemos de colocar para la decoración de este mes, que por cierto me corresponde a mi.
Debo de ir a comprar un celular porque no puedo estar incomunida sin contar que debo de ver lo del radi es algo que debo de averiguar, si sigo con la lista me voy a volver loca con tantas cosas por hacer.
Manejo a las oficinas, bajo las cosas e ingreso con todo lo necesario para el cambio de los mostradores y las vitrinas, me sorprende ver el mostrador porque lo único aparece en mi campo de vison son varios ramos de rosas.
-Ahora somos una floristería – hablo, la respuesta es inmediata
-Son de agradecimiento por el evento realizado – habla Dulce
-Estan bonitas, ¿Qué vamos hacer con tantas rosas? – cuestiono en lo que entro, su mirada solo dice, que es mi decisión, veo mi escritorio y en el hay un arreglo con globos y de base tiene una canasta dentro hay una caja, me acerco - ¿Quién lo mando? – mis amigas niegan con la cabeza y yo tengo un presentimiento sobre quien pudo haber mandado dicho arreglo, con un poco de desconfianza abro el regalo que trae al momento que el envoltorio esta roto veo que es un celular, niego con la cabeza no lo termino de desempacar en el arreglo veo una tarjeta la abro y la firma es de mi hermano, me tranquiliza sobre manera que sea un regalo de mi hermano y no de quien pensaba.
Saco el móvil de su caja y me encanta porque es el nuevo modelo, uno reciente esta precioso, es color azul y me encanta, busco los textos y le escribo uno en agradecimiento por el regalo, estoy tan concentrada que no presto atención a lo que sucede hasta que soy llamada a gritos.
-¿Qué? – pregunto
-Te buscan – me hacen una seña para donde se encuentra una persona, viene a entregar un paquete, me acerco
-Señorita Madeline – asiento con la cabeza – me puede prestar su documento de identificación
-Sí, - lo entrego y me da un paquete sellado de color negro es una caja grande, firmo el joven se va, abro el paquete y dentro encuentro – que rayos voy hacer yo con dos celulares, lo saco y es el mismo modelo solo cambia el color, este es blanco, en la otra caja encuentro un juego de radios, son tres, los llevo a la mesa
-¿Qué es lo que te enviaron? – niego con la cabeza porque para mi son dos problemas, Helena se pone de pie acercándose a mi escritorio, ve con atención las tres cajas, me paso la mano enla frente repetidas veces esperando a que diga algo mi amiga, espero mucho pero al fin dice - ¿Qué vas hacer con todo eso?
- Pequeño detalle – hablo – este es el regalo de mi hermano y el otro de mi novio ¿Cómo los rechazas?
-Espera un momento dijiste novio – niego con la cabeza pero no puedo contener la risa y asiento con la cabeza
-Si dije novio – le hago una mueca para que se ria de mi – puedes reírte
-No, no lo que voy hacer es celebrar – niego con la cabeza y dice – todos estos años, al fin estas con otra persona – me abraza y niego con la cabeza
-No lo celebres demasiado aun no hablamos de eso – me suelta y me ve con enfando
-Tú no aprendes verdad, es lo primero que tienes que hacer
-En mi defensa cada vez que lo intento sucede algo, pero lo tengo que hacer antes de que reciba mi respuesta