Capítulo 9

Taína

El plan inicial era simple y tranquilo, nada que ver con lo que pasó, iniciaré desde las cuatro de la tarde. 

Todos nos encontrábamos sentados en tumbonas platicamos tranquilamente, cuando nos dimos cuenta de la hora, recordamos que debíamos ir a comprar los últimos suministros, para regresar al crucero después, todo estaba bien, hasta el instante en que nos colocamos en pie, al levantarme sentí mi mundo dar vueltas de 360 grados, casi podía sentir mi estómago caer a mis pies 

- Chicos estoy muy mareada - susurre tratando de mantener el equilibrio 

- Yo también - un susurro general se escuchó 

- ¿Qué nos está pasando? - pregunté preocupada, mi visión se tornó borrosa, la voz de mis amigos la escuchaba distorsionada, sin razón empecé a reír sin parar 

- Chicos miren esa ave que sale del agua es de lo más colorida, quiero tocar sus plumas, son tan hermosas - trate de caminar hacia lo que creía era un ave gigante, de tamaño humano, salir del mar, Demian me sujeto, haciendo que ambos cayéramos al suelo, todos nos reíamos porque ni Ismaíl ni yo logramos levantarnos del suelo, como la tierra se movía era imposible que lográramos mantener el equilibrio 

- Sara amiguita ayúdame, el suelo se mueve, seguro es un terremoto - Sara me ayudo a colocarme en pie 

- ¡¡Oh no!! Chicos si es un terremoto tenemos que correr, por el tsunami, no podemos estar aquí, hay que ir a las montañas - grité alertaron a mis amigos 

- Pero Taína aquí no hay montañas - 

- Entonces vamos a morir - rompí en llanto abrazando a Sara y a Ángela, las tres lloramos a mares 

- Chicas las quiero mucho, nunca me dejen - 

- ¿Porque lloramos? - preguntó Ángela, le iba a responder, pero no recordaba por qué lloraba 

- No se - le reste importancia 

- Chicos vamos a jugar, veamos quién corre más rápido - pidió Rubén 

- ¡¡Si!! Yo quiero jugar, Demian trae tu cámara hay que grabar todo - gire sobre mi eje, Ismaíl río tomando su cámara 

- 1..2..3.. A correr - gritó Eduart, todos corríamos por la playa, mientras Ismaíl grababa a nuestro lado, no sé por cuánto tiempo corrimos, pero ya tenía hambre 

- Chicos tengo hambre comamos - 

- Si vamos a comer - pidió Ángela, así que todos caminamos buscando comida, no encontrábamos nada, las calles oscuras estaban solitarias, pero tenía mucha hambre 

- !Ahí¡ vamos por comida a ese lugar - mire el lugar que Rubén señalaba, parecía un bar, tenía unas motocicletas estacionada afuera, todos entramos al establecimiento 

- Señor tenemos hambre, ¿Qué tiene de comer- pregunté 

- Aquí no se sirve comida, esto es un bar no un restaurante, acaso eres ciega o estúpida - me dijo el sujeto muy enojado, rompí en llanto, Ismaíl se acerco rápido a mi 

- ¿Que te pasa cariño, porque lloras? - 

- Ese hombre me dijo Estúpida - Sara me abrazo consolandome, Demian miró al sujeto y se lanzó encima de él atravesando la barra para caer del otro lado, mucho hombres muy grandes se acercaron a golpear a Demian, así que Rubén y Eduart le ayudaron, todo se convirtió en una gran pelea, muchos vidrios rotos caían al suelo, tome una jarra grande de vidrio y se la revente en la cabeza a un hombre que quería golpear a Ismaíl en la cara, lo ayude a levantarse, tome las llaves que el hombre tenía 

- Corran chicos corran - grite con muchas llaves en mi mano, cuando salimos del lugar, subí a una moto y le metí la llave pero esa no era la moto, por suerte la encontré rápido Demian subió conduciendo conmigo detrás de él, los seis arrancamos a toda velocidad mientras los hombres nos gritaban muchas cosas groseras, reía sin parar, saque mi celular, que no sabía que tenía en mi sostén, coloque una canción  de Drake con bad bunny Mía, todos la cantamos a toda voz, recorremos las calles a gran velocidad, sin rumbo, recordé que teníamos que comprar Nutella 

- Chicos la Nutella, no podemos dejarla o yo moriré, vamos por mi Nutella por favor - pedí 

- ¡Vinimos por mi Nutella! - le gritaba a todas las casas pero en ninguna me decían donde estaba mi Nutella, tenía mucho miedo y si no la encuentro, tendré que irme sin ella, y voy a estar muy triste, yo no puedo dejarla sola, ella es mi amiga 

- Miren ahí tienen a Nutella - Ángela tenía razón, entramos a la tienda tomando tres carritos, buscamos a mi Nutella por todas partes mientras guardamos las demás cosas, teníamos muchos takis y papistas, me subí dentro del carrito, las chicas me imitaron, cuando llegamos donde estaba mi Nutella parecía un sueño había muchos chocolates, helado y caramelos, cojimos de todo los carritos estaban llenos, íbamos a irnos cuando una mujer muy enojada nos gritó muchas groserías 

- Malditos ladrones, no han pagado nada, regresame todo eso ya - la mire enojada 

- Esto es mío, yo busco a mi amiga Nutella desde hace mucho tiempo y tú la tenías secuestrada, ¡Eres mala! - grite de regreso

- ¡¡Corran!! - grite a los chicos, nos llevan en los carritos mientras reíamos, Demian sacó un monto de billetes y se los tiró a la mujer loca que nos perseguía