Después del acto tan dulce que Luca tuvo conmigo me quedé profundamente dormida en el sofá, era muy cómodo no podía negar que la cama donde dormía era comida, pero ese sofá era más fresco para dormir una noche de verano.
Unos bullicios me despertaron, miré hacia la ventana pude notar que estaba por amanecer había pasado toda la noche en el sofá, pero seguía con el cobertor, ahora tenía un poco de calor, me iba a levantar hasta que vi a Paolo y Luca en la cocina.
Paolo caminaba de un lado a otro y Luca negaba con la cabeza, parecía que ambos estaban preocupados por alguna situación, Paolo miraba con rabia a Luca, pero Luca solo negaba con la cabeza.
― ¡Maldita sea Luca! ― Grito Paolo. Si estaba furioso.
― Paolo ya me he disculpado contigo, de verdad lo siento.
― ¿Por qué dejaste la puerta abierta? ― Dijo furioso mientras solo el mesón de la cocina los separaba, se podía sentir que el ambiente se sentía bastante pesado, algo muy malo estaba ocurriendo entre ellos dos.
― Lo olvide no es algo que haga todo el tiempo, aparte tú mismo les dijiste que no fueran a subir y lo primero que hace Stefania es subir, en serio lo lamento mucho, se me paso soy un ser humano también cometo errores pero tampoco puedo estar pendiente de lo que hacían esas tres mujeres.
― ¿Ahora es mi culpa que ella haya subido? O sea que fue mi culpa que Stefania que estaba contigo no conmigo. ― Luca parecía ya muy molesto también. ― A ver dime Luca ¿Por qué no la llevaste de una vez a tu habitación y te la tirabas como lo tenias pensado? ― Pregunteo Paolo molesto.
― Porque no quería estar con Stefania. ― Exclamo Luca.
― Si claro esa mujer era bellísima y ahora me vas a decir que no ibas a estar con ella.
― No Paolo no quería y no te tengo que explicar las razones. ― soltó el aire por su nariz.
― Bueno eso no es lo importante, Luca te diré que sí es tu culpa … ― Paolo chillo, pero Luca lo interrumpió.
― Tú mismo me dijiste que habías hablado con Renata y que ella lo había comprendido ¿Le dijiste a Renata que no podía subir al igual que a sus amigas? ― Pregunto Luca algo incomodo, aunque parecía molesto
― Si eso hice tú me lo dijiste y eso lo hice.
― Parece que una de sus amigas no entendió las órdenes, tan sencillas de no subir al segundo piso.
― Mataste a mi novia Luca. ― Paolo sollozo. ― Renata era mi novia y sabes lo mucho que la quería. ― su mirada ahora era de tristeza, parecía que estaba llorando.
― Yo no mate a nadie Paolo, entiéndelo por favor, recibí una orden de Alessandro, él estaba muy molesto cuando se enteró que eso había pasado y tocaba seguirla nada más.
― ¡Luca era mi novia! ― Grito Paolo histérico nuevamente.
― ¡Ya basta Paolo! ― Grito también Luca. ― ¡Se muy bien lo que paso! Y sabes que con Alessandro se hacen las cosas bien, mal o a su modo no hay de otra y él me dijo que persona que viera a Vanessa debía morir ¿Por qué crees que tuve que matar a Marcello y a su compañero? ¿Por diversión? No Paolo yo estaba siguiendo una orden y eso es todo, de verdad lamento mucho lo que paso con Renata y sus amigas, de verdad lo siento, me pediste que las dejara venir te había dicho que no hasta que al final acepte y mira lo que paso ― La mirada de Luca era amenazante mientras miraba a Paolo que bajo la guardia.
― Lo sé, pero la verdad la extraño mucho. ― Paolo estaba devastado.
― Tú sabes mejor que nadie como son los negocios en esta vida, haces las cosas como son o te mueres, así de simple. ― Concluyo Luca.
Los dos hombres se quedaron en silencio, era demasiado incomodo. Los dos s miraban molesto, pero Paolo estaba histérico por todo lo que ocurrió, parecía que quería matar a alguien.
―Sabes de quien es la culpa de esa mujer no estaríamos metidos en este problema, por culpa de esa zorra que trajiste, Renata estaría con vida y nunca voy a entender porque no dejaste hacer lo que Alessandro ordeno, primeramente.
― Tengo razones para no hacerlo y no te tengo que decir a ti.
― Pero eso si esa orden de Alessandro si la pudiste cambiar ¿verdad?
― No permito que lastimen a un inocente y lo sabes nunca lo he permitido.
― ¿Renata no era inocente? ― Paolo parecía que iba a perder la cabeza.
― Maldita sea Paolo, tú novia y sus amiguitas jamás debieron venir aquí, te lo dije y lo primero que haces es traerlas.
― ¿Qué secretos guardas Luca? ¿Por qué proteges a esa? ― Paolo parecía ahora exceptivo por lo que estaba pasando.
― Eso no es de tu incumbencia Paolo, las ordenes que dio Alessandro él mismo las cambio eso es todo, yo en sus asuntos no me meto, yo solo los cumplo así sin más, las primeras ordenes de Alessandro lo iba hacer, pero luego el mismo las cambio y yo simplemente las seguí. ¿Contento?
― Si seguro, Alessandro Gualandi no cambia una orden así porque si, algún día sabre que tanto escondes Luca Gualandi, pero donde me entere que esa mujer tenía la culpa de que Renata está muerta y que ella debió morir antes, yo mismo la matare. ― Dijo Paolo girándose y yéndose hacia las escaleras, escuche que subía a toda prisa y cerró la puerta de un fuerte portazo.
Me senté en el sofá sin decir una palabra, pude ver que Luca suspiraba, parecía aliviado. No sabía que decir o hacer, con cuidado doble el cobertor lo deje sobre el sofá y camine hasta la cocina para estar al lado de Luca, de verdad parecía que no estaba muy bien.
― Lo siento. ― Dije mirando a Luca que aún no levantaba la cabeza, cuando la levanto su cabeza, sus ojos se abrieron estaba sorprendido. Abrió su boca para decirme algo, pero los dos escuchamos las pisadas de Paolo bajar por las escaleras, nos miramos despavoridos, no era el momento para que Paolo nos viera a nosotros dos como si nada estuviera pasando. Luca agarro mí me jalo hasta la lavandería.
― Quédate aquí hasta que regrese no vayas a salir ni hacer ningún ruido. Por favor, ya regreso. ― puso su dedo índice en su labio, asentí; me guiño un ojo y cerro la puerta. Me senté encima de la lavadora para esperar que Paolo se volviera a ir.
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Editado: 02.06.2022