CAPITULO 18

  Narra Julia:

- Y para mi, ¿no hay un abrazo y un beso?- me quede congelada en mi ligar al escuchar esa voz que tanto extrañaba, la persona por la cual moría desde niña, esa persona que me quiere a pesar de todo, me di la vuelta encontrándome a....

-Daymond, hijo- saludó el abuelo, no entiendo por qué todos están tan separados- tiempo sin verte.

-Lo sé, abuelo, pero la manada me necesitaba, y vine porque estaba deseoso de volver a ver a mi pequeña Julia- dijo mirándome con una linda sonrisa, la cual correspondí- ¿No me das un abrazo?

-Claro que sí, tonto- le contesté como cuando era niña.

Les cuento, Daymond siempre fue el primo protector, decía cosas sin sentido y que me hacían reír mucho, el y su hermana menor, Lina, eran como una distracción y creo que el no cambiará nunca, sigue igual que la última vez que lo vi. Ahora que lo pienso, yo nunca crecí con ninguno de ellos, tampoco vein a la prima Paulina desde que yo tenia diez, todos dejaron de visitar, aunque nunca de llamar o preguntar por mi madre, yo fui la que perdió contacto con todos cuando cumplí los quince.

-Daymond, por lo visto no as cambiado nada- le digo entre risa, pero siento como que está oliendo mi pelo y ya es algo incómodo, me separo de él pero me sigue sosteniendo de la cintura- en serio te extrañe, pero...

-Julia....

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    Narra Jayden:

Estaba super nervioso, ya pasó una semana desde que ese tipo se llevó a mi amada Luna, dos días después de eso me había llegado una invitación a una fiesta en el castillo del Rey vampiro o eso decía la invitación ya que estaba en el castillo pero no había nadie. Se supone que en una fiesta hay mas invitados y aquí solo estoy yo, no hay nadie mas y estoy comenzando a pensar de que esto es una maldita trampa.

-Alpha Jayden- dijo una voz familiar detrás de mi, el olor a putrefacción le acompañaba a esa persona, voltee encontrándose al vampiro detrás de mí- que gusto volver a verle, ¿supongo que está aquí por la fiesta?

-Así es, vine por la dichosa fiesta, pero por lo visto no hay ninguna- le dije en modo de defensa.

-Tiene razón, pero vamos, que ya la fiesta empezó y nos están esperando- dijo caminando por un pasillo un poco extraño, ¿Desde cuándo a los vampiros les gusta el color amarillo o el dorado?

Yo sólo lo seguía sin bajar la guardia ya que podría ser una trampa. Seguimos caminando hasta que paró frente a una puerta de ¿oro? La abrió me invitó a pasar por ella. Al cruzar la puerta una luz cegadora me recibió dejándome ciego por unos minutos. Cuando me acostumbré a la luz, y vi que el Rey estaba igual, continuamos caminando hasta llegar a un castillo más grande que el de él mismo Rey vampiro, lo cual me dejo confundido, este lugar no parecía estar en la tierra donde nací.

Nos acercamos a la puerta y las personas que estaban ahí nos dejaron pasar después de inclinarse ante nosotros, creo que fue a causa del vampiro ese. Entramos al dichoso castillo y nos dirigimos hacia donde habían mas pasillos, me estaba desesperando y esperando que en verdad no fuera una puta trampa, porque antes de que este sujeto intentara algo en mi contra, yo lo mataría primero.

Después de un rato de estar siguiendo pasillos dentro del Palacio, que por cierto, no era nada comparado con lo que se ve afuera, llegamos a un enorme salón de baile donde habían distintas especies y lo que creo que eran Dioses. Ese salón era enorme y la verdad no conozco a nadie aquí, voy caminando hasta que un olor familiar llega a mi, no me detengo a pensar en nada y sigo el aroma hasta que la veo abrazando a un tipo.

-En serio te extrañé, pero...- no termino ya que yo la interrumpí.

-¿Julia?-todos voltearon a verme, y yo sólo quería salir de ahí e irme lejos de ella.

-J-Jay- dijo con algo de confusión en su voz- ¿Qué haces aquí?

-Lo mismo pregunto yo- le dije casi matando con la mirada al tipo que aún la tenía abrazada de la cintura, ella al parecer se dio cuenta ya que se soltó, lo cual le agradecí.

-Esta fiesta la organizó mi tío para presentarme, no espere verte aquí- dijo con alegría en la voz y tratando de acercarse a lo que yo retrocedí- Jayden, ¿que pasa?

-Creí que te habían secuestrado, estaba preocupado, pero veo que no valía la pena- dije con dolor en mi voz, me dolía verla en los brazos de otro hombre, y ahora sólo quiero irme a casa.

-Jay, amor, ¿de que hablas?- no se si es que a ella le afecta o no, pero no la quiero cerca de mi, no por el momento- Jayden, escucha, si es por lo del abrazo, tiene una explicación...

-¿Cuál? ¿Que ya no quieres estar conmigo porque encontraste a alguien mejor?- no se por que le digo estas cosas, sólo estoy hablando sin pensar- Mira, Julia, yo no quiero pelear contigo, sólo continúa con lo que hacías y olvídate de mi.