Introducción

Años de estudio e investigación en las tradiciones filosóficas, teológicas y espirituales de oriente y  occidente e incursiones en el campo de la física cuántica, culminaron con la preparación de este Libro.   No caben dudas de que con una lectura detenida y consciente ustedcomprenderá la profundidad de los principios que el texto revela,  o  “recuerda” en cada una de sus líneas. Paso a paso encontrará respuesta a muchos de los interrogantes que día a día acosan a la mente de una manera clara y precisa. En la inteligencia de que nada es casual, como todo en la existencia obedece a un orden armónico y perfecto, como el universo en sí mismo es la Perfección que se  maneja inevitable y fatalmente por medio de causas y efectos, entiendo que este libro ha llegado hasta usted porque así debe ser. Considere pues la infinidad de hechos que sirvieron de causa para  que esta obra  sea su efecto, vea la luz y sirva, cual es su objeto para orientar de un modo u otro a su permanente búsqueda de la Verdad. Como todo en la existencia está conectado por lazos invisibles que conforman el gran tejido espiritual diseñado por Dios, no hay casualidad, azar ni suerte en las relaciones que se entablan en nuestra vida. Así el vínculo maestro-aprendiz, esposa-esposo, padre-hijo, no podían haber sido de una manera distinta de la que ha acontecido. 
Todo es perfecto, todo es armonía, todo es como debe ser. No hay nada que no sea perfecto en toda la existencia pues todo tiene una razón de ser, incluso lo que a nuestro juicio es incorrecto, injusto o malo, todo sirve, y es perfecto por algún motivo divino.   Cada persona que pasa por nuestra vida es única. Siempre deja un poco de sí y se lleva un poco de nosotros. Habrá los que se llevarán mucho, pero no habrá de los que no nos dejarán nada. Esta es la prueba evidente de que dos almas no se encuentran por casualidad."    Jorge Luis Borges. 
 

Dedico esta obra a la memoria de mis padres, a mi amada esposa, fiel compañera en la vida y en particular durante la redacción de la misma, a mi no menos amada hija con quién compartimos  extensas charlas sobre el tema que nos ocupa, a todos mis amigos que están en la búsqueda interior de la verdadera realidad: la Esencia,  y de una manera  muy especial, a ti, que por algún propósito escondido en la profundidad del universo, has llegado a leer estas líneas.