VIII

Aquí estoy feliz de graduarme pero......

- Lo siento,  enserio no quiero que me mires así Santiago.

- Así que no quieres tener nada conmigo - me dice en un tono muy  triste y enojado con los ojos apunto de lagrimar, yo trato de mantenerme fuerte.

- No nada, yo quiero que tú seas feliz con alguien que te amé mucho, que recibas felicidad aparte de amor, pero tú y yo tener algo, ahora no me conviene, porque al fin encontré quien soy -le digo capaz mintiéndome a mí misma. ¿Porque le rechazo? porque creo que soy un ángel, creer que me espera una dura lucha conmigo misma es difícil.

- Y ¿quién eres?, en serio me enoja todo esto ¿qué estás diciendo? me estás lastimando mucho aunque no tú no lo veas, yo de verdad quiero estar contigo además ponte a pensar en los lindo momentos que pasamos - me dice, tengo tantas ganas de llorar pero no lo hago me mantengo firme.

- Fueron hermosos momentos que serán guardados en mi corazón- le digo tratando de aguantarme mis lágrimas, de verdad estoy diciendo esto al chico que me gusta, creo que hubiera querido que sea el amor de mi vida.

- Está bien Isabella, yo también quiero que seas feliz, cumple tus sueños o mejor todo lo que quieras en esta vida no voy a forzarte a nada que quieras, es tu vida -grita y me hace saltar, de verdad me lo está diciendo.

Se acerca y me da un fuerte abrazo, le devuelvo el abrazo pensando como hubiera sido mi futuro con él, amándonos como novios, esposos o divorciados además las peleas que hubiéramos tenido, con hijos o sin hijos.

Nos dedicamos una última mirada ambos, se acerca para plantarme un tierno beso en los labios. Retrocede de mí y me dice. - Creo que siempre serás tú. –Yo creo que no. Ahora se va y le  miro de espaldas, se ve elegante con su leva de negro, yo me siento destrozada tengo  ganas de llorar pero no lo hago, regreso a ver al cielo está despejado con un radiante sol y sonrió aunque me duela en el corazón.

**

Me siento de nuevo en mi asiento asignado miro a todos mis compañeros de ambos lados y todos se ven elegantes, solo me gustaría no olvidaros -sonrió alegremente -al igual que ellos , cuando termina el programa nos paramos todos los alumnos de último año de secundaria  de todos los paralelos, lanzamos el birrete al cielo y  se siente bien, lento a la vez , que  cae en mi mano derecha lo sujeto muy fuerte después me lo coloco en la cabeza despacio y regreso a ver de frente a Dane que está muy lejos de mí, noto que me sonríe y yo le regreso la sonrisa arqueando al mismo tiempo mi ceja y desaparece.

Jade se acerca a mí y me dice -claro que nos vamos a seguir viendo ¿no es cierto?- yo le respondo -si hasta la vejez- sonríe y se va.

Miro a todos lados y ahí está mi madre como siempre con cara de amargada me acerco a ella que esta distraída y  me pregunta si ya nos vamos le digo -si vayámonos.

- Isabella -escucho que me llaman y es Jade- vamos todos a una cena de amigos - yo le digo gritando- claro.

- Ya escuchaste- le digo a mi madre de la mejor manera que puedo, para que no suene muy brusco-me voy a una cena.

- No vendrás muy tarde- me mira perpleja.

Me saco la toga de graduación y se la doy a mi madre lo bueno es que pagamos por esto  de color azul oscuro, nos la dejaron a todos los alumnos del último año como recuerdo.

Camino toda elegante como una chica de dieciocho años que está viviendo la vida paso a paso o eso ¡supongo! me siento radiante, bonita este día me voy con mis amigos y amigas a disfrutar de la cena.

**

En la cena,  estamos en un restaurante de pizza todos debimos poner $ 3,50 para pagar y poder comer una pizza grande, noto que hay muchos chicos y chicas que conocen a Jade y uno que otro que yo conozco, hasta está Santiago  miro que a cada momento me regresa su mirada, por dentro de mi estoy un poco triste y sé que fue doloroso así pero trato de no cruzar con la suya.

Jade me dice- ¿qué pasa con Santiago? ahora tienen algo, ¿ya son novios?

Yo le respondo. - No pasa nada y nunca fuimos novios solo creo que amigos con intenciones ridículas.

- ¡Que! .... ¿Por…que?

- Es difícil de explicarlo.

- Siento algo que no me has dicho Isabella.- Ahora cambio la cara de Jade y se nota toda seria.

- Tengo otros planes para mi vida.

- ¿Qué planes?- dice curiosa.

- No te lo puedo decir ahora, pero será otro día cuando estemos a solas ya- le digo para que este segura de mis palabras.

- Vale pero tienes que contármelo- advierte.

- Para la próxima si lo haré, te lo contare todo- y espero de verdad contarle no me gustaría mentirle.

Estoy sola en el baño viéndome en el espejo, me siento ansiosa y preocupada por lo que voy hacer ahora en mi vida, me asusto de repente porque la  puerta que se cierra fuertemente, es Santiago.

- ¿Qué haces aquí?, Santiago no puedes entrar al baño de mujeres lo notaste.

Se pone nervioso regresa a ver a todos lados, me mira cauteloso y con la mirada perdida me dice.