VII

Estoy en el colegio prestando mucha atención a la clase de física y al mismo tiempo escribiendo en trozos de papel las respuestas de la prueba de química que me toca después de esta hora; alguna vez hemos copiado de cualquier manera, nadie es santo, trato de que la maestra no se dé cuenta, por suerte me siento en el medio de la fila en la que estoy, regreso a ver a todos lados hasta miro a Santiago que está atendiendo a la clase y me pregunto si se acuerda lo que paso entre nosotros la anterior vez,  bueno si es que paso algo.

Después de concluir con mis clases salgo del salón y como es la hora del receso voy a buscar a Jade "mi mejor amiga", somos amigas desde primero de secundaria, está en diferente paralelo,  yo estoy en el A y ella en el C, fue un poco sorprendente como nos hicimos amigas, recuerdo que yo estaba haciendo fila para comprar mi refrigerio y lo peor estaba tan larga que quería rendirme, cuando ya me tocaba el turno alado estaba una chica alta  de estatura  un metro setenta, su color de piel es mulata,  para ese entonces no sabía cómo se llamaba. Estaba agarrando su libro en la mano izquierda y en su otra mano estaba teniendo su vaso de café cuando en una de esas se gira y tropieza con un chico haciéndola caer alado mío, más yo también caí sentada en el suelo y ella encima mío, cuando se levantó, me dijo ‘‘lo siento’’, tenía chorreada la falda por el café.  Le dije que no pasaba nada, de ahí una semana después ella se me acerco un lunes, yo estaba formada y me dijo salgamos en el receso y para nada me negué.

En el receso nos comunicamos de muchas cosas me pregunto cómo me llamaba, si estaba en el mismo grado y en que paralelo y muchas cosas más, desde ese día congeniamos bien que nos hicimos amigas .

Ahora con el paso de los días, meses, puedo decir que es mejor amiga.

**

Estoy nuevamente sola en casa, mirando caer la lluvia por la ventana y escuchando la hermosa música clásica de los ochenta. Oigo una vibración y  miro que es mi celular, la llamada es de Dane y ahora que rayos querrá, atiendo el teléfono.

-Que paso- le contesto.

-Sal.

Salgo de la casa con un paraguas de color azul eléctrico, digamos  me siento cómoda porque estoy abrigada para salir, camino hasta la puerta que da al conjunto, cuando salgo miro de lejos a Dane que está mojándose, pongo una mirada de seria y veo ambos lados de la carretera para cruzar.

Le tapo con el paraguas y él me regresa a ver, tenía la cabeza agachada.

- ¿Porque te mojas? - le pregunto, es un tonto por estar mojándose.

- No sabía que estaba lloviendo –dice sin culpa.

- ¿Entremos a mi casa? - le pregunto con una seña.

- No - dice, me quedo mirándolo y más preguntas.

- ¿Y qué necesitas?

- A ti mi compañera- en serio para que será.

Después de unos cuantos minutos caminamos por la vereda, por suerte dejo de llover pero sigo llevando el paraguas abierto, me preocupa que ya estén en la casa mi madre y mi padrastro además de mi hermanastra, tengo miedo de que me reten como siempre, miro a Dane, parece que camina con la mente distraída, paro de caminar y tomo su mano derecha antes de que siga dando pasos lentos, me regresa a ver perplejo y le acerco hacia mí, dejo caer el paraguas hacia el piso y lo abrazo por sus hombros, me toca pararme en puntillas por que él es más alto que yo. Él también me regresa el abrazo.

Cuando ya dejo de abrazarlo dejo caer mi mano hasta sus brazos, le observo toda seria además siento que tiene sus manos en mi cintura y él también me observa, es muy incómodo estar ambos en esta posición.

- ¿Que querías decirme? -pregunto si es que tiene algo para decirme también.

- Isabella tú y yo somos diferente al resto de personas, aquí en este momento déjame darte tu anillo plateado que te perteneció cuando te convertiste en ángel. – Lo que acabo de decir, resulta muy extraño ya que me provoca un vacío  desconocido.

Sigo observando a Dane que está sacando un anillo plateado del bolsillo de su vaqueros negros cuando lo saca lo pone en la palma de su mano derecha observo que no tiene nada alrededor ni cristales ni nada escrito pero de repente comienza a brillar me quedo sorprendida y feliz, ¿Mi anillo? el cual no recuerdo, me toma la mano derecha y coloca el anillo en mi dedo del medio donde siempre me gusta llevarlos. Derramo una lagrima porque siento que se parte el corazón y algunos recuerdos aparecen a mi pestañeo a cada rato  suelto la mano de Dane y comienzo a frotarme la cara mirando al cielo nublado, miro tan profundo al cielo que comienza a despejarse . ¡Ah despejarse! quien lo imaginaria, creen en eso, eso es  ridículo.

- No lo puedo creer despejaste el cielo, están regresando tus habilidades de ángel- me guiña un ojo.

Y como el paso de un cometa recuerdos aparecen en mi memoria son tan fuertes que pongo mis manos a los lados de mi cabeza, las caras de muchas personas sufriendo, riendo, enfermas, todo diferente, el océano, el cielo y yo, pero siento un vacío y un dolor en todo mi cuerpo, nuevamente regreso el dolor en la parte trasera de mi cabeza. Escucho a Dane lo que dice, le regreso a ver tristemente y le hablo.

- ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Que fue eso? ¿Lo viste?