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"El de alguien cambiado."
 

 El camino era muy largo, Theodore y yo estabamos platicando acerca de nuestras vacaciones, Blaise escuchaba atento y comía, y Draco solo leía, una que otra vez levanto la cabeza para mirarme o darme sonrisas. Tenia mucho sueño, así que me recosté en el hombro de Theodore. 
Me estaba quedando dormida, solo escuchaba la risa de los tres. Me dormí.
Faltaba poco para llegar a Hogwarts, Theodore me despertó. Cuando abrí los ojos ví a Draco riendo con Blaise, sus ojos se arrugaron por la carcajada.

- Ya cállate Zabini, ya me duele... el estómago. - Dijo Draco en una carcajada. Me miró y fue desvaneciendo su risa, hasta que se convirtió en una sonrisa, con un leve sonrojo.



Nos miramos unos segundos más, sonreí apretando los labios, hasta que Theodore nos interrumpió.

- ¡Tienes un gusano en tu equipaje! - Me dijo Theodore. Me levanté muy rápido, con un grito. Draco y Blaise también se levantaron riendo. Tropecé callendo en el pecho de Draco, me levanté rápido y me puse atrás de Blaise.

Draco tomó mi equipaje y quitó el gusano, grité, Theodore y Blaise seguían riéndose de mí. Lo mató, fue hacia mí.

- Ya está muerto, no te preocupes más.- Dijo Draco y soltó buena pequeña risa.

- Gracias, me dan mucho miedo. - Dije con la voz temblorosa, le dí una sonrisa.

- Está bien Chris.

Me senté nuevamente, Theodore me seguía haciendo burla, Blaise reía y Draco seguia leyendo.

- Ya casi llegamos. Me iré a cambiar. - Dije levantándome de mi lugar.

- No te valla a salir otro gusano Tina, JAJAJAJAJJAJA. - Dijo Blaise. Lo miré mal, pero no le importó.

-Yo también me iré a cambiar. - Escuché la voz de Draco, voltee a verlo, él no me miró.

- Entonces vamos todos. - Theodore me tomo del brazo y caminó conmigo así.
Terminé de cambiarme y salí, no había salido nadie, ví a Adrian Pucey a lo lejos, me volteó a ver y me sonrió, le correspondí la sonrisa. Su familia se lleva con la mía, así que nos veíamos seguido.

- Hola. - Fue hacia mí.

- Hola.

- ¿Estás sola?

- No, estoy esperando a Theo.

- Ya veo. ¿Has visto a Malfoy?

- Oh... eh... sí... Humm... Se estaba cambiando.- Terminé de decir eso y salió del vestidor, su olor era más fuerte, era embriagante.

- ¿Que haces aquí? - Dijo Draco y me miró.

- Vine a buscarte.

- No puedo ahora, después.

- Eres un bastardo Malfoy. - Lo dijo en un tono sarcástico. - Adiós Christine. - Me miró y le sonreí.

- ¿Te gusta?- Me preguntó Draco.

- No, ya no, eso era antes. ¿Por qué?

- ¿Ya... no? Humm, no... yo solo... te preguntaba. - Alzó sus manos y rasco su cabeza, se veía confundido.

- JAJAJA, vale, vale.

- Te la pasaste bien en vacaciones ¿No?

- Sí, algo. ¿Tú? ¿Te la pásate... amm... bien? - Me puse nerviosa, me miraba, lo mire a los ojos, y teníamos las miradas fijas el uno en el otro. Sus ojos eran profundos. Podía ver cada tono de azul y gris en sus ojos, tal vez podía contar sus pestañas.

- Sí... Bien... - Dijo casi en un susurro. Seguíamos mirándonos. Mi respiración se estaba acelerando, y podía escuchar la suya, también empezaba a acelerarse. Inconscientemente me acerqué a él, Draco me miró los labios, yo mire los suyos, rosados, hidratados, y entre abiertos. Me perdí en su aroma.

- ¡¿Christine?! ¡¿Draco?! - Los gritos de Blaise hicieron que volviéramos a nuestra realidad. - ¿Que estaban haciendo? - Dijo con un tono pícaro mientras se acercaba a nosotros.
 

- No te interesa Zabini. - Dijo Draco, muestras pasaba su mano por si cabello.
 

Estaba temblando, pasé mis manos por mi túnica, no sabía que hacer. No podía creer lo que acababa de pasar hace unos segundos.
 

- Christine, ¿Que tienes? Estás temblando y bien pálida. - Dijo Theodore, Draco lo miró y luego me miró a mí.

- Oh... sí... y-yo... no, no tengo... nada... Estoy bien. - Dije con un tono nervioso, Draco me seguía mirando. Theodore hizo una cara de confusión.

- Vámonos ya, ya cállate Nott, dejala. - Draco lo empujó, me miró y sonrió de lado. Seguimos caminando.

- Si no hubiera llegado yo, ya estuvieran en el vestidor, JAJAJAJJAJAJAJA. - Dijo Blaise.

- Cállate Zabini. - Dije codeandolo. Él y yo íbamos adelante y Draco y Theo iban atrás.