CAPITULO 6 (6-10)

Fue la noche después de nuestro regreso al Castillo de Kasugayama. Sasuke me invitó a participar en un festín para honrar a las fuerzas Uesugi-Takeda.

(¡Hay mucha gente aquí!)

Vi a los vasallos de Shingen bebiendo y riendo junto con los de Kenshin. Sasuke me condujo a una bandeja desocupada.

Sasuke- Me alegro de que hayas venido, MC. Aquí hay un poco de vida griega, y no me refiero a la Edad de Oro de Atenas. Tristemente.

MC- No, está bien. Gracias de nuevo por invitarme.

Sasuke se sentó al lado del mío. Se sirvió una gran copa de sake.

(Ahora que estamos solos, y el ruido de la fiesta lo permite, finalmente puedo hacerle a Sasuke algunas de las preguntas que tenía.)

Se me había ocurrido una nueva, mientras miraba a la bulliciosa multitud.

MC- Así que, Sasuke, pensé que después de las batallas en Kasugayama, los dos bandos se guardarían rencor el uno al otro. Pero todo el mundo parece llevarse muy bien.

Sasuke- Me he dado cuenta y creo que la estrecha amistad entre Shingen y Kenshin es la causa.

MC- Um, sobre su amistad. Kenshin intentó matar a Shingen ayer.

Sasuke- Eso es normal. ¿Has oído hablar de los estilos de comunicación? El estilo de Kenshin es asesino-agresivo.

MC- Sasuke, estoy muy asustada ahora.

(Pero ahí estaban los dos, bebiendo juntos como viejos amigos.)

Se sentaron a unos cuantos asientos de distancia, mirando hacia el frente de la habitación, inclinando sus copas hacia atrás y sonriendo.

Sasuke- Fue Kenshin quien invitó a Shingen a quedarse aquí cuando supo que estaba vivo. Así es como Kenshin se preocupa por él.

MC- Te tiene que agradar mucho una persona para compartir una casa con ellos.

Sasuke- Ciertamente. Por cierto, ¿ves esa gran pancarta colgando sobre el pasillo?

Sasuke indicó el signo blanco frente a nosotros. De derecha a izquierda, tenía los caracteres de viento, bosque, fuego y montaña.

MC- Sí. Eso me resulta familiar. Espera. Rápido como el viento. Tranquilo como el bosque.....

Sasuke- ...Pero un fuego en su interior - Ejem. Los caracteres, leídos como furinkazan, provienen de las palabras de Sun Tzu. Esas palabras también forman el estandarte de batalla de los Takeda, y fue idea de Kenshin colgarlas aquí en Kasugayama. Lo vi como una forma de Kenshin de tenderle una mano a los Takeda, que han perdido su hogar, y como un símbolo de amistad.

MC- Mostrando el lema de tu rival. Es un gesto muy significativo.

(Son algo más que rivales. Algo más que amigos, también.)

Sasuke- El carisma abrumador de Kenshin le ha ganado muchos devotos seguidores, pero pocos colegas. Por eso todos en Kasugayama respetan a Shingen, por la fuerte impresión que Shingen dejó en su lord.

Kenshin parecía francamente inalcanzable a veces, pero Shingen parecía perfectamente natural riéndose a su lado. Los vasallos de ambos venían con frecuencia a saludarles, a compartir sus historias y a derramar sake para celebrar.

(Su alianza debe haber sido grande para la moral de ambos bandos.)

Fue entonces cuando Kenshin nos miró a los dos... bueno, a Sasuke... con una mirada de disgusto.

Kenshin- Sasuke, ¿de qué estás hablando en secreto?

Shingen- Está entreteniendo a nuestra princesa. Pero una diosa debe ser adorada por todos. MC, ven, únete a nosotros.

MC- Espera, ¿quieres que me una a ti también? Pensé que llamaban a Sasuke...

Shingen me hizo una seña atractiva y le advertí a mis pies que no se movieran sin mi permiso.

Yukimura- ¡Oye, Sasuke, ven aquí con nosotros!

Yukimura, en un grupo con los otros vasallos Takeda, le gritó a Sasuke.

Sasuke- ¿Estarás bien si nos separamos por el momento?

MC- Claro que sí. Ve a pasar el rato con Yukimura. Puedo arreglármelas sola.

Sasuke- Muy bien. Intentaré encontrar tiempo para responder más preguntas más tarde.

(A este paso, no cuento con escuchar muchas respuestas hasta que se acabe nuestro tiempo.)

Sonreí a Sasuke - una vez que estuve segura de que mi expresión estaba oculta a la vista de Shingen - los dos nos levantamos.

(¿Beber con Kenshin y Shingen? No sé quién es más peligroso. Yo digo eso, pero no creo que Shingen sea tan peligroso. Sasuke tenía razón sobre él.)

Lo más peligroso era lo atraída que me sentía por él. Más allá de mi capacidad de explicación.

MC- Gracias, Sasuke. Disfruta.

Cuando Sasuke fue a unirse a Yukimura, me mudé a donde estaban Shingen y Kenshin.

Shingen- Me alegra que pudieras unirte a nosotros, MC.

Shingen acarició el lugar junto a él, indicando que debía sentarme.

Kenshin- ¿Quién dijo que podía unirse a nosotros?

(Kenshin no parece muy apaciguado por las grandes cantidades de sake que ha estado bebiendo. Tampoco parece muy borracho.)

Shingen- ¿Cómo es posible que no la quieras aquí? Beber con una diosa hace que el vino sea mejor. Es como beber con los inmortales.

MC- ¿Quizás debería tomar té en su lugar?

Me senté junto a Shingen.

(Y, ¿qué se supone que debo hacer exactamente? ¿Beber y ser adorada?)

Shingen- ¿Tienes hambre? Todo lo que tengo es tuyo para comer. Adelante.

MC- Gracias por la oferta.

Miré la bandeja frente a Shingen esperando ver un conjunto no muy diferente a lo que Sasuke y yo teníamos...

MC- ¡Todos estos son dulces!