Ashley
Hoy es nuestra boda, estoy super nerviosa. No he visto a John en dos días, según mi mamá, no está permitido que nos veamos.
Estamos en la finca donde será la ceremonia, en una habitación que le prestan a la novia para que se prepare y ya hay una persona peinándome y una encarga del maquillaje. Mi mamá y mi tía empezaron a arreglarse desde antes. Para estar listas para ayudarme a colocarme el vestido.
Terminan de arreglarme y es hora de ponerme el vestido. Mi mamá me ayuda y cuando estoy lista me veo al espejo y trato de no derramar lágrimas para no dañar mi maquillaje. Le digo a mi mamá cuanto la amo y lo agradecida que estoy con ella por haberme sacado adelante como una mujer viuda y por amarme tanto como lo hace.
Mi mamá me dice cuanto me ama y que siempre estará allí para mí, sin importar la distancia y que está muy orgullosa de m. Después nos preparamos para salir. Ya que mi padre ya no está, mi mamá será la que me entregue en la boda. Así que salimos de la habitación y escuchamos que la marcha nupcial da inicio. Jenny ya esta parada donde inicia la alfombra para ingresar primero como mi dama.
Ahora es nuestro turno y estamos al principio de la alfombra y veo al final del pasillo y allí esta, con un esmoquin negro y camisa blanca. Y se ve como un supermodelo, tan guapo como siempre y siento que mi corazón se llena de emoción. Nuestras miradas se cruzan y empezamos a caminar hacia el altar.
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John
Estoy parado en el altar y veo que llega Jenny y recorre la alfombra hasta colocarse del lado de la novia. Después vuelvo a ver al principio de la alfombra y la veo. Ash está parada con su vestido blanco y se ve perfecta y no puedo creer lo afortunado que soy de estar uniendo mi vida a la de una mujer como Ashley.
La veo empezar a caminar y mis ojos se llenan de lagrimas que contengo y me siento el hombre más feliz del mundo.
Llega al altar y Leti me la entrega, me da la mano de su hija, la cual tomo con cuidado y la ayudo a colocarse a la par mía. No puedo dejar de verla y ella hace lo mismo conmigo. Si me hubieran dicho hace un año que hoy me iba a estar casando con mi mejor amiga, les hubiera dicho que están locos. Y el loco de amor soy yo en este momento.
La ceremonia transcurre como debe de ser y al fin llega el momento que hemos estado esperando y escuchamos las palabras “los declaro marido y mujer”, “pude besar a la novia”. Me volteo hacia Ash, quien ahora es mi esposa, por lo que mi rostro no me alcanza para sonreír y puedo ver que Ash está igual que yo. Me acerco a ella y la beso. Le doy un beso tierno y lleno de amor.
Toda la boda transcurre de maravilla, nos la hemos gozado al cien por ciento, pero llega el momento de irnos por lo que Ash tira el ramo a las señoritas solteras y para sorpresa de todos es Jazmín, la novia de Carlos, quién atrapa el ramo. Por lo que con Luis empezamos a molestar a Carlos porque por lo visto será el siguiente.
Ash se despide de su madre y de su tía Ana y salimos del lugar para dirigirnos a un hotel donde he reservado la suite nupcial, para pasar nuestra noche de bodas, ya que hasta mañana por la tarde sale nuestro vuelo a nuestra luna de miel.
Llegamos y nos dirigimos a nuestra habitación, en donde ya se encuentra nuestro equipaje porque lo mande a dejar antes.
Antes de entrar, en la puerta, me detengo y tomo a Ash y la cargo en modo princesa para ingresarla a la habitación, a lo que ella suelta una carcajada.
Entramos a la habitación, la pongo de pie con cuidado. Me acerco a ella, tomo su rostro entre mis manos y le expreso mis sentimientos.
- Ash, estás sumamente hermosa y antes que nada quiero decirte que te amo. Te amo con todo mi corazón. –
- Yo también te amo John. Eres mi todo. –
Ya con nuestros corazones abiertos, nos besamos y empezamos a demostrar lo mucho que nos amamos.
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Ashley
Estamos en la habitación del hotel y después de abrir nuestros corazones, nos besamos y a pesar de los nervios me dejo llevar, me dejo llevar por mis sentimientos y me dejo llevar por John, confío plenamente en él y estoy feliz de al fin poder llegar a ser suya.
Poco a poco el beso se empieza a volver más intenso, más demandante, con más pasión. Se separa de mis labios a lo que me sale un pequeño quejido, porque sentí que me quitó algo que necesitaba, pero se trasladó a besar mi cuello y comenzó a bajar el cierre de mi vestido. Ágilmente me despojó del vestido y quedé en mi juego de lencería, que compré especialmente para esta noche. John dio un paso hacia atrás y posó sus ojos en mí y pude ver deseo en ellos.
Se quitó el saco, lo lanzó a un lado, volvió a acercarse a mí para volver a besarme. Me besaba con intensidad, me abrazó por la cintura y me pegó más a él, por lo que pude sentir su erección. Siento sus manos recorrer mi cuerpo y las sensaciones en mí se desatan por completo. De repente siento que me libera mis pechos del juego de lencería y los toma en sus manos, gemidos comienzan a salir de mi boca y no puedo evitarlo. Me toma de las caderas y me levanta, enrollo mis piernas en él y sigo besándolo, me lleva a la cama y me recuesta cobre el colchón colocándose encima de mi sin dejar caer su peso sobre mí.
John besa y toca cada parte de mi cuerpo y hasta mi feminidad donde me estimula y luego inserta un dedo, no logro soportarlo y le empiezo a pedir más.