Siempre Veremos Las Estrellas

Capítulo Once

Un extraterrestre y una terrícola 

Daniela

Esa misma noche le mande un mensaje

Lucas

Hey, ¿todo bien?

Existe la posibilidad de que no responda, pero el que no arriesga no gana, así que por una vez en la vida dejare mi rivalidad por intentar llevarme con él, aunque resulte un fracaso lo intentare.

Después de unos minutos respondió y como niña enamorada agarre corriendo el celular

Lucas

Amm... hola, si.

No tienes que fingir, se lo que te paso.

Mira, no se porque lo sabes pero

 no actúes conmigo.

 

Mira, se que ni nos llevamos pero 

vi mal a tu mamá y me preocupe.

Si, bueno, yo estoy perfecto y no necesito

que andes preguntando por mi.

Creo que ni por una sola vez puedes

Dejar de ser como eres, solo me

Preocupe, pero por lo visto me odias

Demasiado.

Yo no te odio y si solo quieres molestar

mejor déjame en paz.

No quiero molestar, solo me preocupe

A pesar de no llevarnos tan bien

Quería saber como estabas.

Bien, te dije que estoy bien, así  que

adiós.

Vale, adiós. >:V

Creo que nunca se arreglara esto, simplemente quiero dejarlo de lado para poder saber si esta bien y le vale un pepinillo, no era forma para que se portara así. Ya quisiera el que me ande burlando de el, no soy así y mucho menos una chismosa que le cuenta todo a la primera persona que ve, mi padre siempre me dijo que un secreto se lleva a la tumba y así como se debe de tratar todo.

Si, quizás se empezó con el pie izquierdo pero quiero llevarme con el, seria un buen aliado pues el y yo somos los mejores de la clase y llevarme con el me ayudaría demasiado y también a el, aunque realmente no lo busco por interés sino quiero que tenga alguien con quien llevarse, se ve que es alguien muy solitario y eso no es bueno para nadie.

-Pero mira quien lo dice -me reclama mi conciencia.

Tal vez si mañana lo veo en la escuela pueda charlar con él.

----

Cuando llego al salón de matemáticas me siento al lado de Coral

-¿Qué tal estuvo ayer? -pregunta refiriéndose a lucas.

-No pudo ir, tuvo que salir con su mamá, así que no ensayamos.

-Vaya... ¿Qué le habrá pasado?

-No lo se y no es de nuestra incumbencia, así que hay que dejar ese tema.

-Valeeee, pero te siento rara, no lo se, no es normal el como estas.

-Es que no pude dormir y cuando no duermo me siento enojada.

-Claro como tu digas, mejor pásame la tarea de geografía que no la hice.

-Si la quieres serán cien pesos.

-Oye, soy tu mejor amiga -dice torciendo la boca de lado.

-¿Y?, la quieres o ¿no?

-Mejor no -dice y se voltea con los brazos cruzados.

-Ash, ya ten pero me invitas un chocolate.

-Vale, gracias, te amo.

-Ya lo se.

Empezó a copiar la tarea y no tarda mucho el maestro en que llegara, saludando como siempre y detrás de el llega Lucas, a quien estaba esperando. Se veía algo pálido y venía vestido con un pantalón de mezclilla y una sudadera negra, con algo tan simple lucía guapo.

La clase estuvo algo aburrida porque solo estuvo reforzando unos temas que la gran mayoría no había entendido, después de ello me dirigí a la siguiente clase y así hasta que llego la hora del receso, el momento perfecto para poder ir a habar con Lucas.

-Oye, tengo que hacer unas cosas, ¿te puedo dejar con león? es que es algo importante.

-Claro, no hay problema, de echo eso te iba a decir hace rato, que te iba a dejar sola.

-Ah, con que me ibas a dejar sola -le reprocho.

-Si, es que un chico me dijo que pasáramos el receso platicando.

-Hasta que se te hace, pero esta bien, ve a buscarlo y yo arreglo el asunto.

-Sale vale, te contare todo en el salón.

-Si -sin mas le doy un beso en la mejilla y me voy a buscar a Lucas, normalmente lo veo ir a la  biblioteca, así que me dirijo hacia allí.

Cuando llego lo veo platicando con una chica y no tardan mucho en despedirse, así que me acerco.

-Hey, ¿Qué tal todo? -dije cuando estoy a su lado.

-Ahora que quieres, si vas a andar molestando mejor vete.

-No es nada de eso, quiero platicar contigo.

-¿Eso a que se debe?

-Quiero arreglar las cosas contigo.

-ok

Nos dirigimos al techo de la escuela porque en la biblioteca seria imposible poder charlar.

Nos paramos en la bardita a contemplar todo el lugar.

-Vale, ¿Qué quieres?

-Se que no empezamos por el pie derecho y quiero pedirte una disculpa sincera.

-La acepto, ya vete.

-No esta vez no me iré, quiero que me digas que fue lo que te paso.

-Pues lo que ya te dijo Ian, porque es la unica forma de que te enteraras de que estaba mal.  

-Si, pero no te enojes con él, yo le pregunte y le prometí no decirle a nadie y es que me preocupe.

-Pues fue como te lo dijo y eso fue lo que paso.

-Pero, ¿estas bien?, dime la verdad.

-Tal vez si, tal vez no, eso que mas da.

-Pues debes de saber por cualquier cosa.

-¿Y de que sirve saber?, para tener los días contados o ¿qué?

-No solo que es por tu bien.

-Claro.  Mira si estas aquí porque te quieres burlar hazlo, me da lo mismo.

-Ya te dije que no.

-Claro.

-Si, yo no soy de las personas que se burla de los demás  y muchos menos si es de temas de salud, porque se que se puede sentir mal y puede llegar a otros extremos y prefiero no hacerlo, así fue como me educo mi padre. 

-Vale, tomo la disculpa y espero que sea verdad lo que dices porque sino es así te odiare con toda mi alma.



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En el texto hay: destino, romance, rivalidad

Editado: 18.02.2022

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