Silencio Cariño

—5•

— NARRA JENNY — 

El tipo se acercó a mi. 

— me gustas Jenny — 

Esa voz. 

— ¿Sergio? — 

Sentí sus labios sellarce con los míos. 

— no, sueltame — 

Moví mi cabeza de un lado para el otro. 

— tienes que amarme solo a mi — 

Quitó la venda de mis ojos. 

— Sergio, así no se hacen las cosas, es mejor si empezamos como amigos y no como acosador y acosada — 

— perdón, pero yo no sé cómo se hacen las cosas — 

Lo vi a los ojos. 

— tienes que ser amable, y no un degenerado — 

Sonrió levemente.

— es que enserio me gustas, desde la primaria —

—• FLASH BACK •— 

— ¡Quiero mi paleta! — 

No sabía que había pasado, solo cerré mis ojos unos segundos, y me deje llevar por el sentimiento. 

— ¿Mejor? — 

— si — 

—••— 

— ¿Tu eres Sergio el de la primaria? —

Pregunté con un severo sonrojo. 

— si — 

Una sonrisa en ambos se dibujo. 

— perdón si te hice sentir incómoda, o acosada, pero me gustas desde esos tiempos, y al volver a verte no supe que hacer — 

No puede ser. 

— yo... No se que decirte, esto es tan pronto que me confunde — 

Sonreí. 

— y si mejor salimos un día — 

— no se, es que el chico al que querías desaparecer es ahora mi novio — 

Soltó un suspiro. 

— no te preocupes, y perdón de nuevo, te voy a quitar la venda — 

Me quitó la venda de las manos. 

— bueno Sergio me tengo que ir — 

Asintió. 

— hasta luego — 

Se despidió. 

Salí de ese callejón. 

[<>] 

—• UNA SEMANA DESPUÉS •— 

Que loco todo esto. 

Quién diría que me seguirían y resultará ser Sergio. 

— señorita Jenny — 

Imagínate, todo paso tan rápido. 

— hey señorita — 

Y sobre todo me beso, eso fue no se cómo. 

— ¿Esta bien? — 

Pero tiene ratos que no lo veo, ya pasó una semana y no se nada de el. 

— ¡Señorita Jenny! — 

Un reglaso en la mesa me despertó. 

— presente — 

Respondí con miedo. 

[<>] 

Salimos de clases y Salomón me invitó a cenar en un restaurante. 

— pide lo que gustes — 

Asentí. 

Después de ordenar, mi mirada se percató de un hombre, estaba cenando con un mujer. 

Rápido supe quien era. 

Sergio. 

Me vio y sonrió, le devolví la sonrisa. 

— quién es — 

También vio para dónde el hombre. 

— un amigo de la primaria — 

Respondí para después verlo. 

— ah ya — 

[<>] 

Las chicas me invitaron a una fiesta. 

Es raro que yo vaya a esos lugares. 

Pero me puse un vestido, no es pegado y tampoco tan suelto, es color negro, con un escote y una abertura en la pierna. 

Llegué a la fiesta y ya había gente hasta el tope. 

Me senté en un sofá a esperar a Salomón. 

[<>] 

Estaba viendo mi celular. 

— amiga... Si te decimos algo, promete no hacer un escándalo y tomar conciencia, ¿Vale? — 

Asentí. 

— vale — 

Me tomaron de la mano y fuimos entre la gente hasta una habitación. 

Mis ojos no podían creer lo que veía. 

— ¿Salomón? — 

El muy estúpido estaba besando a una mujer, hasta el punto en que casi se la devoraba. 

— Jenny — 

Me acerque a la mujer que estaba besando. 

— no voy a decir nada, solo una cosa, disfruta a este estúpido, y disfrútalo bien, porque cuando te engañe ya no va a ver vuelta atrás — 

Le sonreí levemente. 

— y tú imbecil, terminamos — 

Me estaba aguantando el nudo en la garganta. 

Y las cosas que le tenía que decir. 

— Jenny no — 

Le di la cadenita que me había dado. 

— Salomón, te dije que lo nuestro no funcionaría, terminamos — 

Salí de la habitación.




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