Carta 16: Infierno

Lo que empecé a vivir luego de que la realidad me golpeara en las narices. Era solo otro día para ti, mirando tu mundo continuar mientras que el mío estaba llegando a su fin era perturbarte. ¿Sabes? Pensé que teníamos confianza, nunca espere de ti más allá que una bonita amistad y la complicidad que se genera entre 2 personas cuando se la pasan juntos la mayoría del tiempo, pero el que me hayas mentido tan descaradamente dolió.

¿Que mujer sigue amando a un hombre que la lastima solo con su presencia? ¿Un hombre que sigue impartiendo tanta agonía a su corazón? He llorado por ti durante mucho tiempo y en cada caso no fueron solo gotas, recuerdo jadear por aire, golpear con mi puño la pared y luego mi pecho tratando de arrancarme el corazón para que el dolor simplemente se detuviera, podría haberme clavado un cuchillo y me habría dolido menos.

Te costaba decirme "Si, tengo novia y nos llevamos muy bien", ¿porque siempre la negabas? Yo no iba a arruinar tu relación, mucho menos acosarles, eso sería algo muy patético e indignante y no soy ese tipo de mujer si eso es lo que alguna vez pensaste, mis amigos decían que era porque no la considerabas novia que solo era una amiga con beneficios pues tu comportamiento con ella era un tanto cruel en cuanto me veías cerca. El caso es que me dolió enterarme por otras personas y no por tu propia boca de tu relación, esas pocas veces que te pregunte si tenías novia o hacía bromas con respecto a eso siempre la negabas y lo decías de una forma tan segura que yo lo creía y era un alivio momentáneo a mis sentimientos que aunque los tenía bien guardados para mí misma, era inevitable no sentirlos.

Golpe bajo que por pura casualidad, la misma mujer que trataste mal y la ignoraste cuando les vi tomados de la mano aquella vez, sea la misma que ahora se dice ser tu novia. No entiendo y me da lástima ver cómo ella permita ese trato hacia su persona. Creo que por muy enamorado que se sienta alguien, también tiene que tener sus límites y amor propio, pero yo no soy nadie para meterme en su vida y si ella es feliz así no es mi problema a pesar de que sea la hermana de una compañera cercana. El mundo es muy pequeño y tu cara de sorpresa al ver que ella me conocía fue muy graciosa, aunque en ese momento quería partir tu cara de niño bonito a causa de mi rabia y celos mezclados, no te creas que mi rabia era solo por ella y su actuación en pleno sitio público hacia mí, sino también iba dirigido a tu persona por no hacer nada más que ignorar a quien tenias a tu lado, hacerte el loco y tratar de decirme algo con tu mirada y fingir que no ocurría nada.

Aún hoy, sigo sin saber qué querías decirme.

Déjame confesar que en ese momento quería golpearlos a los 2, pero más ganas tenía de golpearla a ella. Se supone que es una adulta ¿no? Así que su actuación hipócrita hacia mí era enferma, no tenía que echarme en cara que tú te la follabas, porque déjame decirte que esa mujer hizo el ridículo frente a otros allí y tú le permitiste eso, el que se haya puesto a restregarse en tu cuerpo como gata en celo mientras me decía tonterías superficiales era algo muy incómodo y no solo para mí sino para mí acompañante, al ver que no tuvo la reacción esperada de mi parte en su intento de marcar territorio quiso tomar tu mano y le salió peor, aunque para ella fue inesperado el que quitaras tu mano de un solo golpe y la metieras en el bolsillo y trataras de hablarme a mí intentando captar mi atención, eso no me sorprendió y no voy a negar que fue algo gracioso su cara y sus miradas hacia nosotros.

Dime algo, a pesar de esa tensión en el aire en ese momento, ¿Porque actuaste tan molesto esa vez cuando viste que mi amigo me abrazo por la cintura? Eso lo agradezco, porque aunque no demostré ante ustedes nada... me dolió. Y su apoyo fue como un salvavidas para evitar soltar lágrimas traicioneras por la imagen tan patética que estábamos dando, él sabía lo que sentía por ti y su cariño y estabilidad en ese momento fue un alivio para la herida abierta. ¿Porque fuiste tan idiota? Se suponía que tu novia estaba a tu lado, ¿porque intentabas molestarme más? ¿Por que razón buscabas tantas tonterías para hablarme en ese momento y tener mi atención?

Ese día fue el peor, inició mi infierno, conocí lo que era sentir el corazón roto e inició un tiempo de mentiras y actuación, fingir sonrisas y saber que por cada minuto que actuaba como si nada pasara me hundía más en ese dolor sordo dentro de mí.

Seguía con mi vida pero no estaba bien, mucho menos era feliz, no soportaba las cosas y no me podía controlar, posiblemente lastime a más de uno sin tener intenciones de hacerlo y eso era lo peor, sabía que ellos no tenían culpa de nada pero tampoco me podía controlar y eso me molestaba aún más, no pensé que este infierno fuera tan difícil de manejar y tu rubio estúpido lo hacías cada vez peor.

Verte me ponía feliz y a la vez me hacía mal, era como morir un poco y de forma lenta y dolorosa, un peso horrible sobre mis hombros debo admitir, me hacías dudar de mi decisión, ¿Había renunciado por completo a ti? ¿Esperaba un milagro?

La perdida era algo que solo había experimentado una vez en mi vida, pero esto parecía más real, perderte sin tenerte no era una historia que yo recordaba de mi infancia, esto estaba en mi cara debilitándome como una enfermedad, robándose mis sentidos y físicamente muy doloroso.

Te digo que en esos días sentía que no podía superarte, era cada vez peor, tenía sueños contigo muy clichés y eso me amargaba la vida...vaya que supiste como joderme la existencia en esos días de infierno.