Carta 21: Calma

Sí, me dolió… pero la gente tiene que romperse al menos una vez en la vida, es ley. Hay que ver todas las piezas de uno mismo desperdigadas por el suelo para luego descubrir la forma de volverlas a unir, así que solo tome mis piezas, me di la vuelta y entre de nuevo a mi habitación y luego de tanto sufrir estoy en una calma tentativa, no estoy segura por cuánto tiempo dure, desperté y empecé con la rutina, no tengo emoción alguna tan solo sigo mi rutina de estudio y trabajo y cumplo con las responsabilidades que tengo asignadas.

La sensación de estar vacía sigue allí junto con el dolor pero ambas cosas están dormidas, estoy en una nada pero con consciencia de todo a mi alrededor. No tengo palabras para describir como me siento solo que me encuentro en la nada, he perdido el brillo de mis ojos y tengo una sonrisa falsa lista para usarla cuando sea necesario.

La derrota es amarga y mi vida ha perdido color, estoy en piloto automático y me asalta la pregunta ¿volveré a ser feliz como antes? Lo bueno al parecer dura poco y es algo que muchas veces se aprende por la mala, no voy a mentirte, si he pensado en ti aún sabiendo que no gano nada solo dolor, en ciertas ocasiones cuando el dolor es muy intenso tu pensamiento me reconforta, lo sé suena demasiado irónico y ridículo pero yo tampoco me entiendo, necesito un buen golpe a ver si se arregla el problema.

Me han preguntado si estoy bien, al principio no supe qué decir pero mi respuesta fue clara "estoy bien" y no fue mentira, en comparación a las otras veces ya me encuentro mejor pero eso no indica que este feliz, al menos es un paso de volver a mi antiguo ser.

Puedo decir que no estoy bien ni mal es como un término medio, estoy agotada emocionalmente pero los días están más llevaderos, puedo verte pero mis emociones están apagadas, ya no estoy llorando por las noches y el vacío no se ha hecho tan presente.

He visto y los demás me lo confirman que ambos estamos pasándolo mal, no entiendo que te pasa a ti, mencione que quizás tenías problemas personales o peleaste con tu novia y los que son cercanos a ti me dicen que ella no tiene nada que ver, que yo soy la que tiene la culpa y no sé porque lo dicen, si me aleje de ti es por mi bien por eso no veo el motivo para que eso te afecte.

Uno de tus alumnos me dijo "No sé que les pase a ustedes 2 pero terminen con eso ya, tú estás triste y no eres como antes y el está muy amargado y distante, te extraño y lo extraño a él, extraño que se la pasen juntos y sus tontas interrupciones cuando estás aquí, sus bromas y comportamiento de niño"-. Déjame decirte que me quede en una pieza, fue allí que no me preocupe por mí sino por ti, a fin de cuentas eras importante y quizá necesitabas de mi aunque eso significará que luego pasaría un infierno por ti, pero confiaba en esta calma que sentía y debía ver si podía ayudarte de alguna forma y al parecer lo hice, cambiaste por mi y volviste a la normalidad según tus alumnos... dime, ¿Soy yo tan importante como para afectar tanto tu ánimo?

Adiós a mi orgullo y dignidad, al parecer si me necesitabas y no me gustaba verte así, volví a romper la promesa que me había hecho y volvía a poner tu felicidad por encima de la mía. Mi mundo se caía a pedazos pero aun así sonreía para ti, por lo que decidí no dejarte saber nunca como sentía, tampoco podría darle nombre a tus propios sentimientos porque eso arruinaría nuestra amistad recién fortalecida.

Cuando te conocí pensé que serías uno de esos amores pasajeros, luego descubrí que eras exactamente el tipo de persona que quería junto a mí y por alguna razón que no puedo entender la vida se empeña en colocarme a tu lado pero no de la forma en que yo quisiera.

En esta calma tentativa es cuando digo que no vale la pena soportar un sentimiento que no es mutuo... esta situación es irónica porque nunca había elegido algo con tanta seguridad, pero ¿a ti? Joder, de ti estaba tan segura y mira cómo resulto, pero aunque parezca mentira después de experimentar el dolor nadie vuelve a ser quien era antes, te vuelves más fuerte, valiente… más resistente.

Intente que vieras la verdad pero tú no lo quisiste aceptar y solo notaste lo que deseabas ver, ni siquiera el amor pudo cambiar el camino que ambos elegimos.