Capítulo 21

Dove

Los nervios y la adrenalina de nuevo se iban apoderando de mi ser, estaba apunto de abrirle a Derek para aceptar mi destino, pero Vlad me lo impidió tomándome del brazo

-No puedes abrir sin contestar lo que te tengo que preguntar - asentí para que hiciera su pregunta, se acercó a mi oído y... - Cuando abriste su despacho e interrumpiste su acto de placer, ¿Le viste la polla? - rodé los ojos

-Idiota, se te nota de necesitas tú hacer acto de placer y no, no se lo vi porque estaba oculto enterado en algo - elevo sus cejas - bueno enterrado en alguien, además si lo quieres ver obsérvalo, a lo mejor tienes suerte y se le marca en el pantalón

-Tienes razón pequeña , lo observaré para saber si conviene - sonrío - pero eso si, lo observaré disimuladamente para que siga creyendo que soy tu novio, aunque yo creo que ya no nos cree - susurró

-¿Por qué lo dices?

-Porque cuando él estaba cerca de ti, con efectos de la droga en tu ser - lo dijo en tono acusatorio - lo besaste y él té correspondió, me miro después y vio que no me dio celos

-Pues es que es obvio, tienes que actuar como si quisieras matar a otro hombre que se me acerqué - Dije con obviedad

-Lo se pequeña, pero si te soy sincero estaba más concentrado en él que en ti - Me ofendí y le proporcioné un golpe certero en su cabezota

-Dove, ábreme - Volvió a repetir Derek

Di brinquitos porque no quería abrir, pero al final lo tenía que hacer

-¿Si? - Estaba con el ceño fruncido, mirándonos fijamente intercalando su mirada de Vlad a mí

-¿Podemos hablar? - dijo con un tono bastante frío

-Claro - dije

-En mi despacho, ahora- Me miró y de nuevo lo hizo con Vlad

El enojo era evidente en él, pero mierda, yo que iba a saber que estaba follando, siento haberle cortado el rollo, pero no es para tanto, además, ¿por qué me da órdenes?, Vlad tiene algo así como de leer la mente

-Porque estas en su casa y hay reglas supongo - dijo con obviedad, rodé los ojos

-Creo que pronto nos iremos de aquí cariño-la sonrisa en ambos era de complicidad

Llegué a su despacho, sin tocar, volví a entrar

-No, No, estamos haciendo todo mal - dijo negando con su cabeza, me señaló la puerta - sal y toca, para que te pueda decir adelante - fruncí en ceño y por alguna razón el enojo comenzó a invadir mi cuerpo

-¿De qué querías hablar? - Dije ignorando su orden anterior

Vlad dijo que tenías que obedecer, estas en una casa ajena querida Dove, la conciencia es mi peor enemiga, puede estar tan de acuerdo conmigo, pero puede estar en mi contra la mayor parte del tiempo, como ahora, claramente

-No oíste la orden o la tengo que repetir - dijo sin cambiar ese tono de seriedad y enojo

-La oí y créeme que no lo haré, de verdad te lo digo, me disculpo por cortarte el rollo, pero.. - me interrumpió

-¿De verdad crees que fue por eso? - Asentí

-¿Sabes lo que es el viejo mundo? - preguntó y negué, lo había escuchado, pero no sabía la definición de eso

-Los que trabajan entre la mafia se rumorean, aquí no importa si es mafia italiana, inglesa, japonesa, todos saben todo, estas en mi casa para enseñarte a sobrevivir, estas aquí para que tu padre no te encuentre, intenté que Kendra no te viera, pero no se si lo logré, hay algo que quiero que tengas claro - Dijo mirándome fijamente y yo haciendo la misma acción - si kendra se llegará a enterar lo podría rumorar y yo ahí no podré hacer nada para que tu padre se alejé de ti

Tenía razón, errores como este me podrían causar perder mi libertar y en el peor caso mi muerte, tengo que tener claro que ahora soy el ratón y no la gata

-Lo lamento, simplemente venía a decir rápidamente que lo sentía por lo de ayer y de la adrenalina y la vergüenza, no pensé en tocar - dije de nuevo apenada agache la cabeza

-Dove, mírame - me negué, tomó mi barbilla y nuestros ojos se conectaron - nunca bajes la cabeza, siempre con la frente en alto, ni siquiera a mi me la debes de bajar, ¿Entendido? - Asentí

-Me puedo retirar - asintió con poco convencimiento

Camine a paso firme hacia la puerta, para retirarme, pero entonces tomó mi brazo y me lo impidió, voltee y no tuve tiempo de decir o hacer absolutamente nada, porque sus labios atraparon los míos, fue un beso exigido, salvaje, lleno de necesitadad, el beso fue la respuesta que el necesita, lo supe por el cambio que había en sus ojos

-Derek - gruñó - Vlad, podría... ?

Se separó bruscamente de mi

-¿Lo amas? - Una pregunta que tiene una única respuesta, pero si digo la verdad no se que pueda pasar

Asentí

-Dímelo - Se volvió a acercar peligrosamente a mi

-Yo... Yo lo amo Derek - Asintió y se sento en su silla, que está detrás de su escritorio

-Eso es todo, para la otra ten más cuidado, cualquiera te podría ver - y así sin más siguió en sus asuntos, sin volverme a mirar, salí y por alguna extraña razón un sentimiento de decepción se apoderó de mí

¿Qué es lo que realmente esperaba?, no nos conocemos, no ha pasado nada entre nosotros, más que esos malditos besos que son como el mejor alimento para sobrevivir, joder sus besos, lleve mis dedos a mis labios y una estúpida sonrisa, se plantó en mi rostro