Destinos

E llegado a casa algo tarde después de pasar todo un día en la biblioteca y de admirar la hermosa noche durante mi regreso, aun así nadie me dijo nada en casa a pesar de que no tenemos demasiado como las demás personas que nos rodean tenemos lo suficiente para ser felices y vivir bien.

Yo me pregunto cuando terminará este día que se me a hecho una odisea de algún juego que planean los dioses en contra de mi, a pesar de eso supongo que aveces aquellos juegos me regalan unos instantes que duran años y no salen de mi mente tan sencillamente. Cuando más volveré a perderme en aquella mirada que me ha robado por completo mi corazón, aquel hombre en serio debe de ser algún capricho de los dioses para que yo desee que esa mirada solo sea mia y sea una completa egoísta al querer que el sea solo mi príncipe azul. Me recuesto en cama resignada ante esa mirada que no logro sacarla de mi así esta noche en mis sueños podré ser lo más egoísta posible para hacer que ese instante dure toda una noche, lo lamento dios Crono pero ese momento será aún más eterno.

Sin darme cuenta ya era el día siguiente y debía volver a la rutina de siempre y esta vez consistía en encontrar un nuevo trabajo, en el anterior no me fue muy bien y a pesar que me esforcé simplemente no tenia el estudio necesario y me reemplazaron, así que hoy debo ir a buscar suerte.

- Es completamente inútil  Esteban - digo totalmente exhausta mientras recostaba mi cabeza en una de las mesas de la biblioteca - nadie quiere contratarme, apenas miran mi aspecto o mi curriculum y me intentan evitar incluso algunos hasta me ignoran.

- Pues que esperabas ? - me mira con cierto desconcierto - la vida no es tan sencilla como piensas Erika, aparte creo que deberías esforzarte más o recuerda que si no lo logras si quiera hasta el fin de esta semana la economía en tu casa de caerá muchísimo así que al menos esfuérzate más si en realidad no deseas eso.

- Pero acaso piensas que no lo e hecho ?

- Entonces que haces perdiendo el tiempo hablando conmigo y por si fuera poco se que haz estado aquí desde hace más de una hora Erika - dice con un tono un tanto molesto y preocupón.

- Pero y tu como sabes eso? - digo totalmente sorprendida - acaso me haz espiado ?

- Ni quien quiera hacer eso - dice asustado - pero te conozco lo suficiente como para saber como piensas pequeña vagita así que levanta de aquí y anda a buscar trabajo.

- Pero estoy cansada Esteban - le hago puchero y suspiro.

- A mi no me engañas se que solo buscaste por los alrededores de la biblioteca para que el trabajo no te impida seguir leyendo - dice totalmente rendido - ya se que no puedes vivir sin mi pero Erika ya me estas asustando - se coloca la mano en la boca y finge sentirse dolido y asustado.

- Te juro que aveces no se que haces aquí si tu eres increíble como actor - empiezo a reír mientras que el solo se resiente - esta bien te demostrare que lograré conseguir trabajo aunque no esté cerca de aquí. 

- Erika también debes darme mi espacio ¿no crees? 

- Vaya, ¿Porque lo dices? 

- Porque a este paso por tu culpa jamás encontrare novia así que anda ve a buscar trabajo mujer está bien que te guste leer pero también la realidad necesita un poco de ti.

Salí de la biblioteca literalmente a empujones de ánimo o bueno eso me gustaría pensar pero se que el en el fondo se preocupa por mi y mi familia aunque eso seria muy en el fondo -suelto una pequeña risita al ver que tengo uno de los mejores amigos del mundo- empiezo a recorrer un poco mas la ciudad sin suerte alguna, ya va siendo más haya de medio día y no e podido encontrar ningún empleo.

- Oh diosa Tique por favor no me abandones - mientras hablo totalmente resignada y exhausta un papel golpea por completo mi cara haciendo de este momento de inspiración algo totalmente vergonzoso - siento que estas jugando conmigo gran diosa - saco el papel y estando a punto de tirarlo logró ver totalmente lo que estaba buscando - diosa en serio gracias por este rayito de buena suerte.

Leo atenta el papel y era de una dama doméstica y no me incomodaba en nada así que fui inmediatamente al lugar con un poco de emoción en mis adentros.

Al ver una casa tan enorme frente a mi decidí arreglarme un poco antes de llamar a la puerta.

- ¿Y tu que se supone que haces? - me pregunta una señora que sale de la casa, me mira totalmente desconcertada al ver como al frente de un vidrio con mínimo reflejo intentaba mejorar mi aspecto - yo te pregunte que ¿ Qué diablos se supone que haces niña ?

- Yo han bueno vine por la oferta de trabajo y no quería dar una mala impresión - siento que mis mejillas se envuelven en un carmesí incontrolable que inunda por completo mi rostro.

- Niña nosotros buscamos una dama doméstica no una modelo ni tampoco a una mujer que quiera conquistar con impresiones.

- Yo en serio lo lamento pero por favor deme la oportunidad necesito el trabajo para ayudar a mi familia.

- Acaso tienes hijos ?

- No tengo pero la situación de mi familia no es muy estable y pues...