Sombras del Pasado

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Actualidad
 


—¿Señorita West? ¿Se encuentra bien? —me preguntó mi jefa ya que tardé en contestar a su presentación.

—Si, si, estoy bien.

—Le decía que es un placer tenerla aquí con nosotros, si tiene alguna duda o queja no dude en buscarme, no quiero  ser de las personas que intimidan a sus trabajadores. 

Agradecí a mi jefa por su amabilidad y palabras de bienvenida, queriendo salir rápido de ahí.

—Sé que es mucho pedir, pero esta noche tenemos una reunión de negocios muy importante, te pagaré el doble a ti y a Jhon si nos ayudas con el maquillaje y el cabello.

—¿Yo? —solté de forma un poco brusca— Es decir, yo...

—Será algo rápido.

—Está bien, creo que puedo hacerlo.

—Te lo agradezco, iré a organizar algunas cosas, puedes comenzar con mi hermano.

Respiré hondo y como aún seguía ocultando la mitad de mi cara con mi propio cabello, le indiqué a Asher que tomara asiento mientras con rapidez cubría la parte de mi mandíbula con una bufanda que encontré en los objetos perdidos.

Mientras Asher tomaba asiento, comencé a reunir los productos de maquillaje y las herramientas necesarias, me sentía más segura al saber que no lograría reconocerme tan fácilmente si estaba tapada la mitad de la cara. 

Aunque la situación era incómoda y había muchos sentimientos y preocupaciones sin resolver, me esforcé por mantener la compostura y cumplir con mi trabajo de la mejor manera posible.

Mientras trabajaba en el maquillaje de Asher, noté que él me miraba de vez en cuando con curiosidad. Intenté concentrarme en mi tarea y terminar lo más rápido posible.

—Disculpa, pero acaso ¿tú y yo nos conocemos? Te me haces muy familiar.

Me detuve por un momento, sorprendida por la pregunta de Asher. Traté de mantener la calma y pensar rápidamente en una respuesta adecuada.

—Hmm, no, no creo que nos conozcamos. Tal vez me confundes con alguien más. Tengo una cara muy común.

Esperaba que mi respuesta sonara convincente, a pesar de que la voz me temblaba al hablar. 

Asher pareció seguir pensando en eso y yo ya estaba más nerviosa que antes.

—Ah, entiendo. Debe ser eso entonces. Pensé que te conocía de algún lugar, pero supongo que me equivoqué. Disculpa por la confusión y por si te hice sentir incómoda.

—Claro, no hay problema. 

Suspiré aliviada, agradecida de que mi respuesta hubiera sido suficiente para convencerlo.

Después de un breve momento de silencio incómodo, Asher rompió el hielo y comenzó a hablar de manera más relajada y yo lo único que quería era terminar mi trabajo en silencio.

—¡Quedó perfecto! —habló en voz alta a la chica que atendí antes de Asher— Muchas gracias, de verdad. Y a ti también, corazón —se acercó a mí y dejó un sonoro beso en mi mejilla, haciendo que la bufanda se desacomodara un poco de su lugar.

—Fue un gusto —respondí simplemente, no estaba acostumbrada a estas muestras de gratitud por parte de personas poco conocidas.

—Vendré más seguido, nos vemos —se despidió con su mano, saliendo del lugar.

—Que mujer tan... Agradable —dijo Jhon, extrañado por el comportamiento de la mujer.

—Creo que la palabra agradable, le queda corta —ahora habló Gigi.

Los dos rieron y fue en ese momento que caí en cuenta de que la bufanda ya no me cubría la cara y Asher mi miraba fijamente.

Sin que note mi preocupación, me disculpé, di media vuelta y caminé directo a los baños de mujeres, agradecí que estuvieran vacíos y pude entrar fácilmente.

Ya adentro, respiré profundamente y me di cuenta de que había cometido un descuido al permitir que Asher viera mi rostro, pero intenté calmarme y encontrar una solución.

Me observé en el espejo por un momento, recordando la conversación con Asher y cómo se había percatado de mi familiaridad, esperaba haber sonado lo bastante convincente y que después de esta pequeña y por mi parte, no grata reunión, no nos volviéramos a encontrar.

—Nyx —Gigi tocó la puerta del baño, llamando mi atención al instante—, la señorita Alice ya está aquí. Su hermano se ha ido y es su turno.

—Oh, claro, salgo en un minuto.

Ya más relajada y teniendo la certeza de que Asher se había ido, salí del baño, bajando la bufanda con cuidado.

Mi jefa me saludó otra vez con amabilidad y me pidió algo bastante sencillo para la ocasión.

Empecé con mi trabajo, asegurándome de que cada detalle estuviera en orden. A medida que avanzaba, mi mente comenzó a encontrar un poco de calma, enfocándose en la tarea en lugar de las preocupaciones personales. Sabía que la situación no se resolvería por sí sola, pero por ahora, necesitaba mantener la compostura y cumplir con mi trabajo de la mejor manera posible.

Me sumergí en la rutina familiar del maquillaje, enfocándome en los colores y las técnicas para resaltar su belleza.

Después de unos minutos de concentración, finalicé el maquillaje y me retiré un paso atrás para admirar mi trabajo. Mi jefa se observó en el espejo y sonrió.

—Nyx, hiciste un trabajo excepcional una vez más. Estoy muy contenta con cómo me has maquillado. Realmente tienes un talento especial, me alegra que estés aquí.

Agradecí sus palabras y le aseguré que había sido un placer ayudarla. Me sentí aliviada al recibir su aprobación y reconocimiento.

Y bueno, aún tenía que procesar que mi jefa era la hermana del chico que conocí hace tres años.

Después de recibir los elogios de mi jefa, me sentí satisfecha con mi trabajo y agradecida por su aprecio. Sin embargo, en medio de mi alegría, recordé que tenía que ir por Callie.

—Muchas gracias por todo, pero si me disculpa tengo que pasar por alguien dentro de poco.

—Claro, lamento haber tomado un poco más de tu tiempo. Te transferiré el dinero más tarde.

Me despedí y en el camino recordé que Asher mencionó que tenía una hermana, pero nunca había imaginado que se refería a mi jefa.




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