Capitulo 6: El beso

Andrew

Cundo llegamos a Alemania Samanta estaba dormido así que la baje cargando del avión y así me la lleve todo el camino a la mansión.

Cundo llegamos a la mansión la dejé en la cama de la que ahora sería nuestra habitación, o si ella quiere otra habitación aunque me duela se la daré, no quiero hacer sentir a mi Luna incomoda.

Cómo venía muy cansado del viaje, me puse mi pijama y me acosté a lado de Samanta, se ve tan hermosa cundo duerme, poco a poco mis párpados se sienten pesados y la última imagen que tengo antes de cerrar mis ojos por completo es una Samanta dormida abrazándome y yo abrazando la.

(***)

Cundo desperté me lleve la sorpresa de Samanta recorriendo el cuarto, se había cambiado, se veía tan bonita con esa camisa larga y sus pantalones cortos y su cabello desordenado en un chongo.

–Buenos días Andrew.

–Buenos días bonita.

Sus mejillas se pusieron rojas y yo solo sonreí por saber que no solo ella tenía ese efecto en mi.

–Tu cuarto es muy bonito y grande... muy grande.

Me senté en el colchón y me pase la mano por el a cabellos para revolverlo más, la mire y le contesté.—. Nuestro cuarto bonita.

–¿Nuestro? No como crees este es tu cuarto Andrew yo me puedo conformar con un cuarto pequeño o con un colchón en el piso.

–Como crees bonita este también es tu cuarto… bueno todo lo mío es tuyo ahora. Oh ¿No quieres dormir conmigo? Por qué de ser así aunque me duela te daré un cuarto no te quiero hacer sentir incómoda.

–Claro que quiero dormir aquí es que la cama es MUY cómoda pero yo no te quiero incomodar.

–Claro que no me incómodas, es más estaría muy feliz de que te quedarás a dormir aquí conmigo.

–Okey dormiré aquí pero si te llega a incomodar me iré y te dejare tu espacio.

–Esta bien aunque no creo que me incomode o aburra contigo estando aquí.

Me sonrió y se acercó a mi

–Andrew ¿Te puedo preguntar algo?

–Claro que si.

Me hice a un lado para que ella se acostara a lado de mi a lo cual ella acepto.

–Como supiste.—. se quedó en silencio por un segundo y después continúo.— ¿Como supiste que me habían echado del orfanato?

–Bueno pues Eyolf me dijo y aparte lo escuché, bueno escuché tu voz.

–¿Mi voz?.

–Si tu voz.

Flashback

–Es por eso que ese “bicho” estaba en el aire, aunque no era un bicho pero bueno.

–Entonces Alfa ¿Encontró a nuestra luna?

–Así es, encontré a la Luna de las manadas

Todos festejaron por a ver encontrado a la Luna de la manada hasta que sentí un dolor muy fuerte en mi cabeza.

–Alfa ¿Estás bien?

–Andrew, Andrew, Andrew, hermanó ¿Qué tienes?

Escuché la voz de Melissa pero la escuchaba muy lejos aunque sabía que Melissa estaba a un lado de mi, el dolor de mi cabeza era insoportable la vista se me nublo y empecé a escuchar un pitido en mis oídos, y después la escuché, escuché a Samanta

–¡¿QUÉ?!—.La voz de mi Samanta se escuchaba mal, se escuchaba como si estuviera a punto de llorar–. Y-yo no tengo a donde ir señora lucía por favor no m-me haga esto.

Después escuché una voz que nunca había escuchado, y supone que es la voz de la ¿señora lucía? Así había dicho Sam.

–Lo siento tanto Sam pero tienes que irte, para seguir aquí tienes que tener menos de 19 años y tú vas a cumplir 18, lamento informarte que después de tu cumpleaños número 18 te tendrás que ir.

–Maestra por favor no me eche no se dónde ir, no tengo familia ni mucho menos amigos por favor no me eche.

Después de eso vi una imagen de la chica castaña que le gritó a Sam el día que nos conocimos y una señora sonriendo, como si hubieran logrado su objetivo.

La corrieron… ¡ESAS MALDITAS LA CORRIERON!

Después de eso escuché como sollozaba Samantha, está llorando

–Ah donde me voy a ir.—. Se escuchó como lloraba eso me partió el corazón.—. por qué no me llevaste con ellos por qué tuviste que dejarme aquí, por qué no me dejaste morir a mi y a ellos vivir

–No, no digas eso preciosa, por favor no digas eso

Empecé a decir en voz alta a lo que Melissa me agarró de la cara y la guío para que la viera.

–Hey, hey, tranquilo ¿Si? Todo están bien no llores.

Sin darme cuenta empecé a llorar, Melissa me abrazo y me acarició como yo lo hacía cundo era niña y tenía pesadillas o se sentía mal.

–La corrieron esas malditas la corrieron, Melissa no la puedo dejar ahí, tengo que ir por ella.

–Tranquilo, dime más despacio. ¿A quién corrieron? ¿por quién debamos ir?

–Por Mi Luna, ellas la corrieron, debemos ir.

Todos se quedaron en silencio viendo que pasaba, después de un momento rompí el silencio.

–Busquen en todos los orfanatos de la ciudad en los registros, a alguien llamada Samanta García y me notifican ¡YA!

Todos salieron corriendo a buscar los registros.

Espérame preciosa te voy a encontrar.

Fin del flashback

–Y así fue como te encontré, un chico te encontró en el orfanato San Luis Rafael y me notifico que tenías que desalojar el lugar y fui por ti no iba a dejar a mi Luna a su suerte, cundo aquí tiene una manada y una casa que la recibirían con los brazos abiertos.

–Gracias Andrew, muchas gracias por ir por mi de no ser por ti no sabría en dónde estaría ahora o en dónde hubiera pasado la noche.

–No tienes nada que agradecer bonita esta es tu casa y siempre va a ser tu casa.

Nos quedamos viendo a los ojos por un momento, Dios quiero besarla. Cómo si hubiera leído mis pensamientos se acercó y me beso. Solo fue un poquito pero me dejó estático, cundo recupere la noción de tiempo la vi con la cabeza agachada y sus mejillas rojas.

–Y-yo lo-lo siento, no sé por qué lo hice...

No la dejé terminar cundo la agarre de la cintura y la subí a horcajadas sobre mi, pegue mi boca a la de ella y moví mis labios sobre los suyos en un beso, ella me correspondió inmediatamente.