The beginning of everything is the map of the soul
—¿Tenis o Zapatos?—
—Los tenis son más cómodos—
—¿Pizza o hamburguesa?—
—No lo se... ¿pizza?—
—¿Salir de fiesta o quedarte en casa conmigo?—
—Me quedo contigo...—
Taehyung sonrió al escuchar mi respuesta, sentí su brazo rodear mi cintura para luego pegar mi cuerpo al suyo
—Señorita T/N—
—Dígame joven Kim—
—¿Le gustaría comenzar una segunda ronda?—
—¿Que estamos esperando?— contesté sin dejar de mirarlo a los ojos
—Bien—
Taehyung sonrió una vez más y luego se colocó encima de mi
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>> Kim Taehyung es un chico de 24 años propietario de una gran empresa, desde que era un niño su padre le enseñó a manejar todos los negocios que el llevaba, para que cuando cumpliera sus 18 años el se hiciera cargo de todo. Y así fué, al cumplir su mayoría de edad, su padre lo nombró propietario de la empresa y lo puso al mando. Cuando tenía 20 años conoció a una joven de la cual se enamoró inmediatamente, después de estar tras ella unos meses, aceptó salir con el y poco después se hicieron novios. Hasta la fecha siguen siendo pareja y se podría decir que tienen una relación perfecta
T/N es una hermosa jóven de 22 años, vivía con sus padres hasta que cumplió 18 años y decidió independizarse, consiguió un trabajo de medio tiempo y con eso pagaba los gastos de su universidad, de la cual se graduó hace poco. En una ocasión en su trabajo de medio tiempo como cocinera y mesera de un restaurante, le tocó prepararle y servirle un platillo a Kim Taehyung, de quien se hizo amiga pocos días después.
Llevan casi 4 años de relación y son muy felices, después de sus trabajos la pasan juntos todas las tardes, les gusta salir a fiestas y viajan cuando tienen la oportunidad. Han pensado en tener hijos y formar una hermosa familia, pero eso será más adelante, por ahora sus noches placenteras siempre van acompañadas de un condón <<
Subí a la habitación para darme un baño rápido, tengo que estar lista en menos de 30 minutos pues se me hace tarde para el trabajo, me gradué en "Diseño de modas" y trabajo para una importante empresa también.
—No se, creo que sería mejor si agrego un clutch—
—A mi me parece perfecto, pero tampoco le vendría mal un poco de estilo así... ¿tela o cuero?—
—Tela, definitivamente—
—Perfecto, traeré a Coco para comenzar a probarlos—
—Está bien—
Mi tarde fué tranquila, como la mayoría de veces, amo mi trabajo y eso hace que el tiempo pase rápido. Cuando me doy cuenta ya son casi las seis de la tarde
—¿Que hora es?—
—No lo se, pero ya tengo que ir a casa— me contesta Sook, mi amiga
—Si, creo que yo igual—
Recojo mis cosas, guardo mi celular en la bolsa y salgo de ahí. Subí al auto y conduje hasta la casa, espero que Tae no haya llegado aún, no me gusta verlo llegar cansado y no tener nada listo para que comamos. Llego al edificio, entro por el estacionamiento y aparco el auto, tomo el elevador al piso 19. Al entrar al departamento me doy cuenta de que Taehyung está sentado en el sofá, está viendo la tele, y viste una ropa bastante elegante
—¿Llegaste hace mucho?—
—No, tengo apenas 10 minutos—
—Bien, ¿tienes hambre?—
—Si un poco—
—Prepararé algo—
—Mejor cambiate, ya hice una reserva—
—¿Reserva? ¿En dónde?—
—Es una sorpresa—
Taehyung me observa con una de sus hermosas sonrisas, yo asiento y subo a la habitación para cambiarme.
Decidí ponerme uno de los vestidos que yo misma diseñé, es uno color azul marino, con mangas cortas, amplio de la parte de abajo, pegado de arriba y con un escote un poco provocativo. Bajo a la sala en donde Taehyung me está esperando, está parado frente a la puerta con su celular en las manos; después de un par de besos, ambos salimos y fuimos al estacionamiento. Ahora nos encontramos en el "Flavors" uno de los restaurantes más prestigiosos de todo Corea
—¡Oh por Dios! Amor, conseguir una reserva aquí es imposible... ¿Como lo hiciste?—
—Tengo mis contactos— me contesta guiñandome un ojo
—Es increíble—
—Era lo menos que podía darte en un día tan importante—
—¿Mmm?—
Mierda, ¿como pude olvidar algo tan importante como ello? A veces me concentro tanto en el trabajo que olvido cosas como hacer la comida, limpiar la recámara o incluso pagar la luz... Pero esto es imperdonable, hoy es nuestro aniversario, oficialmente estamos cumpliendo 4 años de estar juntos y lo había olvidado del todo
—Es... cierto... yo...— observé a Taehyung quien se acercó a mi lentamente
—¿Lo olvidaste?—
—Buenas noches joven Kim, permitanme acompañarlos a su mesa— habló un tipo un poco robusto que llevaba puesto un chaleco negro y tenía una servilleta en el brazo, se veía muy elegante
—Hablamos de esto en la casa— me susurró al oído para luego entrelazar su mano con la mia
Caminamos atrás de el tipo quien nos llevó hasta una de las mesas de aquel lugar, estaba justo a lado de el vidrio desde donde se veía parte de la ciudad, era una vista increíblemente hermosa
—Tae...— hablé observando sus manos, estaba jugando con sus dedos, algo que me causó ternura pues el hace eso siempre que tiene nervios o está ansioso —perdóname esque yo...—
—Lo olvidaste—
—Tuve mucho trabajo hoy, la tarde se pasó muy rápido y cuando llegué a la...—
—Está bien tranquila—
—No no está bien, soy una tonta como pude haber olvidado algo tan importante—
Taehyung hiba a decirme algo pero el mesero de hace un momento llegó con nuestros platillos, observé atentamente la comida, se veía tan rica y costosa; y yo solo pensaba en que no merecía todo eso. Al principio no quería tocar la comida, pero Taehyung comenzó a insistirme en que lo hiciera, después de escucharlo pensé en que debía comer ya que como dije anteriormente una reserva en ese lugar era casi imposible y si Taehyung lo había echo, al menos debía agradecerle de esa manera.
Después de la comida, decidimos solo ir a caminar un poco, ya saben, tomados de la mano y caminando si ningún rumbo
—Amor enserio perdóname—
—Shhhh te dije que está bien—
—Esque no lo está—
—Escucha— dijo parandose enfrente de mi, me miró por unos segundos y luego me tomó por la cintura —tu regalo de aniversario para mi será...— en sus labios se formó una pequeña sonrisa, me miraba atentamente esperando a que yo captara su referencia pero en lugar de eso yo solo lo miré con el ceño fruncido —me lo recompensaras en la casa—
Escuchar aquello hizo que se me erizara la piel, finalmente había captado lo que estaba tratando de decirme y de inmediato una sonrisa se formó en mi rostro. Ladeo un poco su cabeza y se acercó a mi para luego darme un beso, coloqué mis manos al rededor de su cuello y dejé que continuara, sentía su cálida respiración, realmente amo esa sensación, me recuerda a la primera vez que nos besamos...