Capitulo 11

“Un baile de navidad”

   Estaba acostado en mi cama, era más de media noche, incluso puede que ya este amaneciendo, no recuerdo a qué hora llegue aquí, Lia estaba asustada, bueno, los tres, nos quedamos con ella hasta que se durmió, lloro desde el momento en que su mamá colgó, grito y rompió cosas, lo necesitaba, debía sacar el enojo que sentía.

   Yo no sabía cómo sentirme, Nicol y yo no podemos entender totalmente que es lo que siente, solo podemos tener ideas. Yo no me imagino que sería de mi si debiera de ver a Oliver de nuevo, él se llevó todo de mí.

   Sigo en mi mundo cuando escucho que alguien se estrella contra la puerta, extrañado me levanto a abrir.

-Williaaaam –dice un borracho Nick abalanzándose contra mí -. Me ale…, alegra, encontraaaaarte.

   Me metí con él abrazándome y cerrando la puerta detrás de mí, lo lleve a su cama, donde no acepto soltarme, y me tuve que quedar con él, no es que me queje, pero, a quien engaño, me encanta que se aferre a mí.

- ¿De dónde sacaste alcohol?

-De Chriiiiis –dice aun arrastrando las palabras, trato de zafarme, pero él habla -. Perooo, yo he…, he venido…

-Nick, estas borracho, deberías dormir, yo me quedo con esto –mencione tomando su celular -. No queremos que le marque a Alice en ese estado.

- ¿Y cómo porque lo hariiia?, es una zorra, una maldita zorra, con la que aun así me debo casar –dijo eso ultimo como si nada, gire a verlo.

- ¿Qué?

-Tengo un, un, uno de esos.

- ¿Matrimonio arreglado?

-Esooo –dijo acostándose -. Yo solo quería jugar con los tacones de mamá.

   Lo mire, quise decir algo, pero él se quedó dormido, le quite los zapatos y el pantalón, lo metí bien a las cobijas, y lo deje dormir.

   Él solo quería jugar con los tacones de mamá, yo solo me puse labial, me quería ver como ella, quería ser igual de linda, pero solo obtuve el primero de muchos golpes. Con el tiempo, salía con diferentes chicas, todas para aparentar, había funcionado, se la había creído, pero yo también, deje que me manipulara a su gusto, todo el tiempo.

   Nunca pude ser yo mismo, no hasta que apareció Oliver, él me ayudo en todo, pero sigue siendo un gran imbécil.

   Me quedo dormido después de un rato, pero no duermo lo suficiente, doy vueltas sobre la cama, cuando decido levantarme, veo la hora, siete y media, giro a la cama de Nick, sigue dormido, está en posición fetal, abrazando las cobijas y tiene un tierno puchero. Discuto conmigo mismo para ver si lo despierto o dejo que siga durmiendo, de la misma manera tendrá una resaca horrible.

   Decido dejarlo dormir, así que salgo a darme un baño, aun los acontecimientos de ayer están flotando en mi mente, pero de alguna manera logro bañarme.

   Regreso a la habitación, al entrar veo a Nick despierto, está sentado con las piernas cruzadas sobre su cama, en las manos tiene una libreta, una que conozco muy bien, entro en pánico y me abalanzo para quitárselo.

- ¿Qué haces? –pregunto asustado.

-Nada, solo me dio curiosidad –dijo encogiéndose de hombros -. ¿Por qué tienes tantos dibujos míos?

-Tienes buenas facciones, no te emociones –le doy la espalda y dejando mi cuaderno en mi buro.

-Si tú lo dices –se levantó, tomo sus cosas y salió.

   Ya era tarde para llegar a la primera hora, así que con calma me cambie, me había espantado, desde que llegue no había parado de dibujarlo, sueno ridículo, pero es todo lo que quiero dibujar, por ello hice un cuaderno con solo dibujos de él.

   Solo que ese cuaderno esta encendido, y él que agarro es uno común y corriente, donde si tengo muchos dibujos de él. Me tumbo en mi cama, sin querer levantarme.

- ¿Puedo ver que dibujas?

-No.

- ¿Por qué no? ¿es secreto de estado? –dijo divertido.

-Esa es frase de Lia, simplemente no me gusta que desconocidos vean mis cosas –dije sin quitar mi mirada del cuaderno.

-Entonces, soy Oliver ¿Y tú?

   Salgo de mi ensoñación cuando Nick entra, es tarde, pero no me importa, le mando mensaje a Lia para ver si irán a clases, mientras espero por su respuesta, miro a Nick cambiarse, se pone el uniforme, es realmente espantoso, pero a él le queda lindo, bueno, todo le queda lindo.

- ¿Disfrutas de la vista? –pregunta mirándome, sonrió y desvió la mirada.

-No, para eso deberías estar totalmente volteado - ¿Qué mierdas estoy diciendo?, a él le parece divertido, solo se ríe y se agacha por sus zapatos -. ¿Cómo estas tan fresco?

-Sueros, agua entre cada cerveza y una aspirina –dice tomando sus cosas -. Pero aun así no recuerdo nada de lo que pasó.

- ¿Nada?

-Nada, ¿iras a clases? - dice tomando su celular, y justo en ese momento me llega la respuesta de Lia.