Capitulo 15: Un impostor en el trono.

El Barón Negro con su nuevo disfraz del Rey Kenric, estaba poniendo su malévolo plan en marcha. El impostor se dirigió al salón del trono sin levantar sospechas. Admiro por un momento su nuevo trono y sentó sintiéndose digno.

Sir Rypan se dirigió a su lado en el trono sonriendo esperando nuevas órdenes.

Barón Negro: Jajaja, comencemos la parte 2 de la operación.

Sir Rypan: Como diga mi señor.

Maria y Alex aun seguían entrenando en el patio de entrenamiento. Dos guardias salieron de la entrada al salón del trono con Sir Gareth, caminaron hasta llegar a donde estaban el príncipe y la joven peliazul.

Maria, Alex, Gene, y Twinkel, se percataron de la presencia de Sir Gareth y los dos guardias que lo acompañaban, no sabían de lo que estaba pasando. Hasta que los guardias tomaron a Maria bruscamente, le colocaron las manos por la espalda.

Alex. Sir Gareth qué significa esto. (Preguntando con enojo y sorprendido).

Sir Gareth. Lo siento príncipe Alexander, órdenes de su padre.

Alex. Mi padre!!

Sir Gareth. Si dijo que la llevemos a las mazmorras, de inmediato.

Alex. Voy a hablar con mi padre.

Sir Gareth. Me temo que el rey no quiere ver a nadie en este momento.

Sir Gareth se retiró junto con los guardias.

Alex, Twinkel y Gene se quedaron impresionados por la respuesta de Sir Gareth, al parecer la estaban arrestando sin ninguna razón aparente.

Los guardias llevaron a Maria a las mazmorras del castillo, ella luchaba con todas sus fuerzas para zafarse de las manos de los dos caballeros, los caballeros la arrojaron a una celda haciendo que callera al suelo, cerraron la puerta con llave. Maria se levanto del suelo, se asomo a la ventanilla de la puerta.

Maria. Oigan, déjenme salir.(Dijo mientras golpeaba la puerta).

Los guardias se fueron dejando a la peliazul sola en la oscuridad de la prisión. Por la oscuridad Maria solo podía ver antorchas encendidas en las paredes y unas cuantas puertas de celdas. Maria dejo de golpear y jalar la puerta de su celda, puso su espalda contra la pared y se sentó abrazando sus rodillas. La poca luz le permitió ver su celda, era de ladrillo gris y una cama de piedra, la única ventana que había era la de la puerta.

Durante una hora Maria no dijo ni una palabra, tenía la cabeza hundida en sus pensamientos, este sería el final, estar encerrada en esta celda para siempre, no volvería a casa, que hizo para merecer esto, que le estaba pasando al rey.

De repente escucho que alguien estaba abriendo la puerta de su celda, ella se puso de pie mirando hacia la puerta. Cuando la puerta se abrió, vio una silueta familiar, era Alex.

Alex. Maria.

Maria. Alex.

Alex. Maria no hay tiempo tenemos que sacarte de aquí.

Alex tomó su mano sacándola de la celda, corrieron por la prisión, en el camino, Maria fijó su mirada a las puertas de la celdas y vio un rostro conocido pero no lo pudo ver bien por la poca luz que había, pensó que solo sería su imaginación, siguió corriendo sosteniendo la mano de Alex.

Maria. Alex que está pasando.

Alex. Es increíble que diga esto, pero mi padre se volvió loco. Tal vez esta pensando en ejecutarte.

Maria. Que¡¡¡ pero yo no hice nada.

Alex. Exacto. Por eso tenemos que sacarte de aquí.

Maria. Tenemos?

Al llegar al final de la puerta de la prisión via a Gene y Twinkel, vigilando la entrada.

Twinkel. Despejado.

Los cuatro salieron de las mazmorras, Maria noto los rayos de sol que le lastimaba los ojos, pero al los poco segundos logró recuperarse. Corrieron por todo el castillo evitando a los guardias, hasta llegar al patio. Llevaron a Maria a los establos y tomo su caballo.

Alex. Tienes que salir de el castillo, huye lo más lejos al bosque, nosotros te alcanzaremos después.

Maria tomo al caballo de las riendas y camino hacia la puerta gigante de el castillo. Twinkel distraía a los guardias que rondaban cerca de la puerta mientras que Alex y Gene jalaban en mecanismo que abría la puerta.

Maria se oculta de lado de el caballo, para no llamar la atención de los guardias, ya estaba a unos metros de la puerta, pero un guardia la reconoció y sonó la alarma.

Guardia. La prisionera, está escapando. (toco la campana de alarma).

Los caballeros que distrajo Twinkel, se alertaron por la alarma. al ver a la prisionera escapar, tomaron sus espadas y fueron tras ella. Maria subió a su caballo y comenzó a cabalgar  para escapar  de los guardias, algunos lanzaron lanzas y flechas, maria tomo un escudo que estaba en una carreta de armas y logró retener los flechas. Maria y su caballo trataron de llegar a la puerta pero cada vez llegaban más guardias armados, Twinkel trato de ayudarla encerrando a los guardias en burbujas voladoras, el pequeño Alien trato de ayudar golpeando la cara de un guardia con sus pequeños puños.

Guardia. Hahha ha quitenmelo, lo tengo en mi cara.(se sacudía y gritaba)

Alex y Gene sostenían con fuerza el mecanismos de la puerta pero era muy pesado que les costaba mantenerla abierta.