12

Confia

Athan  

—Muy bien, escuchen. No nos queda mucho tiempo. En unos días tendremos que mostrar pruebas sobre la situación dada en estas últimas semanas. —anuncio, —Todos saben que con esto nos referimos a María Rose y a su padre Jones Rose. —prosigo, —La operación está teniendo éxito y, en un poco más de días, lograremos llevar a cabo el paso final. Debo recordarles que esta no es una operación de eliminación sino por determinar, lo que significa que, por el momento, necesitamos continuar con el plan y encontrar más pruebas. —me inclino hacia delante y apilo los archivos y papeles que estuvimos analizando, —Ya pueden retirarse. —finalizo.  

Empezar mi sábado con una reunión no es una de mis cosas favoritas en el mundo, pero mi padre no me iba a dejar de molestar hasta que la tuviera.  

Paso mis dedos por mi cabello, —Si tienes algo que decir solo dilo. —me levanto de la silla y me cruzo de brazos.  

—¿Qué te hace pensar que tengo algo que decirte? —dice Eryx saliendo del oscuro rincón del cuarto. Se sienta en la silla frente a mí y sonríe descaradamente.  

Bufo, —Te conozco. Siempre tienes algo que decir.  

—¿Sabes qué? Tienes razón. ¿Te comparto mi opinión hermano? —ruedo los ojos y asiento. —Dijiste que la mision es “por determinar” cuando ambos sabemos que no es asi. —dice marcando las comillas con sus dedos, —Si sigues cubriéndola debes saber que no eres el único cercano a ella que está al tanto de la situación.  

—¿De qué mierda me estás hablando?  

—Solo te estoy diciendo que Rose tiene más de un puñal en la espalda. —se levanta y posiciona cerca de mí, —Tu eres uno, pero ahora … ¿Quién será el otro?  

—Déjate de acertijos y solo dime quien mierda es.  

Se ríe, —¡Pero es que, si te lo digo, deja de ser divertido!  

—Vete ya Eryx, tengo cosas más importantes que hacer que lidear con tus estupideces.  

—Como ordenes hermanito.  

Me quedo solo en el cuarto, con los brazos cruzados y mis pensamientos confusos.  Si es verdad que Lys tiene a otra persona espiándola para sacarle información, debo averiguar quién es, pero por ahora es mejor solo concentrarme en hacer que confiese lo que tanto estuve esperando. Necesito que salga de su boca la verdad y que nos devuelva lo nuestro.  

Lys  

—Cinco autos negros se están yendo de la casa de Nightshal. —confirmo, —Si Jack, estoy segura de que algo está sucediendo. Me parece bastante raro que sean las diez de la mañana y lleguen todos estos autos. —explico, —Tengo que colgar, avísale a Ryan de esto. —cuelgo y me separo de la ventana.  

Bostezo y me siento en la orilla de mi cama. No pude pegar un ojo en toda la noche. No se porque siento que las cosas no van a terminar bien. Hay algo que no cuadra.  

Se que no puedo confiar en Athan pero … tal vez él no sabe nada sobre el “trabajo” de su padre, y si él no sabe nada... entonces yo lo estoy usando para sacarle información.  

¡Uuugghh! Mierda. —pienso.  

—Concéntrate Rose. —me repito una y otra vez con mis manos sobre mi cara.  

No quiero decir que me encariñe, no quiero pensar eso porque sino … cuando tenga que hacer lo que tengo que hacer, no podre hacerlo.  Prefiero seguir mintiéndome y cumplir la maldita mision que tengo.  

Es solo un chico, como cualquier otro, se supera. El tiempo sana todas las heridas, solo espero que no sean muy profundas.  

Tomo mi celular y marco el número de Jones. Luego de tres intentos y cero respuestas, aparto el aparato y bajo las escaleras para encontrarme con mi madre hablando por teléfono en la cocina.  

Al verme, me sonríe y aparta el teléfono pidiéndome que le pasara papel y lapicera. ¿Por qué cuando me pide algo mientras está en el teléfono, nunca logro encontrarlo?  

Luego de mi maravillosa búsqueda, se lo paso, anota algo y cuelga.  

—Tu padre llegara en tres días alrededor de la hora de la cena. —dice con una sonrisa. Mi madre nunca perdió ese enamoramiento por mi padre. No sé si ella sabe sobre el secreto de papa, pero algo me dice que no.  

Me siento mal al mentirle, pero es eso o tomar el riesgo de que salga lastimada.  

Finjo una sonrisa, —¡Que bueno!  

Asiente y me repasa con la mirada. —¿Qué haces vestida tan bien?  

—¿Esto te parece bien? —digo soltando una risa. Esa mañana ni me había gastado en vestirme bien. Solo me puse un top blanco, con un jean azul roto, una camisa verde y unas botas bajas blancas. —Pensé en salir hoy, tal vez tener un día para mí misma y después en la noche encontrarme con Sam y Evans.  

—¿Y qué hay de Athan? 

—¿Qué hay con él? —pregunto confundida.  

—Nada, nada. —dice sonriendo y guiñándome un ojo.  

—¡Mama!  

—¡Ay por favor! —dice riéndose, —Bueno, yo debería ir a un almuerzo en un rato con unos compañeros de trabajo. Te dejo plata para el almuerzo y por si te quieres comprar algo.  

Asiento y ella sube a su cuarto. Mi madre trabaja en un banco en el área de operadora en sistemas. Siempre me pareció interesante su trabajo, pero tiene demasiada matemática, asi que eso me saco el interés.  

Prendo la cafetera y preparo mi desayuno. Esperando y esperando, escucho que tocan la puerta.  

Corro a abrirla, miro por la ventana quien es y arrugo mis cejas.  

—Hola. —dice el chico frente a mí.  

—Hola. —digo completamente confundida.  

—¿Sorprendida? —dice con una pequeña sonrisa.  

—Umm si, bastante. —me quedo mirándolo como idiota, —Pasa. —me aparto y el entra.  

Nos sentamos en el sillón del living.  

—¿Qué haces aquí Eryx?  

—Wow, enserio que estas sorprendida. —ríe, —Solo vine a pedirte perdón.  

—¿Perdón? ¿Por qué?  

—Ayer cuando tú y … Athan estaban … a punto de...