4: El maestro Pokémon

—Tú le gustas.

—¿Cómo? —le digo impresionado.

—Qué le gustas, me lo confesó ayer.

—*Sin palabras* ... 

Después de escuchas ésas palabras, mi cuerpo comenzó a sentir cosas extrañas, que jamás había experimentado... Pero tenía que controlarme, nada de eso podía ser cierto...

*Se acerca Rowan y otro chico más*

—¡Hola, tú debes ser Ryan! —dice el chico que estaba al lado de Rowan. Que por lo que se ve, es mucho más alto que ella, y quizás que yo.

—Hola, sí, ¿y tú? —pregunto mirándolos.

—Yo soy Ben, el hermano de Rowan, un placer —me tiende la mano.

—El placer es mío, Ben —le estrecho la mano—. A propósito, ¿qué hora es?

—Son las 12 de la madrugada.—revisa la hora en su reloj—. ¿Ya te tienes que ir? —dice Rowan, mirando su Iphone 6s.

—Eh, sí, creo que sí —digo mirando también mi reloj.

—Tranquilo, le digo a mi papá que te lleve, nosotros te acompañamos, ¿vale? —dice con una sonrisa.

—Está bien, gracias Rowan —le digo tomándola de la mano.

—No agradezcas —se ríe. 

Ella le dice al chófer de su padre, él acepta y se dirige al carro, me monto detrás junto con Ben y Rowan, Bella se quedó porque tuvo que arreglar unas cosas de la fiesta.

—¿La pasaste bien? —me dice Rowan, mirándome a los ojos.

—Sí, muy bien la pasé, gracias por invitarme.

—No agradezcas, bobo —se ríe de nuevo.

—Llegamos —dice el chófer.

—Muchas gracias por todo, ¡Hasta luego Ben!

—Qué te vaya bien, Ryan  —dice el chico alto.

Llego a la casa, abro la puerta con mucho cuidado, miro hacia todos los lados, creyendo que mi mamá estaba esperándome, paso a la cocina y ella estaba sentada en el comedor y me dice:

—Coño, por fin llegas. ¿Cómo te lo has pasado? —dice viendo la TV.

—Mamá, ¿por qué no estás dormida? —digo con tono divertido.

—Na, me quedé viendo una serie y quise esperarte —dice sin apartar la mirada de la TV.

—Ah, está bien. La he pasado muy bien, ahora voy a dormir, hasta mañana, te amo.

***
 

¿Por qué coño no pude dormir pensando en lo de Rowan?  

Quizás porque me gusta, y no me he dado cuenta, no, no creo que sea por eso...

Me levanto, era tarde, y como no tenía clases, reviso mi celular y veo un mensaje de Bella que decía: 

"Hola, el domingo habrá una fiesta en una piscina cerca de la Mansion Houston, si te llegó el mensaje es porque estás invitado, a pasarla bien. Te esperamos." 

Guah, ¿otra fiesta?, ojalá me dejen ir, quiero ver en bikini... ¡¿Por qué demonios estoy pensando en esoo?! 

***

Me levanto luego de hablar un rato conmigo mismo, tomo una taza de café con leche y agarro mi libro Viviendo Con Mi Ex, al parecer estaba apunto de terminarlo, por lo que me quedé leyéndolo, mientras mi mamá hacía unas compras con Saby. 

Estaba tan aburrido que había descargado Pokémon GO para jugarlo con Henry, que venía a mi casa. Escucho que suena la puerta, y efectivamente era él.

—¿Qué taaaal? —alarga él chico, muy simpático y bien vestido. 

—¿Quieres ser un maestro Pokémon? —digo yo con voz chistosa.

*Suelta una carcajada* —Claro que sí. 

—Bueno, salgamos, que me muero del aburrimiento.

Salimos a buscar pokémon con nuestros celulares por todo el vecindario, pasamos varias veces por la mansión Houston. Y sí, sí miré varias veces, a ver si veía a Rowan, y no la pude ver.

***

Se hacía tarde, Henry se fue a su casa y yo a la mía, cuando llego a mi casa, reviso mi portátil y tenía un mensaje de Bella en el Facebook, preguntándome cómo estaba, qué hacía, lo típico. 

El día fue aburrido, la idea era pasarla bien. ¡Mañana hay partido de fútbol!