Ya casi es Junio lo cual significa ¡Vacaciones!. Si, yo nunca en mi vida había sentido emoción por ellas, ¿Por qué? Bien, pues porque siempre he amado el colegio, soy una persona que en realidad ama estudiar, lo sé, suena un poco difícil de creer pero así es. Desde pequeña me gusta bastante leer, estudiar y aprender más y más. Recuerdo que en tercer grado mi profesora nos hacía dictados cada mañana para mejorar nuestra letra y ortografía, está última fue la que más mejore, mi letra mmm... Bueno, no tanto, de hecho me han dicho que lo único que no tendré que reforzar en la universidad será mi letra porque según mi hermano "ya tengo letra de doctor". Lo cual es falso, si bien es cierto que no es una letra perfecta, está bien, no es tan fea.Volviendo al punto, si, estoy emocionada por las vacaciones, faltan como tres semanas o algo así.
Cambiando de tema con Evan vamos poco menos de 1 mes ¿Cuando lo cumplimos? No lo sé. Pero estoy decidida a terminar con él, lo sé, se que debí de haberlo hecho hace mucho pero es tan complicado hablar con él, aunque ya no voy a esperar más, estoy decidida a hacer eso este lunes.
Por otro lado estoy feliz, con Alessandro nuestra relación solo mejora de hecho hasta nos tuteamos, se que es una tontería pero es todo un caballero, si, de esos que hoy en día no existen, recuerdo que un día mientras hablábamos me pidió ser mi amigo y además de eso me preguntó si podía tutearme, es alguien único. Para muchos es muy tonto eso, pero para mí es bonito, hoy en día pocos son los que te tratan bien y con respeto y pues llámenme anticuada o enchapada a la antigua pero cosas como estás me parecen interesantes, hablando del rey de Roma, me acaba de llegar un mensaje de él.
Hoy es lunes y eso significa que voy a terminar con Evan y la verdad estoy lista, pensé en salir con él del salón y hablar obviamente creo que él ya lo supone y bueno, no me queda otra que hacer esto de una manera sutil para que no pierda tanto los estribos.
Está sonando el timbre y eso significa hablar con Evan. -- Hola, vamos - dice Salomé quien llega a mi puesto.
-- Hola, la verdad es que tengo que hacer algo, me esperas, no tardó o si quieres te alcanzo.
-- ¿Ese algo es hablar con Evan? - yo asiento rápidamente, mientras me fijo en dónde está él - Bien, entonces te acompaño, me alegra que por fin le vas a terminar, no se te ocurra no hacerlo - la miro con los ojos abiertos si bien es cierto que a ella le cuento muchas cosas, respecto a Evan solo sabe cómo fue que nos hicimos novios y no más.
-- ¿Tu cómo...? - callo cuando de repente su voz me responde a mi pregunta.
-- Todo el día estuviste observando la puerta y se notaba que querías hablar con él, además se cómo te trata y no hay que tener más de un dedo de frente para saber que quieres terminarle.
-- Tu si me conoces - sonrió y es que a pesar de no haberle contado nada ella lo supo.
-- Si, ahora vamos - asiento y nos dirigimos a dónde está Evan, él va saliendo de salón y apenas lo llamo voltea para esperarme.
-- Pensé que estarías hoy con ella- dice en un tono un tanto brusco y despectivo hacía mi amiga, pues odia que esté con alguien que no sea él y normalmente eso sería tierno, pero en él y en su forma de reclamarlo no lo es.
-- No, tenemos que hablar - quiero ir al grano, no quiero a sus amigos interviniendo en esto.
He hablado con él por cinco minutos sobre lo típico que siempre dice de que no le gusta que yo lo deje solo frente a sus amigos y cosas así, supiera que está es la última vez que dirá eso, me rio mentalmente por ello.
-- Bueno, ya para - digo cuando ya me tiene aburrida con su sermón.
-- No paro, eres una egoísta al siempre dejarme solo, ni siquiera me tratas bien - ~un burro hablando de orejas~ dice mi conciencia.
-- Mira quién habla, yo solamente quiero decirte que esto ya no puede continuar así, yo... - me callo cuando él empieza a imitarme.
-- "Esto no puede continuar así" - lo dice, imitando mi voz o bueno eso intenta porque le sale espantoso - mira - prosigue - ¡por supuesto que no vamos a seguir así porque...! - está gritando y no lo permitiré asi que esta vez el que se calla es él, ya que yo lo interrumpo.
-- Shh - digo elevando mi dedo índice a la altura de mi boca en señal de silencio - Yo creo que es mejor terminar - digo soltando un suspiro.
-- Lo mejor no, yo no he dicho que terminamos - ¿Es en serio? O me está molestando.
-- No te estoy preguntando si quieres o no, estoy terminando contigo y por más que no quieras así es, así será y así se quedará - yo dije eso woww, me aplaudo mentalmente, me quedo bien la frase porque por su cara alcanzó a vislumbrar su asombro por como le estoy respondiendo, pues nunca suelo responderle nada.
-- ¿Cómo? Ves como te haz vuelto de contestona - me rio pero sin un asomo de gracia en mi risa, lo hago de una forma sarcástica.
-- ¿Yo, contestona? - me señaló - ¿No serás tú? Deja de hablar porque tú tienes mucha más cola que te pise.
-- Yo soy muy bueno contigo como para que me vengas a decir que esto se está acabando por mi culpa - resoplo y hago acopio de toda mi fuerza de voluntad para no golpearlo por toca narices.
-- El papel de víctima no te queda - él rueda los ojos y yo prosigo - sin embargo, eso ya no importa. Acá lo importante es que no hagas un huracán en un vaso con agua. Terminamos porque ya no podemos seguir así.
-- Bien, pero ten en cuenta que esto puede no ser el final.
Y sin más da la vuelta y se va, debo admitir que siento que me quite un peso de encima, pero me duele en parte porque antes de haber sido novios nuestra amistad era muy bella y esta faceta que él me mostró no era para nada la que yo conocía. Pero bueno, así es la gente y yo lo sabía, por eso nunca quise amigos y mucho menos hombres, no por nada, yo sé que suena prejuicioso pero me parece que los hombres tienden más a fallar o bueno, creo que lo digo por todo lo que me ha pasado con los hombres, no confío en ellos, yo sé que no todos son iguales pero pocos son los que me dan total confianza y solo son de mi familia.