Frederick
¿Qué si me quede tranquilo después de saber que ella iba camino a su casa?
Ni un poco.
Tal vez físicamente pueda estar en perfectas condiciones, pero por experiencia sé, que lo daños internos afectan más y son mucho más duraderos.
Conozco a la perfección los efectos colaterales que producen perder personas tan importantes como son los padres, claro que nuestros casos son muy distintos, ella los perdió por un accidente y yo por adictos, ella no los vera más y yo no los quiero ver más, ella los amaba y yo les temía, solo hay algo en común y es que a ambos nos dolió perderlos.
Es por eso que me preocupaba tanto lo que ella pudiese estar sintiendo, en esos momentos, todo es oscuridad, gris, sin vida, al menos yo tenía a Chanel, me aferre a ella como mi salva vidas, pero...
¿A quién tiene Bryony?
¿Tendrá quien limpie sus lágrimas?
¿Quién la abrace?
No lo sé y eso me molesta, pero más me molesta no ser yo quien pueda hacerlo.
Al terminar mi turno, estoy que me subo por la paredes de la frustración, salgo lo más rápido que puedo y me monto en mi moto, al pasar por la entrada principal me fijo en el conglomerado montón de periodistas que espera alguna noticia de la muerte de los Mathews.
Eso solo aumenta mi deseo de estar con esa hermosa chica de ojos amarillos y corazón destrozado y maldigo mil veces a quien sea por ni si quiera saber dónde vive.
Llego a casa, lo que siento en estos momentos es más grande que yo, es como una mezcla de furia, tristeza, anhelo y ansiedad que me está volviendo loco, no quiero hablar con nadie, por lo que ignoro los llamados de mi hermana y voy directo a mi habitación, intento drenar mis sentimientos pateando lo que más cerca pasa por mi pies, no me detengo, estoy destruyendo lo poco que tengo y ni aun así aquella sensación de ahogo se aleja de mí, termino agachado en un rincón abrazado a mis pierna y escondiendo mi cabeza tal cual como aquel pequeño que huía de sus padres.
Sentí el momento exacto en el que Chanel se acercó y como siempre hacemos cuando uno de los dos está mal, me abrazó, me consoló como si lo necesitara, ella no entendía que no era yo el que necesitaba un abrazo y yo tampoco entendí porque me dolía tanto el dolor de Bryony, ni porque necesitan tanto cuidarla.
Mucho menos entendía esa necesidad de tenerla cerca, de protegerla, de verla feliz, coqueta y sonriendo como en la disco, y no llorosa y sufriendo...
— ¿me dirás qué pasa? — Pregunta suavemente sin dejar de abrazarme — Me asusté mucho cuando llegaste tan alterado.
—Lo siento— me disculpe, ella no tenía por qué haberme visto así, la violencia es un tema delicado para ella — ¡Creo que me enamore! ¿Se puede enamorar de alguien a quien has visto tan pocas veces y que solo fue un poco amable? Parezco un mugroso perro aferrándose al calor y poco amor de su dueño— acababa de llegar a esa conclusión —y es totalmente estúpido porque ella y yo no somos iguales ¿además quien se enamora en una noche?
Ella solo sonrió con lo que pude describir como emoción.
Tape mi rostro con mis manos y luego solo la mire —Me enamore— confirmo para mí y para ella —y ella está pasando por un momento realmente difícil, sus padres murieron, ambos... ella estaba realmente mal. Y yo no puedo hacer nada para ayudarla, soy demasiado poca cosa para ella— vi cómo iba a protestar pero negué con la cabeza, se dónde estoy parado, se quién es ella y quien soy yo, así que no me voy a engañar a mí mismo —quisiera poder estar con ella, pero no puedo y no se ni si quiera si la volveré a ver... Me da miedo lo que ella pueda pensar. Tú y yo sabemos lo que el dolor puede hacer en nosotros, y quiero tener la oportunidad de ser para ella lo que necesite... Solo que no se si ella querrá lo mismo con un hombre como yo.
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Editado: 05.10.2020