Tú

¿Por que tu? 

Jamas creí que me enamoraría de ti pero tu locura, tu amabilidad, tu sonrisa y todo de ti me hacen él hombre mas feliz del mundo.
Quisiera pasar mis dedos a través de tu hermoso cabello castaño , quisiera descifrar lo que tus ojos verdes muestran, quisiera tomar tu delicado cuerpo entre mis brazos, quisiera entrelazar nuestras manos, unir nuestros labios en una promesa irrompible.

Pero no tengo él valor de decirte cuanto te amo y como cambiaste mi vida y mis deseos de vivir.

Cada vez que te preocupas por mi me siento inmensamente feliz.

Quiero decirte lo que siento pero tengo miedo; miedo a perderte y no verte mas.

¿Tu sentirás lo mismo que yo?

Estos días hemos conversado más y nos hemos divertido como nunca en nuestra clase de ingles. Todas las tardes hablamos, cada vez que veo un mensaje tuyo sonrió.

Tal vez mañana pueda hablar más contigo.

Hoy no viniste a la escuela y eso me preocupo ya que ayer me dijiste que nos veíamos hoy. ¿Que te paso?

Te mando mensaje pero no contestas.

Hable a tu celular y a tu casa pero nadie contesta.

Me acerque a una de tus amigas, tu mejor amiga.

- ¿Sabes por que falto Rose? - le pregunte realmente preocupado 

- ¿No te dijeron? - preguntó mirándome con pena y tristeza  

¿Qué te sucedió? 

Negué lentamente con la cabeza con temor.

- Rose esta en él hospital gravemente - me dijo con la voz entrecortada mientras que su ojos se mostr´ban llororsos 

Me quede en shock.

Tu estas gravemente en él hospital y yo aquí sin hacer nada.

- ¿Qué le sucedió? - le pregunté con miedo y tristeza 

 - Ayer cuando iba de regreso a su casa su madre derrapó y él coche se volteo haciendo que el lado donde estaba Rose sufriera él mayor daño - dijo evitando mi mirada 

No lo puedo creer, tengo que verte.

Sin importarme salí de la escuela corrí al hospital, al entrar todo él mundo me observó como si estuviera loco pero no me importo tenia que verte, tenia que saber como estabas.

Fui al escritorio donde se encontraba una enfermera, pregunte por tu, me dijo tu habitación y corrí hacia ahí.

Llegué, toque a la puerta nadie respondió así que abrí la puerta delicadamente y ahí te vi, conectada a tubos que te mantenían con vida, las máquinas eran todo lo que se escuchaba en la habitación, tu piel estaba tan pálida como una hoja de papel, tus ojos cerrados y bajo ellos se podían ver unas bolsas de negras que mostaraban el cansacio y dolor que habías pasado, tu cabello no tenia él mismo brillo pero aun así te veías hermosa.

Me acerque tomé tu mano y la bese, tu piel estaba totalmente fría al tacto, estabas muriendo.

Al verte así me hizo sentir débil y desesperado así que me mantuve a tu lado por horas.

Me quede dormido ahí a tu lado , un leve movimiento hizo que despertara cuando subí la vista te vi, estabas acariciando levemente mi cabeza con una sonrisa tan cálida como él amor de una madre.

- Arthur - pronunciaste mi nombre en un susurro pero tu sonrisa seguía intacta como tu amabilidad y calidez

Tal vez aun tenia tiempo.