Te Amo

ATRAPADOS EN UN MUNDO QUE NO PERTENECEN

15ef4ae024d30d48788912414639.jpg

En un momento muy incómodo, María se indispone cuando escucha a Belmont decirle a Demetrio, que se apresure a tener hijos.

En ese instante, María se levanta de la mesa y les dice a todos:

  • Disculpen, me siento un poco mareada, iré a mi habitación.

María se retira de la mesa y de inmediato Belmont les dice a todos:

  • Parece que hable demasiado.

Brigitte le dice a su esposo:

  • No querido, fuiste todo un caballero, María fue la que se comportó un poco grosera con todos nosotros.

Alizee y Didier también se incomodaron con la retirada tan repentina de María y se quedan viendo las caras.

Demetrio mueve y mueve su copa de vino. Y no dice nada ante la habladuría de la familia.

Minutos después, Demetrio despide a su familia y como un perro rabioso entra en la habitación de María, y le dice:

  • ¿Qué te has creído mujer?... me has hecho pasar la peor vergüenza con mi familia.
  • De verdad que me siento muy mal Demetrio.

Eufórico y sin control alguno, Demetrio tira al suelo un hermoso florero, diciéndole:

  • ¡SON MENTIRAS TUYAS!, ¡TE LA PASAS FINGIENDO A CADA MOMENTO!
  • Cree lo que tú quieras.
  • Así… no sé cómo le vas hacer, pero ve pensando en cómo me vas a dar un hijo, porque si no…
  • ¿Si no qué?

En ese instante, Demetrio se retira de la habitación de María, azotando la puerta de un manotazo.

Barrio Montmartre, sorprendida por lo que le dijo su hija Daniela, Natalicia le expresa:

  • Pero… ¿qué paso?, porque regresaron tan pronto.

Daniela se aleja un poco más de Alexander y le dice a su mamá:

  • Ha sido mi culpa, he vuelto a beber como loca y mi esposo decidió regresar.
  • Espera hija, en unos minutos estaré contigo.

Daniela cuelga el teléfono. Cuando Alexander se le acerca, y le dice:

  • ¿Qué quería la suegra?
  • Viene para acá.
  • Hay no, ¿Por qué le dijiste que viniera?
  • Perdón, es mi madre, a donde yo vaya, ella ira a visitarme.
  • Claro… estaré diseñando en el reservado.

7: 10 pm, Natalicia llega a casa de su hija y la ve con una copa de vino en la mano, y le dice:

  • Te vez fatal, ¿has estado llorando?

Daniela abraza a su madre, y le dice:

  • La situación de mi carrera y todo lo demás, me está afectando mi matrimonio, no puedo parar de beber… tengo mucha ansiedad, porque nadie me quiere contratar.
  • ¿Dónde está Alexander?
  • En el reservado, él no sabe que estoy bebiendo, hace unas horas le dije que no lo iba hacer y mira en las que estoy… espera, voy al baño.

En ese momento, Alexander sale del reservado a descansar un poco. Cuando Natalicia le dice:

  • ¿No vas a saludar a tu suegra?

Alexander se sonríe y le dice a Natalicia:

  • Disculpa, no te había visto suegra, ¿cómo estás?
  • Mal.
  • ¿Qué sucede?
  • Daniela me conto que tu prácticamente la regañaste, porque estaba bebiendo un poco.
  • ¿Un poco?, Daniela tiene problemas con el alcohol.
  • A mi hija siempre le ha gustado tomar, eso es no es un problema, ella es así y así te casaste con ella.
  • Perdón suegra, pero yo no sabía de eso.

Natalicia se enoja más con Alexander, y le dice.

  • Daniela es una actriz de alta alcurnia y refinada, ella sabe cuándo controlarse, y para que sepas, ella está bebiendo un poco en estos momentos. Y quiero que la dejes en paz y no la regañes.

Alexander pierde la paciencia y le dice a Natalicia:

  • ¿Usted me está dando órdenes en mi propia casa?
  • Solo quiero lo mejor para mi hija, nada más.
  • Pues… si quiere que esto funcione, no se meta en nuestros asuntos.
  • No serás tú muchacho, quien me impida eso, tengo que velar por ella.
  • Ella tiene esposo.

En ese momento, Daniela sale del baño y les dice a los dos:

  • Parece que ya se están entendiendo bien…

 

 

 

 

 

 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.