CAP 15 ( Nunca Alaia )

( Alaia pov ❤️ )

Estoy saliendo del taxi, para entrar a la empresa, y no puedo creer que esté embarazada, Dios mío embarazada, es que no se ni como reaccionar, siento tantas emociones, pero si de algo estoy muy segura es que está criatura que está creciendo en mi desde ahora es mi universo, mi vida, mi familia, mi sangre, mi amor, mi todo no se cuál sera la reacción de Alan, tal vez me deje, o no le caiga tan bien la noticia, pero para mí es la mejor de todas no puedo negar que estoy súper nerviosa, y no sé que me espera, pero si se que espero y es algo maravilloso que crece dentro de mi y que será mi única familia de sangre.

— Buenas tardes señorita Díaz— dice la recepcionista, si llegué tarde, pase por la farmacia de la clínica y compré las vitaminas e hidratantes que me recomendó Vero.

— Buenas tardes señorita Gutiérrez, les entrego los documentos y trabajo a presidencia, vice presidencia y asociados.— digo para que me informe de la empresa.

— Si, señorita Díaz, el joven Alan la está esperando dijo que cuando usted llegará le informará — dice dando la información.

— Bien señorita Gutiérrez gracias por la información, pase buenas tarde, y tenga un buen almuerzo, — digo y voy hacia el elevador, justo veo como sale de el la dueña de mi discusión con Alan.

— Buenas tardes — me limitó a decir. Entro al elevador y ella vuelve a entrar, y no se porque. El elevador llega a su destino y voy hacia donde mina a dejar mi bolso y a irme a dónde Alan ya que pidió que lo hiciera de seguro es algo importante de la empresa.

— Mujer ¿Por qué tardaste tanto? Me estaba preocupando ¿Qué te dijeron en el médico?— pregunta mina preocupada y desesperada.

— Te cuento cuando venga de dónde Alan, y no te preocupes no fue nada malo— digo y comienzo a caminar hacia la oficina de Alan. Tocó dos veces pero no recibo respuesta así que entro y no puedo creer lo que estoy viendo.

— Alaia— dice quitándose de encima a la señorita del ascensor.

— Vengo después atienda a la señorita — digo para retirarme, pero Alan me detiene.

— No Alaia te estaba esperando, además ya la señorita Clark ya se iba — dice agarrando su brazo y llevándola hacia la puerta, (la está botando o son Cosas mías).

— ¿Por qué la llamas por su nombre? — dice enojada.

— Pues así se llama — responde obvio Alan y conociéndolo intentando no reir, (de que me perdí).

— ¿Enserio Alan?, a tu secretaria le hablas informal y a mi no — dice con desdén y notorio enojo.

— Joven Alan para usted ¿Venias por tu teléfono?, Ahí lo tienes ya puedes retirarte tengo que atender a Alaia— dice y waoo ¿Qué está pasando?.

— Como digas me voy — dice y sale empujando la puerta, gracias a Dios y es socia puede pagarla si se rompe, y que carácter.

— Perdón por lo que viste Alaia— dice acercándose a mi— te extrañe me estaba preocupando.—dice y me da un beso en la frente.

— Un momento, caballero — digo separando su cuerpo — ¿Qué hacia esa mujer prácticamente robando tu oxígeno? — digo mirándolo a los ojos confío en el pero en sus ojos veo la verdad y viéndolos bien mi semillita tendrá unos ojos preciosos, hay por Dios estaba olvidando ese detalle.

— Cariño viste que la separé de mi, ella es la que se pone en esa posición de coquetear— dice acariciando mi mejilla con su mano tan suave.

— Bien, confío en ti recuerda, pero para la próxima no dejes que se acerque, casi te deja sin oxígeno.— digo y lo abrazo, el hace lo mismo y nos quedamos un momento así.

— Pir cierto Alaia ¿Qué te dijo el médico?— me dice y recuerdo que tengo que decirle a Alan lo de mi embarazo, y no sé si es momento.

— Este, Alan tengo que decirte algo— digo nerviosa.

— ¿Pasó algo malo, tienes algo malo?— pregunta preocupado.

— An, no, no, solo es que...— no termino porque suena el teléfono y va y lo toma, habla, al parecer es su hermano, termina y regresa a dónde me senté.

—¿Me decías?— pregunta sentándose frente a mi. Y solo me quedo viendo su rostro, y me pregunto si tengo que contarle ahora o después, hay por Dios no se ¿Cómo es que le dices a alguien que espera un bebé? Cómo me gustaría tener a Vero aquí ella si que lo sabría decir.

— No nada, que todo está bien, solo fue lo que te dije hidratación, mal alimentación y estrés — digo olvidando el detalle de mi embarazo.

— Oh, bien entonces está noche tu y yo una ¿Cita? O ¿Cena?— dice algo emocionado y confuso se ve tan tierno.

— Lo que quieras — digo y le doy un beso en los labios, tocan la puerta y Alan dice un pase y es zair.

— Perdón si los interrumpo, es que Lorena quiere vernos para darnos el reporte de finanzas y Aran, tuvo que salir al hotel con los hermanos Reynolds, para una junta allá — dice disculpándose y diciendo el porque.

— No te preocupes, ya me iba — digo parándome de el mueble y dirigiéndome a la puerta.— y Alan a las 20:00 pm, no me hagas esperar o te irás solo.— digo y cierro la puerta. No se cómo lo haré pero ahora tengo que ver cómo hago para que a Mina no le dé algo con la noticia además ella podrá aconsejar de como decirle a Alan sin que se desmaye.

— Tienes que contarme que te dijo el médico.— dice mina recogiendo su bolsa para ir a almorzar.— Lucas me llamo y me dijo que pasó por Sofi y adivina quién está allá mejor no, luck, almorzara con nosotras — dice y pasa mi bolsa.— vamos antes que venga zair está algo extraño — dice y esperamos el elevador.

— ¿Por qué lo dices?— digo intrigada.

— No se, me invita a salir, pregunta por Sofi, la pasa a buscar, me trae regalos, flores, rosas, helados, me llama mil veces a la oficina e incluso sin querer nada, hasta se le olvidó como hacer un nudo de corbata— dice y reímos.

— Te está cortejando, a una manera loca pero lo está haciendo, y tú te estás haciendo la loca— digo y subimos al elevador, pero antes de cerrar la puerta zair la detiene.

— Por Dios, casi lo perdemos— dice y Alan entra y luego zair. No sé pero cuando se cerró el elevador, hubo un momento tenso, y silencioso, no se ustedes, pero es uno de eso silencios donde quieres reir y no puedes. Se escucha el Tim de la llegada del elevador, salimos y al salir reímos.