Abrazo a mi amiga una vez más, tengo que partir al terminal de buses, tengo el boleto y mi maleta lista.
—Pórtate bien— le susurro a mi amiga.
—Solo traeré un par de chicos— sonríe tímida.
— ¿Por qué pienso que solo será un hombre?—pregunta mi novio casualmente— y que su nombre empieza con “W” o bueno” L”— Mi amiga se sonroja inmediatamente.
Lucas se refiere a que Kathe podría invitar a Liam a casa, ya que ellos han tenido una cercanía poco habitual, almuerzan juntos, Liam se ofrece a llevarla a casa cuando me voy con Lucas, estudian juntos.
Se podría decir que tienen una muy buena amistad, pero todos hemos notado como Liam mira a Kathe. Siendo sincera me encantaría que Kathe tuviera algo con él, Liam a pesar de todo es un buen chico. Además ya pidió las disculpas correspondientes por lo que pasó. Cuando Diego se fue estuvo ayudando mucho a Kathe a subir su ánimo.
—Te equivocas, solo me dedicaré a estudiar esta semana— objeta Kathe y luego se cruza de brazos.
—Como digas — Lucas levanta las manos en señal de rendición — ¿vamos?—asiento y salimos de mi casa.
Cuando llegamos al terminal Lucas me abraza fuerte.
—Estaré ahí en dos días — besa mi mejilla — como me encantaría aparecer un boleto mágicamente e irme contigo.
Debido al fin de semana largo, todos los pasajes se han agotado, Lucas pudo comprar pero con dos días de retraso.
— No te preocupes— sonrió, pero soy consciente de que no es la mejor sonrisa que le he dado— te estaré esperando.
—Te echaré de menos.
—Y yo a ti— pasos mis brazos por su cuello y lo beso.
—Además, tenemos una situación pendiente— el calor sube a mis mejillas— no creas que olvido lo del otro día.
Tuvimos un momento fogoso el otro día, más de lo habitual, fue por iniciativa mía, pero no sucedió nada más, mi novio se alejó un poco intentando controlarse entonces le dije a Lucas que podía hacerle un masaje, ya que estaba cansado, pero no para hacer que se olvide de lo que casi sucede, lo juro, pero sin querer él se quedó dormido, no quise despertarlo parecía un lindo bebé. La situación no se ha vuelto a repetir, pero Lucas cree que he estado evitando que pase, quizás mi subconsciente es el culpable.
El bus que me llevará a mi ciudad acaba de llegar y sé que es tiempo de despedirme. Este último tiempo lo he pasado todos los días con Lucas, no creo que me guste estar sin él 2 días.
—Debería cambiar el día de mi viaje.
—No— me sonríe tierno y acaricia mi mejilla— disfruta estos días con tu madre y hermano, porque cuando llegue no te daré tiempo ni para respirar.
—Bueno— hablo bajito, tiernamente.
Beso a mi novio apasionadamente, luego tomó mi maleta y se la entrego al asistente del bus, este le pone una etiqueta y me entrega un número, le paso mi boleto y luego entro al bus.
Busco el asiento número 15 y me acomodo al lado de la ventana. Puedo ver a Lucas, se despide con la mano y luego forma un corazón con ambas manos, tiene una sonrisa triste, en forma automática le mando un beso, alguien se sienta a mi lado, pero no me fijo de quien se trata, mi vista está disfrutando de un espectáculo increíble.
El bus inicia su marcha y Lucas me hace un gesto con la mano, que identifico como que vea mi celular.
Novio Perfecto: Ya te extraño :'(
Una sonrisa se forma en mi rostro al ver el nombre que se a puesto el mismo.
Yo: Yo también te extraño.
Ya casi no veo a Lucas, porque el bus ya ha avanzado bastante, él me sonríe y me tira un beso.
Novio Perfecto: Ya no te veo, olvide como se respira.
Yo: me bajaré.
Novio Perfecto: Sólo bromeó, pásalo bien, te veo en dos días.
Yo: Te estaré esperando ♡
Me pongo los audífonos y selecciono mi lista de música, cierro los ojos e intento relajarme, serán varias horas de viaje.
(…)
Alguien golpea mi hombro suavemente, no estaba durmiendo, pero si estaba muy relajada. Miro hacia mi acompañante.
—Disculpa, solo quería saber la hora, mi celular se quedó sin batería.
Pongo una cara de fastidio ante la situación, el chico que no aparenta tener más de 25 años me sonríe amablemente.
—Son las 22:50— respondo amable.
—Muchas gracias— y esa fue toda la conversación que tuvimos.
Una vez que llegamos a nuestro destino el chico me habla nuevamente.
—Yo bueno...— se rasca la cabeza nervioso— quería saber si te gustaría ir a tomar algo conmigo.
Me confunden sus palabras, sus ojos esmeralda tienen un brillo especial, su cabello está perfectamente acomodado, si Lucas no fuera mi novio hubiese mirado más de la cuenta sus atributos.
—No gracias, tengo novio— respondo un poco antipática.
—Oh— dice algo desilusionado, su cuello y rostro están algo rojos de vergüenza— será hasta la próxima—dicho eso se levanta rápidamente y baja del bus.