¿Sabes que es lo divertido de la golfas?, que son mas fáciles de matar, se ofrecen tan fácil que incluso sus desapariciones o muertes no so relevantes para nada; bueno este es el caso e mi querida y hermosa Rona, una linda pelirroja que se a acostado con a mitad de la escuela, tal vez no esta bien que mate chicas pero no le hará falta a este mundo.
-Por favor, no me hagas daño- empiezo recordar la conversación que tuvimos antes de su muerta.
-Dime zanahoria- tomo unas tijeras de carnicero de mi mesa de herramientas- ¿A que te querías dedicar?
-Quiero ser actriz, quiero estar en obras de teatro- dice mientras solloza.
-¡Oh! querida, seguro hubieras sido la mejor.
-¿Hu-hubiera?
-JAJAJAJA, tranquila esto no dolerá nada... creo.
La tomo de la mandíbula y con delicadeza corto una de sus mejillas. Da un grito desgarrador. Hago lo mismo con la otra mejilla y la sangre empieza a brotar manchando todo a su paso.
-Créeme no es nada personal linda- le digo mientras la veo desangrase.
-Me-me-d-e-r- dice mientras escupe sangre.
-SShhh- pongo mi dedo sobre mis labios- Descansa.
Estoy en mi habitación golpeando la pared.
-¡Maldita sea Meder!, la primera persona que te quiero de verdad y ¿Qué haces?,claro, la secuestras, ¡no podria haber masestupido que yo!- grito a nada.
Después de tener lo puños mas moreteados y ensangrentados, decido ir por un vaso de leche y unas galletas para Violet que pongo en una bandeja. Bajo al sótano, esta mirando en mi dirección con ojos desganados.
-Hola Violet.
-Buenas- dice sin el mayor esfuerzo.
-Te traigo la cena- digo mientras me acerco junto con una silla, la desamarro con la precaución de que no intente algo estúpido como ayer con el cristal verde, que descuidado soy.
-Ya, no voy a intentar escaparme- dice mientras toma el vaso de leche junto con una galleta, forma una sonrisa burlona en sus labios, no por el comentario si no por la comida- Sabes, mi Madre siempre me traía algo parecido a mi closet.
-¿Eh?
-Cuando tenia cuatro años empece a dormir en un closet y casi vivir en el, y Madre siempre que me portaba bien me llevaba un vaso con leche y una galleta-mira al vaso mientras sonríe con malicia, su mirada se vuelve sombría.
-Violet ¿Qué le hiciste a tu Madre?
-Yo, nada- una lagrima corre sobre su mejilla- Charlie acabo con su sufrimiento como si fuera un ciervo- retiro delicadamente la lagrima.
-Mejor come- hace caso a lo que digo y empieza a comer en silencio, detesto verla llorar- Violet.
-¿Si?
-¿Quieres subir?
-¿Qué?
-Si prometes no hacer nada estúpido te puedes quedar arriba- Piensa en mis palabras, tiene miedo de contestar, no me sorprende después de todo debería temerme.
-Si.
La tomo de la mano y subimos al primer piso, observa todo a su alrededor, nunca había venido a mi casa.
-¿Soy buen decorador?
-Si, algo así.
-Ven- vamos a la segunda planta, abro mi recamara para que pase, vacila un poco al entrar- tranquila yo dormiré en la habitación de al lado.